Tan cansado estaba el hombre que un día decidió recostarse en una nube. Se voló la memoria. A los pocos minutos se quitó la corbata y ajustó las mangas de su camisa. Como era tarde no estaba para nadie. Se hizo cielo gris. Se acomodó de costado y llovió para siempre...
Texto agregado el 19-02-2004, y leído por 139
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Lectores Opinan
19-02-2004
Distinta manera de expresar como uno mismo presdipone de que manera mirará y llevará el día a día...un saludo eloisa
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