Por amor dejó, en ocasiones, su dignidad colgada en un perchero.Salió con el alma desnuda y volvió
con ella hecha jirones.

Sus labios nunca sellaron sus palabras y ellas no supieron devolverle el eco para aplacar la tristeza;
ellos no dejaron que la mueca aprendiera de la sonrisa.

No buscó apoyo, no hubo una columna que sujetara su espalda cuando sintió el cansancio de esta absurda existencia.No pudo sujetarse a unos brazos que dieran seguridad a sus pasos.

Los contratos solo fueron para ella papeles y no por eso dejo de estar asida a sus orillas para no rasgarlos.

En cielos azules envolvía cada promesa y todas ellas se convertian en noche.Emprendió caminos con los pasos contados, solo pudo ser arquitecto de entradas al garaje del sin sentido.


Sus ojos se perdieron en horizontes de ensueño y al alargar la mano la niebla todo lo inundaba.

Herida la piel del alma, huyendo de lodazales quiméricos, pero no hay esperanza para la arena cuando recibe el chapapote de la ola negra, debió pensar...y su alma caminó hacia la noche, no encontro en el dia la verdad.

Tantas veces se dió en la vida, tantas veces lo intentó..., para saber que era solo un parpadeo, que mañana no podría estar...

Ese día aprendió que ella misma era la nada y se quedó en el invisible estado del que no tiene lugar.
La verdad nunca crecerá...la lluvia pudre la semilla desintegrandola.






Erika; la pequeña, la bohemia, la sensible, la inteligente, la mas dulce...así la definian sus familiares y amigos, así la recordarán.