En tus clases de amor
que siempre fue el mejor
aprendí el camino que llevo
a lo más angosto de tu velo.
¿Reconozco tu mirada?
Por las tarde, ya casi al caer el sol
en diagramas complicados
molidos en viejo crisol
me encuentro solo por todos lados.
¿De que color son?
Estoy ciego y angustiado
con la mirada al cielo
esperando en tu suelo
que me digas que estoy aliado
a tus estupefactos enojos
sin ver cancelar los ojos
de tu vista en el cielo azulado.
¿Me amas?
Ya la mañana ha terminado,
con su sombra la tarde ha tomado
el último respiro que aquella da
para que digas que no hay nada.
¿Me regreso?
De que valen las palabras
cuando soy de las sobras
que otros discuten que son suyas
sin detenerte cuando huyas
en la miradas dolorosas
y no sean mas que rosas
que miras en tus ojos
sin yo tener mis enojos
sin verte a escondidas.
Texto agregado el 19-03-2007, y leído por 90
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