La Página de los Cuentos - Texto 'De ánforas, no hay permiso' de FaTaMoRgAnA

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UNO
Es la hora de los vientos
la más siniestra allá en lo ancho de mi tierra.

Ya era hora...

Es la caída de las hojas
cuando bajo el pie la sombra escapa.

Ya era hora...

Es la voz de los dormidos,
de los muertos la que canta...
casi siempre a la mañana
que ronda la esperanza
en nudos cabalgando la historia.

DOS
Acaso los perros andan sueltos?

En Lonquén los hornos no esperan

Que se pudra, que huya
que se vaya en jet a donde pueda.

Nadie lo quiere en esta tierra.

Acaso un yunque será amarrado a sus tobillos?

El desierto tiembla, en el sur la tierra llora.

Nadie lo recibe, tampoco un barco de torturas

A dónde irá si no es al fuego?

La tierra tiembla,
no abre su manto fértil
para guardar la ignominia de esta hora.

TRES
Acaso los perros andan sueltos?
Acaso no era la sombra allá afuera al doblar la esquina?

No milito en parte alguna,
sólo habito al norte de la poesía ,
al sur de la belleza
al centro de las palabras
que quieren ser historia
memoria de mis siglos.

Acaso no debo ser la voz de los colgados
de los muertos, de los desaparecidos?

Maldita sea mi palabra
si no canto, si no grito...

Acaso los perros andan sueltos?

Pregunto:
Acaso los perros andan sueltos?

FATAMORGANA
Patricia Lara Arriagada

Texto agregado el 10-01-2007, y leído por 443 visitantes. (21 votos)

Lectores Opinan


	19-05-2007		Interesante, con letras mayùsculas. Me dejaste emocionado. Saludo. Jazzista



	08-03-2007		Tremendo, estremecedor. Político y, sin embargo, a pesar de.... o quizás por ello mismo, tremenda y desgarradoramente poético.***** kucho



	20-01-2007		Con fuerza y carácter. Parece estremecer los puntos cardinales y sin embargo encierras las verdades desatadas, que se escucha en el corazón de los desaparecidos como en la demás gente concientes. Los perros ladran, en las esquinas suelto sin amos, carroñeros y tiñosos.!!***** terref



	17-01-2007		Sentimientos estampados sobre el lienzo de quienes te leemos. Posicionamiento íntimo frente a la injusticia y canto triste para ser escuchado por quienes duermen. Mi respeto y mis estrellas. graju



	17-01-2007		Sòlo puedo decirte que me uno a ese sentir amiga, y que se fue muy fuertey es normal el dolor que te produce. Besitos Patricia******** Victoria 6236013



	17-01-2007		Un poema que desde un comienzo despierta las emociones del lector, ese lector que vivió la época más siniestra de la historia de mi patria. Un texto que lo primero que llama la atención es que está bajo un simbolismo numérico: uno, dos y tres que son precisamente la triada más trascedente dentro de la mayoría de las religiones que han existido en la humanidad. Para muestra: "Dios", "El Hijo" y "El Espíritu Santo" dentro de la religión Católica. Pareciera ser que Patricia, quisiera darnos a conocer que la muerte de ese personaje diabólico que rigió los destinos de mi país, a pesar de estar envuelto en esta tríada, no hay lugar para él en ella, pues sólo existe el fuego al que voluntariamente quiso ir después de muerto (su incineración), con la lejana esperanza de pasar sólo esa vez por él fuego (el que obviamente debiera purificarlo; pero en su caso no es así, pues arteramente escapó de la ley del hombre), lo que claramente no puede ocurrir, pues nadie lo querrá recibir en ese plano que para los creyentes existe; lo único que le queda es residir en el silencio de su propia ánfora hasta el día que nadie quiera guardar sus cenizas y así se pierda en la oscuridad de la cual nunca podrá escapar. Ufff, si hasta nos dice casi como en un grito, que será maldita si no canta el que ciertos perros no debieran andar sueltos en ningún lugar. Un texto, que no sólo puede tener la interpretación que yo le doy, sino que puede interpretarse de muchas otras maneras, lo que dependerá de la lectura no lineal que se haga de él. Un texto poético bien estructurado, con buen ritmo y con imágenes que despiertan la imaginación del lector. Nuevamente, todas las estrellas para iluminar esa pluma tan creativa, para que sigas escribiendo con el alto vuelo literario al que ya estás acostumbrada. lionel



