Estaban descansando en el pasto y mirando al cielo en busca de nuevas figuras que las nubes pudieran les brindar. El no lo podía creer, encontró el mapa del mundo en una nube, y en ese momento ella dijo algo desinteresada: -Me gustaría tener un diamante oscuro. -Un diamante oscuro- penso el- que cosa mas extraña para desear. Acaso sea un poco en serio, lo haré; yo la amo, y en nombre de ese amor tendré que hacerlo, creo. No se supo por que, el creyó que el mundo era tan pequeño, o aun mas, que el visto en la nube, y se embarco en la loca idea de encontrar esa exótica petición. Las hojas de todos los libros no alcanzarían para narrar las peripecias de aquel hombre intentando encontrar la famosa joya. Fueron tantas, que el termino perdiéndose en una de ellas. La mujer, a quien nunca le falto un alguien para amar, se caso, tuvo hijos y familia, olvidando a su antiguo amor por completo. Ella tenia la manía de regalar monedas a cambio de calmar sus temores, algo allí adentro de su cabeza le atormentaba . En una de sus limosnas, entrego el dinero a un hombre extraño, parecía que le faltara algo. Era el. Ella le pregunto como había llegado a ese lugar y el le contó que, al no poder encontrar lo buscado por tanto tiempo, decidió ofrecer su alma a quien la deseara para lograr su objetivo, y de esa manera, en medio de su locura, termino allí. Mientras el le contaba sus aventuras fueron caminando, y no tan coincidencialmente, llegaron al lugar en el que se realizo la petición.
!oye!-exclamo ella- Podrías decirme si al fin conseguiste lo que te pedí?. -Claro-le dijo el-Tu no has visto el cielo, verdad?. Ella le comento que, como una forma de homenaje, se juro no volver alzar la mirada mas allá del horizonte. El le solicitó que se recostaran en la hierba, igual que aquella vez, pero con los ojos cerrados. Tendida ya, le dijo que los abriera y ella quedo estupefacta, al ver un diamante oscuro, del tamaño de un elefante, enclavado en el cielo. Solo pudo reaccionar cuando una sombra en forma de luz salía del diamante, y reposaba en el. Ella le dijo que lo amaba, tanto, que haría lo que fuera por el. Cerro los ojos para darle un beso, pero no se topo con nadie, y cuando los abrió, ella se dio cuenta que el, había desaparecido.