Recuerdo que lloré intensamente antes de caer rendida por el efecto de las pastillas...
Recuerdo que despúes de haberme martirisado por la poca voluntad y por las ganas locas de dejar de sentir todo aquello... mire al cielo y me prometi:
me prometí que no me dejaría estar,
que el orgullo y la cobardía no me iban a ganar,
que decididamente aunque no quisiera ibamos a hablar,
aun que no quisiese lo buscaría y lo obligaría a mirarme a los ojos
y a resistirse a mi.
Me prometí que pese a cualquier cosa estaría ahí,
donde me pudiese tocar.
Prometí que le hablaría fuerte y golpeado,
que no dejaría que me interrumpiera
y que si osaba hacerlo...
lo cayaría con un beso.
Pero aquí estoy entre mis sabanas
tratando de que las pastillas vuelvan hacer efecto...
evitando lo inevitable... la conciencia!
Me retumban los oidos...
se lo que debo hacer,
pero me faltan las fuerzas
y tengo miedo... tengo miedo de no encontrar respuestas!!!!