La evolución de la maleza se come al pasto tierno

Somos el reflejo de nuestro entorno,
Hemos crecido sobre los ríos de asfalto
y vemos como la ciudad se marchita.

Las buenas costumbres han emigrado,
Las paredes son retocadas con plomo
y las flores son regadas con sangre.

Ya no se camina con parsimonia,
flechas nos despojan de nuestros bienes
y estas saetas jamás caen al suelo.

El sol se ha llevado los colores,
A cambio nos trajo cemento, vidrios y espejos,
y en ellos se divisa la monocromía en sus reflejos.

Base - 10 de febrero de 2004