	17-01-2007		Un poema que desde un comienzo despierta las emociones del lector, ese lector que vivió la época más siniestra de la historia de mi patria. Un texto que lo primero que llama la atención es que está bajo un simbolismo numérico: uno, dos y tres que son precisamente la triada más trascedente dentro de la mayoría de las religiones que han existido en la humanidad. Para muestra: "Dios", "El Hijo" y "El Espíritu Santo" dentro de la religión Católica. Pareciera ser que Patricia, quisiera darnos a conocer que la muerte de ese personaje diabólico que rigió los destinos de mi país, a pesar de estar envuelto en esta tríada, no hay lugar para él en ella, pues sólo existe el fuego al que voluntariamente quiso ir después de muerto (su incineración), con la lejana esperanza de pasar sólo esa vez por él fuego (el que obviamente debiera purificarlo; pero en su caso no es así, pues arteramente escapó de la ley del hombre), lo que claramente no puede ocurrir, pues nadie lo querrá recibir en ese plano que para los creyentes existe; lo único que le queda es residir en el silencio de su propia ánfora hasta el día que nadie quiera guardar sus cenizas y así se pierda en la oscuridad de la cual nunca podrá escapar. Ufff, si hasta nos dice casi como en un grito, que será maldita si no canta el que ciertos perros no debieran andar sueltos en ningún lugar. Un texto, que no sólo puede tener la interpretación que yo le doy, sino que puede interpretarse de muchas otras maneras, lo que dependerá de la lectura no lineal que se haga de él. Un texto poético bien estructurado, con buen ritmo y con imágenes que despiertan la imaginación del lector. Nuevamente, todas las estrellas para iluminar esa pluma tan creativa, para que sigas escribiendo con el alto vuelo literario al que ya estás acostumbrada. lionel



	14-01-2007		Doble pregunta y quizás múltiples respuestas. "Maldita sea mi palabra / si no canto, si no grito... " ¿y qué es esto sino un canto a la justicia, una oda a la libertad de los hombres? Tu espíritu anhela la justicia y por eso se rebela en verso. Es hora de serenarse, dejar que la historia diga, tú ya lo has hecho magníficamente bien. Un abrazote y estrellas... neus_de_juan



	13-01-2007		"Sólo habito al norte de la poesía" que verso hermoso en su simpleza...Realmente es muy bello y la repetición de los versos le da una musicalidad bellisima...Un saludo desde la tierra de la poesía... nikita



	13-01-2007		Es la caída de las hojas cuando bajo el pie la sombra escapa. Me sobrecogieron estos versos, sublime poesía, todas las estrellas son pocas para tí india



	13-01-2007		"maldita sea mi palabra sino canto sino grito" esooooooooooooo¡¡¡¡¡¡¡ como decis vos cinco estrellas vienen volando anouka



	12-01-2007		Más que metáforas son verdades certeras, que van golpeando cada vez con mayor intensidad al lector a medida que lee, obligándolo a razonar, pues son unas líneas de un exquisito poderío poético y destreza, a la hora de desarrollar el ingenio y su talento.... churruka



	12-01-2007		Muy bien escrito. omenia



	12-01-2007		Entiendo tu sentimiento y lo acepto, todo lo sucedido ha sido terrible. Ya no hay nada que se pueda hacer por los muertos, y esa ira que se lee es una carga muy pesada para tu espalda, aunque quizas para tí sea un balsamo. Un beso ... NANAI



	11-01-2007		Y que grande es limitar al norte de la poesía, al sur de la belleza y al centro de las palabras! Un saludo cariñoso. loretopaz



	11-01-2007		Es fuerte y estremece. Tus metáforas llegan muy hondo, y remueven tantos recuerdos, tantas rabias escondidas y amordazdas. Gracias por expresar lo inexpresable y ofrecer tu voz para gritar el dolor, la rabia, la impotencia de aquellos que ya no pueden hacerlo. ¡Un abrazo! loretopaz



	11-01-2007		UNO: ¿Cómo ser breve para una historia/ de cuyas hojas aún no termina la caída./ DOS: Pues que se sepa;/ los aullidos de los perros del averno/ se resisten a tal profanación./ TRES: Cerca de tu voz que no milita/ otros perros siguen sueltos/ pero esta vez/ son los ladridos de la bestia/ los que gritan/ ... BaronRojo



	11-01-2007		noto en tu poesía al viento como constante, en él se desplaza la palabra y se presiente al yo lírico. De alguna forma después se establece la propia estadía en la palabra misma cuando se dice que se habita en la poesía, en el centro, así se deja de abarcar un cuerpo y la historia llega a través de las palabras, quizá también la vida, la muerte. Hay una línea que me sorprende mucho y es aquella que inmeditamente después hace referencia a la voz, a llevar en la voz el diálogo, la poesía, la historia de los muertos. Cuando pienso en eso... imagino que de alguna manera todos llevamos la historia de nuestros muertos al volvernos mensaje, lengua. Eso me parece muy bello, puesto que hacemos a la historia profunda en sus grietas y en esa profundidad nos volmeos también parte de la historia, de lo que dicta el tiempo y nos mantiene aún cuando dejamos de habitar un cuerpo, cuando decidamos -o se nos imponga- el volvernos aire, viento, desplazamiento. Efectivamente es un texto fuerte como bien señalan los comentarios anteriores. Pero eso también es algo que observo como constante en tus escritos. Cuando te leo me haces pensar en Pizarnik, con sus ángeles y demonios, con sus infiernos, con su dolor, pero a diferencia de ella, con la certeza de un mejor mañana, de un camino. amayrany



	11-01-2007		Guau, es fuerte este escrito, muy introvertido, como una telaraña que encierra y amordaza a la presa, es interesante tu propuesta impresa



	11-01-2007		Es complicado comentar un texto que hace señalamientos a un muerto, sobre todo a un muerto odiado. Pero leído sin el peso de la moral, puede advertirse que es un texto débil en su construcción, incluso descuidado. Quizás se debe a la prisa por expresar el rencor de decir lo que otros muertos no pueden decir. Si algo le sobrevivirá a este texto, será la rabia de la incertidumbre. Omeros

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