y confinado a esta incesante bipolaridad
abrazo el entorno de esas palabras que no hace falta decir
esas palabras que se quedan resinando fuerte en mi pecho
esas que tienes que recuñar con un martillo y un abrazo
vivir para sentirte viva , morir para no sentirte
racimandome en los portales de quien me deje
tu con sabor a iglesia y yo vestido de herejia
vayamos al desván donde guardas tus secretos
a tan inpenetrable fortin que has tejido con recelo
te llevare de la mano y te leere una ultima historia
ese capitulo que fue desdeñado , enterrado en el momento
me retiro para siempre con tu sabor en mis colmillos
Texto agregado el 15-01-2007, y leído por 129
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