Porque nada es eterno, ni siquiera el olvido...

Podría decir tantas cosas
podría admirar a la luna en el firmamento
o quizás, oír a la noche cantar en la lejanía
podría dedicarte un verso más
cada día mientras te pienso
pero, el cielo está estrellado
podría decirte que el océano reposa en silencio
mientras los astros descansan al ver su reflejo perderse en el olvido
podría decirte que la luz de la esperanza
vuela en medio de las tinieblas
que las sombras temerosas juegan con la desesperación
y que el murmullo de miles voces vacías
resuena allá a lo lejos
como cuando las olas del mar gritan
en la desierta playa de la soledad
podría extender mis brazos para abrazar al infinito
o quizás, besar tu recuerdo hasta cansarme de amarte
cerrar los ojos y partir hacia la nada
con un beso dormido, un sollozo ahogado
con una mirada triste y un destello callado
Podría, enviar un susurro con el viento
quizás podría estar a tu lado, sin que te dieses cuenta
o tal vez, podría sellar esta carta
con el tibio anhelo
de un día verte.