RECUERDOS DEFORMES
Recuerdo
la higuera de mi jardín
en las noches de verano
Recuerdo
mi muñeca de trapo
su deformidad de muñeca
su deformidad de trapo
su deformidad deforme
La recuerdo
cuando miro en el espejo
y tropiezo con mis ojos
Recuerdo
tu canto mortal
tu mueca gastada
Recuerdo
la tarde en que corrí
sin pies
salte sin piernas
volé sin alas
y morí.
Me ahogué
en mi propia sangre
hasta llegar a ser
un extraño caminante
que no encuentra la llave
para abrir esa puerta
cerrada eternamente por tu mirada...
Texto agregado el 17-02-2004, y leído por 319
visitantes. (5 votos)
Lectores Opinan
05-04-2005
Nunca es tan malo, mirarse. Sobre todo cuando no te haz mirado jamás. Equivoco
17-11-2004
Una vez más has logrado descender a la fría soledad, pero siento que dejas encendida la esperanza tás esa puerta... Te admiro mucho. Mandragoras
Los espejos son algo recurrente que te funciona bien. O tienes problemas con espejos o te fascinan. "Me ahogué
en mi propia sangre..." es un lugar común que me resultó molesto. Una mirada tras el espejo. gammboa