Nunca pensé que luego de un año y medio estarías tan cerca mío y sin darme cuenta.
Fantasié demasiado con el día en que por mera casualidad nos encontraríamos en algún lugar exótico... tú con barba, y yo con unos kilitos de más, tal vez en algún país fuera del mapa, en invierno o tal vez en un verano caluroso, solos... ya que hasta la fecha no lográbamos encontrar nuestras respectivas almas gemelas... solos, con muchas preguntas que hacernos y con una necesidad enorme de querer reconocer nuestros rostros después de tanto tiempo.
Fantasías, ideas que revoloteaban en mi cabeza las tardes de domingo, cuando no había nada que ver en la televisión, cuando ya había terminado mi 3er libro del mes y sobretodo... cuando estaba nostálgica pensando en tí. Jamás pasó por mi ilusa mente, un tanto retorcida por la añoranza, que ahora cuando las cosas marchaban bien en mi cabeza, que la ansiedad era un asunto superado y sobretodo cuando tu recuerdo era algo con lo que podía vivir tranquila [sin tomar tanto caldo de cabeza...] ¡PAFF! apareces así, sin previo aviso, sin decirle nada a nadie, soslayada y cautelosamente evitando ser reconocido... apareciendo en MI vida, MI ciudad, y en MI concierto de Los Tres.
¡Esto es tan injusto! yo no quería volver a este estado idiotizado de existencia... donde me encuentro suspirando cada 5 segundos, donde la sola idea de tenerte cerca me pone los pelos de punta y la ansiedad me anuda la garganta... siento horror al pensar que no quieras verme o que simplemente ya estás con alguien más, siento pánico al pensar que luego de todo este tiempo esperando por tí, pensando en tí, cerrándome a otras posibilidades de conocer otras personas haya sido en vano ya que tú simplemente ya me habías tirado a tu baúl de los recuerdos...
No, nonononono!
me rehúso a creer eso.