"La claridad"
No son espejismos los que en sueños aparecen, caminan, van, vienen, y se pierden por lugares que uno transita con frecuencia -¿Sabes dónde?-...
Tal vez la fecha significa algo, lo leyó, "le dijeron", que mas da, "el 5 de diciembre", mueve las manos, y me lo cuenta, como una anécdota.
Entonces la perversión brinca en mi, las vértebras de las divagaciones ramifican en estúpido frenesí, zafo como puedo, es peor que una madera astillada. El halo de misterio que trato de dilucidar es vagamente el principio de lo mas profundo. Comenzó ayer por la noche, yo me despertè de un sueño reparador, y no habìa motivos para pensar que la certeza se esfumaba como cenizas, ni la mas leve sospecha, por lo que decidí investigar. Casi se me olvida donde había estado, cosa que no se decir con claridad. Pero no logro olvidarme de los gestos de la mas variopinta sensibilidad, que llegue a creer que alucinar no es soñar, sino una psicosis de rara especie la que no para de ostentar de una revelaciòn, cosa que a mi no me importaba; me resultó divertido frotar las manos al enterarme
de que algo se preparaba en otras jodidas nebulosas. Y entonces allí me dirigí, con la
consciencia por el aire. El "5 de diciembre" unica pista, una fecha, y alrededor de mi cabeza gotas, y el tintero de la perversidad. Ni torturándome un cónclave, -y yo que padecì torturas-, no me quejé ni una vez. Y ella me sigue, abrazar a la muerte, a la muerte que feneció como el sonido de un rayo en una rama seca..., es otra cosa, estamos juntos, ¿Dónde estamos juntos? esa es otra cuestión. Lo mejor fue que yo agarrase por z y ella por a, al
desembocar en dicha calle, me di cuenta que la
oleada de viento se hizo mas intensa, y la calle
mas desolada que el infierno esperando tifones,
y ella allí. Observé a ambos lados, antes de
doblar por la esquina, y me metì en la fiesta,
actitud infrecuente la que adopté, casualmente,
un mareo y me fui. - Tengo que hablarle -, y yo
lo se tambien, entonces tengo que hablarle. Pero no lo encontraba, había que admitir, que un
escape se pensó frecuente, y no desaparecería
del universo sin dejar una huella. Una probabilidad, muy remota, cuando el canoso de lentes se ponía parlanchin, con su manera extraña de hilar, no por su acento, y esa manera en que canturrea rimando las palabras y desilachando tambien, su extraña sonrisa, pero en un breve silencio noté que nada iba a decirme respecto a lo que yo buscaba, y en todo caso se trataba de otra cosa, eso no era. Ahora yo con el 5 de diciembre dandome vueltas en el marote, buscaría por algun sitio, a el distraído hombre dispuesto a darme mas detalles. Ir a una fiesta de cumpleaños, en estas condiciones, no me
agrada, ahora por cada año que cumplo mas jóven
y mas grande soy. Ya me parecia una ridiculez el asunto del 5 de diciembre, contrariamente a lo que decía, yo no perdi mi escepticismo, ni mis creencias, que ella sepa, sabe...y yo ahora lo se tambien... que el "5 de diciembre"..., lo
leí dijo, no se asustó, intercambiamos dosis de incredulidad, hasta en nuestras miradas de inusitada esperanza, aun asi no quiero que pese sobre mi consciencia un crimen de esa magnitud, aunque me ampara mi inocencia, porque fue un crimen que ella perdiera la esperanza unos instantes. Me lo confesó, por eso se lo vengo a decir a usted, ella machitará como la flor, y no le encuentro explicación lógica. -¿Cumple años
el 5 de diciembre?- - ¡Se muere un 5 de diciembre! - ¿ Que te morís el 5 de diciembre ?
Ella, yo no... ¿Ella quién? -una persona de sexo femenino no puedo decirle mas-. -¿Y de qué año?-
De saberlo no estarìa investigando. Supongo que este año, o no faltará mucho. Me despedì del tipo que, aunque corto de palabras y bastante torpe, me cayò simpático cuando me dió una pista, que deseché por falsa. Y el 5 de diciembre haremos una fiesta sin festejar, esta idea se me cruzaba con la anterior, y la aspereza limando la oscuridad del recinto. A las ocho treinta, no sabrìa decir que hora, de noche en el country, el oficial apuntó su testeo de preguntas, no pude decirle mucha pisca, no se mas de lo que me dijo en un toque. -¿Y qué le dijo?- Nada, solamente que se iba a morir un 5 de diciembre,- morirá un 5 de diciembre -, ¿Y còmo sabe? ¡he aquì el meollo del asunto! ¿Y cómo lo se yo? porque ella me lo dijo, ¿Y como lo sabe ella? dice que lo leyò, pero no sabrìa decirle "donde lo leyò" porque no me lo dijo o no lo sabía, asi que el problema es complicado como ve amigo oficial, que no me atrevo a sacar conclusiones, cualquier conclusión apresurada sería un error en este caso. Lo comprendo, usted tranquilo, váyase. Gracias oficial. Y eso fue todo lo que recuerdo del día de ayer, realmente no se cuando ella me lo dijo, por la distorsiòn que hay en otras dimensiones. Aun creo que ella me persigue, o que todo es una broma, y el 5 de diciembre yo estaré pensando tal vez, si es que puedo recordar, tengo derecho a olvidar un poco.
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