Yo, la peor de todas ( reflexion de Juana Ines) Uneador: lo escribio Juana, ¡no yo!...

Debo confesaros que hoy deje escapar todos mis demonios (que son muchos) , pero hablare solo en voz baja para que nadie escuche mi platica:
¡No soy monja!... Digo, no soy virgen en el sentido estricto de la palabra, sino...como deciroslo...monja, si; virgen tambien, pero...los demonios...los demonios me habitan en piel turgente, en mi pubis de amapola, en mis labios de Circe...¡Que imprecacion a los dioses paganos!...Los he sentido de noche, llegaron a mi estancia y les abri las puertas...y entonces...la lujuria me penetro suavemente como una sibila que se deslizaba por mi cuerpo y besaba mi alma en pecado... y llore, es cierto, llore mucho, con mi mano virgen entre mis piernas, pero no de arrepentimiento, sino de gozo...
El era... es un duque y general del ejercito que lucha bajo las ordenes de...¡Oh!, lo siento, estoy aburriendo con mi platica y aun no os he dicho mi nombre: Soy Sor Juana, pero podeis llamarme... si os complace: Juana, la peor de todas...