ILUSIÓN
Como todas las noches el pescador salía en silencio de su solitaria cabaña; arrastraba su red por la arena señalando su camino hacia el mar.

“Allá va otra vez el loco…” decía todo el pueblo, nadie entendía como salía a pescar por la noche, cuando la oscuridad nos trastorna los sentidos y la marea se torna mas traicionera. Mucho menos podían entender como después de exponerse a tales peligros, cuando en su red se enredaban peces de diversa índole, suficientes para venderlos en el mercado y vivir cómodamente; este pescador los devolvía al mar diciendo “no son para mí, no son lo que yo busco”. Nadie se explicaba como podía devolverle al mar tan fabulosa pesca.

Pero lo que nadie sabía era que él no quería vender pescado para sobrevivir y conformarse con lujos materiales. El no quería atrapar en su red medios para vivir o pasar un tiempo, él quería encontrar una razón para vivir, él quería algo que diera luz a su vida, era por eso que salía de noche e intentaba pacientemente pescar el reflejo de las estrellas. Si, él quería su propia estrella, así pareciera inútil, él tenía la convicción que un día lo lograría por eso todas las noches tendía sus redes sin importar la oscuridad o la fuerza de la marea , en realidad no le importaba si en su intento perdía su vida, prefería perderla por su sueño que vivirla por vivir. Y la razón de su vida era una estrella y este sueño era la fuerza que lo empujaba a perseverar en su intento, así todo el mundo se riera de él y lo llamara loco.

Una noche cualquiera, el pescador vio en el agua cobalto del mar nocturno, el más incandescente reflejo, era el reflejo de la estrella mas hermosa que había visto hasta aquel momento. Inmediatamente alzo su vista al cielo, aquella luz iluminaba todo a su alrededor, era la luz mas especial que había conocido en toda su vida, inundándolo todo de alegría, llenándolo con una sensación de
confort y esperanza.

La estrella, que cruzaba de prisa, se extraño de ver a un ser humano desafiando al mar a esa hora de la noche. Nunca había visto que un hombre cruzara solo el mar en una barca que se veía tan endeble. Entonces se detuvo
ante el pescador y le pregunto quién era y que hacía tan solo en aquel lugar aun exponiendo su vida.

Él quedo extasiado al tener al fin tan cerca lo que siempre había deseado, el motivo de sus desvaríos, de sus inagotables desvelos, su paciencia estaba a punto de brindarle su mas grande alegría, pensaba.
El pescador con un inocente brillo en sus ojos le contesto que el tan solo era un pescador. Ella le preguntó que si estaba su red extendida por todo su alrededor por qué no tenia pesca El pescador le contesto que él no era como los demás pescadores que se conformaban con volver a su cabaña con unos cuantos peces para sobrevivir. Le confeso que él era un pescador de ilusiones, un loco tras un sueño, y ese sueño había sido siempre pescar una estrella , pero desde aquella noche ya no quería cualquier estrella, ahora su ilusión era ella , la estrella mas especial que había cruzado a través del oscuro horizonte de su vida. Ahora estaba convencido que tan solo ella era la estrella que había esperado toda el tiempo.

La estrella que estaba acostumbrada a oír los conceptos de los astrónomos siempre tan solo interesados en que tipo de estrella era, su origen, su medida, su curso y todas esas especificaciones técnicas que se manejaban en el mundo práctico, nunca había escuchado hablar a alguien de aquella manera, y como tantas veces había viajado por el mundo y conocía al genero humano, no podía creer que fueran sinceras sus palabras,- “los hombre siempre mienten”,decía ella “me cuesta trabajo creer lo me que dices”.

Y cada minuto que pasaba el pescador mas se convencía que aquella estrella era su estrella, la razón que tenia para vivir, experimento tantas sensaciones que nunca creyó posible. Era la noche más especial de toda su vida, tanto que no le hubiera importado no volver a ver la luz del sol, con tal de que ella estuviera siempre con él.

Pero la estrella se alejaba poco a poco; aunque a veces pensaba ¿por que no? Tal vez podía ser cierto lo que él le decía, por qué no acompañarlo a través del mar alumbrando su camino? Tal vez ella también podría ser feliz con él. Mas sin embargo hay cosas en la vida que no pueden cambiar y ella era ante todo una estrella y él era un hombre y la realidad es mas fuerte que cualquier sueño, ella tenía que seguir su camino. Y antes de que su conciencia la pusiera en apuros, rápidamente prosiguió su rumbo, dejando al pescador solo. Incluso mas solo que antes de llegar aquella noche.

El pescador, impotente, veía como se alejaba y pronto su rastro de luz fue más borroso por la distancia y sus lágrimas que caían confundiéndose con el agua del mar. Lo ultimo que vio de su estrella fue un punto de luz que se reflejaba y se perdio en el mar, él con sus ultimas fuerzas remó hasta allá y salto de su pequeña barca al agua donde había visto el ultimo destello de su estrella y nado hacia lo profundo del océano por que él sabía que solo allí la encontraría.
Al amanecer la marea llevo de nuevo la pequeña barca hasta la playa, pero esta vez llego sola y en el pueblo nunca se supo nada del loco pescador.

Todos creen que murió ahogado o tal vez algún tiburón encontró en él su cena.

Yo quisiera creer que nado tan profundo que la encontró de nuevo en algún lugar del planeta, y su estrella lo reconoció y no le quedaron dudas de que todo lo que le decía era verdad. Y ahora los dos son estrellas cruzando imponentes el universo. Sé que si veo con atención ahí estarán volando en ese lugar donde no hay espacio ni tiempo. Solo el infinito.


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