A veces pienso en mujeres esos seres Que un dios enamorado habrá creado Con sus manos tranquilas que aniquilan Con sus sensuales labios y resabios Con sus pechos de Ares y de madres Con su vientre tan tierno y del infierno Con sus bocas de almíbar y de acíbar Con cabellos de encina y guillotina A veces sus olores son dolores A veces sus contornos son adornos Casi siempre me espanto en sus encantos Casi siempre me asombro con sus hombros Decir mujer es cielo y siempre suelo Es refugio que escampa y siempre trampa Es levantar el vuelo y siempre duelo Es un poco de suerte y mucha muerte A veces pienso en mujeres esos seres Que un hombre alucinado habrá creado Imagino un segundo sin su mundo No me imagino un verso sin sus besos
Texto agregado el 17-02-2007, y leído por 143 visitantes. (1 voto)