Entre lágrimas espero a que sonrías.
Te miro sin saber que sentido tengo,
sin saber que papel juego en tu vida.
Podría ser el bufón que te entretiene;
por lo menos él haría que rieras,
así fuera algo ilusorio.
O soy tu guía (espiritual o no).
Te mostraría un camino.
Uno con pocos obstáculos,
o por lo menos libre de dudas.
Pero buscar un papel ficticio no sirve.
Soñar con ser esa pócima mágica
es tan inútil como esto,
esperar entre lágrimas a que sonrías.
No soy lo que quiero,
soy lo que siento.
Y por ti lo siento todo, por eso
(si supiera como)
sería todo para ti.
Por ahora tan solo lo intento.
Soy tu sombra, tu abrigo,
tu trapo para el polvo,
tu piedra en el zapato,
tu mejor amigo, tu superhéroe,
tu amante paciente,
el padre de tus hijos,
el hazmerreír de tu oscuridad,
tu salvador, tu verdugo,
tu desesperación, tu esperanza.
Solo soy eso, o solo eso
creo haber logrado.
Falta mucho, más que una vida.
Tú eres lo que necesito, mi todo,
no mereces nada menos que eso…
nada menos que todo.
Por eso intento, por eso lucho.
Algún día sabrás lo que quiero decir,
ese día no habrá lágrimas,
por lo menos no las nuestras. |