EN SERIO, SU OPINIÓN Y CRITICA CUENTEROS…
¿QUÉ SE HACE DE NOCHE?® ISBN México, 2007
¿Qué se hace de noche sino pensar en absurdos, cuando el interlocutor es una lámpara de mano, un llavero pletórico de bronces desgastados y ruidosos? De vez en cuando ceder a la fisgonería furtiva, a los escapes momentáneos… Renegar de la noche, evadir la vida que se agita ajena, exterior al almacén desierto donde dejar los sueños no significa nada más que tu trabajo. Fumar un tanto, entre cavilaciones. Descubrirse taciturno un día feriado, dejarse atrapar por la melancolía mientras se mira sobre las plazas una tormenta de artificios de colores. Beber un trago si se aparece un viento repentino, si se olvidó el abrigo en el buró. Salir entonces apretando el pedaleo, pasar las cuadras, sin tiempo para voltear a ver los rostros enfiestados, sorteando piras improvisadas donde arde la basura trocada en material festivo. Virar a la izquierda, entrar a una calleja desvelada, buscar la llave, respirar hondo un momento, correr el cerrojo, de pasada mirar los retratos de los hijos, entrar en la alcoba donde nadan efluvios de tabaco y alcohol, descubrir a la esposa y al vecino cubiertos de una tenue luz cerúlea que resalta sus contornos encendidos por el sudor fresco… caer en un abismo instantáneo que se abre bajo los pies, degollar al infame con sigilo… Tomar el abrigo, regresar al trabajo, revisar el inventario, fumar un tanto, ensayar un rostro sorprendido, unas palabras ofuscadas, contemplar la posibilidad de un gesto de reproche… ¿Qué más se puede hacer de noche, a ver?
NOCTAMBULARIO
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