....una fila larga y negra, ondulaba viviente entre hiervas. En apariencia una escueta columna pero, cada hormiga cumpliendo su función.
Todas parte de una maquina perfecta de cortar, acarrear almacenar...acaso ni el mejor de los ejércitos de los humanos logra tal perfección.
Al mejor y más evolucionado Mosqueterismo todas para una y una para todas.

Una de ellas llevaba un trozo de hoja que fácilmente era 5 veces más grande que su negra hormiguidad, a duras penas avanzaba, con torpes pasos.
Acaso por que la hoja le cubría sus antenas es que ni se dio cuenta de la presencia del enorme OSO HORMIGUERO.
El pobre insecto lo vio y pegó un salto. En un primer momento amenazó al mamífero con sus pinzas. jaja...cómica postura, sin duda instintiva.
Con la lengua áspera el cuadrúpedo animal le pego un bofetón.
La renegridad hormiguita se lanzó en veloz carrera a campo traviesa.
Mientras ella desesperada, trataba de tomar distancia de quien pretendía convertirla en almuerzo..... El comensal, con lenta parsimonia se rascó con vigor un costillar, sacudió la cola marrón que parece un plumero, bostezo ruidosamente; macullo un pedacito de pasto y luego, con menos de un 1/4 paso alcanzó su presa.
Exhausta la víctima, jadeante y sin aliento entregada a su destino sólo atinó a preguntar con enfadado tono:

--Habiendo tantas Hormigas..¿ Por qué me persigues a mí?.

El OSO primero se sorprendió por la tonta pregunta. Luego dijo:

--Me gustas... te observo hace días.. Estoy enamorado de ti.. ¿no quieres que tengamos ositos hormigueritos?