No me gustan los artificios, ni los pensamientos maquillados tras la luz de la inspiración.
Hoy solo quiero escribir algo, tal vez una reflexión , tal vez un poema así que dejemos que sea la improvisación quien desnude lo que siento.

Empezaremos por decir que es de noche, que a mi alrededor la oscuridad y el silencio son la melodía que acompañan a mis dedos resbalando en el teclado. Estoy acompañado por la amiga soledad, indispensable dama que abriga a las noches que se tiñen de desvelo, noches como esta en las que la imaginación vuela a mil lugares sin ser capaz de detenerse en ninguno.
Pienso en la vida, en ti y en mi, en lo tuyo y lo mío, pienso en nosotros, y quizá también en ellos, personas que nos acompañan cuando nuestras vidas dejan de ser paralelas.
Pienso en lo que sueñas, en lo que anhelas, en las cosas que te quedan por hacer. Pienso en como sonries, en la manera en que mueves tus manos, en aquello que transmites sin alardes del lenguaje.
Pienso en que me gusta escucharte, atónito y silencioso como un pirata que busca furtivo una palabra hermosa, un comentario perspicaz o simplemente un guiño de complicidad.
Pienso en el silencio, en el matiz que adquiere cuando, como si de almohada se tratase, tus frases descansan sobre el.
Me gusta recordar la forma de tus labios dibujando una palabra, o la curvatura que insinúan cuando inician el ritual de una sonrisa; porque amiga no hay cosa mas linda que ver el mundo reflejado en tu alegria.
Pienso en tu manos, pequeñas cunas sobre las que duerme mi inquietud, en las caricias que esconden, en los sueños que escriben cada tarde en un papel. Me gusta imaginarlas arropando lo que sientes, dandole cobijo a lo mas frágil y sutil de un sentimiento.
Pienso en tus ojos, en la forma con que miran de frente a la vida, en lo hermoso que seria verlos cerrar cada noche. Es lindo imaginar el mundo a traves de ellos, la manera con que desnudan los detalles que hacen de cada momento un recuerdo imborrable en el tiempo.

Me gusta pensar en ti, en mi y en lo que soy cuando estoy contigo. Me gusta hablar del “nosotros”, no como un todo indivisible, sino como las partes de una historia que se escribe por si sola........