Intriga-

No siento, solo deseo.
Ansío demasiado. Mi expectativa te rodea constantemente.
Eres una intriga familiar para mi.
No tengo sentimiento alguno por ti. Solo una inmensa curiosidad.

Eres como la noche. Así de oscura, así de única, así de fascinante.

No te conozco, pero te llevo dentro de mí, dentro de mi abismo. Formas parte de él.

Eres mi pasatiempo preferido. Preguntas, respuestas. Un sinfín de situaciones.

Quiero sentirte. Tu sabor, tu suavidad. Quiero descubrirte. A lo lejos.
Como eso es imposible me conformo con leer tu contorno, tu mirada.
Siento como interactuamos, como hacemos nuestras jugadas. Al final no lo entiendo. Me confundo, y me retiro a mi lecho de tristeza. De añoranza y de auto consolación.

Pero ya es tarde. Te rehúsas a salir de mi mente, de mi retina. Me invadiste. Tu y tu incertidumbre de vida.

Solo por ahora me queda seguir disfrutando de nuestro doloroso misterio, y porque no de mi fría pasión.

Solo me queda intentar descubrirte. Solo proseguir este juego masoquista que le llaman amor.