Olvidada Carolina:
A veces pienso en ti. No es tan grave como parece, solo es de vez en cuando; por ejemplo cuando llueve, o cuando escucho ciertas canciones. No es todo el tiempo, aunque suelo pensar que fácilmente podría hacerlo si me lo propusiera. Muchas veces que no pienso en ti pienso en pensar en ti; tu sabes a que me refiero, cosas como que tan patético sería tenerte todo el tiempo en mi cabeza, o que tan ridículo me sentiría al no haber superado tu amor. Por suerte ese no es el caso, sé que ya no eres más que una sombra de lo que creí querer, incluso amar. Admito que fue difícil. Cuando te fuiste me toco empezar casi desde el principio, pero ahora simplemente ignoro el dolor, esa es la parte fácil, las pastillas ayudan.
Creo que nunca haber sabido porque me dejaste tuvo mucho que ver con la depresión que me siguió durante ese tiempo. Yo intentaba darte todo lo que querías, había cosas que no lograba pero hacía lo posible por reponerlas de algún modo. Quería hacerte feliz, nada más. Cuando tú sonreías todo valía la pena, cualquier sacrificio era lo de menos. Debe ser por eso que nunca te pedí que volviéramos y respeté tu deseo de que no te volviera a llamar, por más que eso me partiera el alma sabía que era lo mejor para ti y espero que en serio te haya servido como esperabas que lo hiciera. En serio lo espero.
Por mi parte que puedo decir… Creo que no había pensado en escribir algo acerca de mí, por lo menos no más allá de lo que ya dije. Nunca te he dicho mentiras, no es mi estilo, por eso no voy a empezar ahora. Es cierto que ya no eres parte central de mi vida, que mis amigos, mi fuerza de voluntad y unas cuantas noches confusas en mi cabeza me ayudaron a dejarte ir de mí; pero aun así nunca te olvidé. Eso no creo que sea sorpresa, a pesar que mi memoria no sea uno de mis fuertes un amor no se olvida, mucho menos el que sentí por ti. Supongo que te estoy diciendo esto es porque nunca tuve la oportunidad de despedirme bien. Siempre alcancé a albergar una pequeña esperanza de volver a verte, incluso de volver a tenerte, ya no. Ahora sé que no te voy a volver a ver, por eso es que esta despedida se me hace tan fácil, porque la esperanza se murió. ¿Quién diría que la esperanza puede ser el peor enemigo de una vida feliz?
Creo que eso último me hace pensar que tal vez ya no hay nada para mí. Por lo menos, si vamos a ser objetivos (y sabes que tanto me gustaba ver los problemas objetivamente), según la creencia general perdí todo lo que me quedaba. Sabes que es lo peor de todo que es una frase que intenta ser optimista la que me hace pensar eso, pues si es cierto que la esperanza es lo último que se pierde, pues hasta aquí me trajo el río. Después de todo algo tiene de sentido todo esto, la esperanza es lo que impulsa nuestros deseos, lo que queremos llegar a conseguir, sea lo que sea. Puede que entonces esté generalizando mucho esto de la esperanza. Supongo que habrá algo que hacer con mi vida, solo que en este momento no lo veo. Como puedes ver tengo un ligero desorden de ideas. Y pensar que alguna vez mi vida fue tan fácil… cuando lo eras todo para mí.
Una vez una amiga me dijo algo que realmente me molestó. No es que lo haya hecho con mala intención, es solo que ese tipo de comentarios que quieren ser de un optimismo ingenuo me sacan de mis casillas. Debe ser porque pareciera que sienten lastima de mí, la suficiente para creer que al pintarme un montón de basura se me va a olvidar lo que me sucedió, o que por lo menos va a cambiar su gravedad; pero eso no pasa. El caso es que me dijo que tú eras como una mariposa, porque la única forma de saber si eras para mí era dejándote ir y que volaras de vuelta a mis manos. Por alguna razón cuando ella me dijo eso lo único que quise hacer fue arrancarte tus alas de mariposa para que no te alejaras. Igual nunca te habría hecho daño. Aunque se que hubieras sido feliz a mi lado, con o sin tus alas. Es algo que ya nunca sabremos, me voy y no nos volveremos a ver, solo recuerda que te amé, ya no.
Alguna vez tuyo, Yo.
Posdata: Ahora que lo pienso esa es otra cosa que me acuerda de ti, las mariposas.