“Prestamos personales a sola firma”pase y vea.


Iba caminando al supermercado “chino” que queda a unas pocas cuadras de casa; tenía mi lista en la mano y la plata en los bolsillos.
En el camino me tope con aquel local que solía tener tapados con hojas de diario sus vidrieras, pero que ahora habían colocado, por lo visto, una casa de venta, de no se qué.
Pegadas en las vidrieras había un cartel que anunciaba:”Prestamos personales a sola firma”. Decidí pasar solo por curiosidad y para, en cierto modo, darle la bienvenida al barrio a quien sea que había comprado ese local para hacer de él una casa de negocio.
Detrás del mostrador un hombre me sonrió
- Buen día señor, en que lo puedo servir?
- Que tal? Yo solo pasaba por acá…bonita tienda ha instalado, todo es muy nuevo…
- No señor, este local tiene mas años que las cucarachas- sonrió- desde los comienzos de la historia mas o menos…
- Ah!. Usted sí que es chistoso… la verdad es la primera vez que la veo
- Cómo creerá usted que le miento?
- No lo se…- dije con ironía- bueno la verdad no se para que entre…de curioso no mas. Me voy yendo.
Di media vuelta sobre mis pies y encare hacia la puerta cuando…
- Yo se porque entro usted aquí
Sonreí por lo bajo…”que atrevido, qué se cree, que es Dios para saberlo todo?”. De igual modo dije:
- Ha si? Mire usted que bien…dirá eso para que no me valla con las manos vacías verdad? Valla truco eh!
- Tus manos vacías?, sí es verdad, pero no es lo único vació que sientes tener …?
Revise mis bolsillos y mostré mis billetes para hacerle saber que dinero no me faltaba , solo que no me interesaba comprarle absolutamente nada, auque ese local me producía una fascinación y un estremecimiento sin igual, y no se si lo eh dicho, pero soy un comprador compulsivo, y a fuerzas de voluntad me quede plantado allí en el lugar esperando qué era lo que el hombre me podía vender, dicho objeto o lo que fuese que sea, él aseguraba que me hacia falta.
- Basta hombre! no tiene porque mostrarme su dineral…yo se perfectamente lo que busca, de otro modo jamás hubiera visto esta tienda…Es claro hombre! A usted le falta algo, y ese “algo” es muy importante…
Ante mi mirada estupefacta, sacó unos papeles que decían de titulo: “Información al cliente”. Me lo tendió y lo tome en mis manos y leí apresuradamente…y con asombro pregunte temiendo la respuesta:
- Qué es esto?
- “esto” que usted dice se llama alma… le estoy ofreciendo una a muy buen precio…
De a poco y no se porque me fui interesando mas y mas, sabia que esto no tendría un fundamento razonable, comprar un alma es imposible…
- Aja…y cuanto cuesta?-
Todavía no se como pude formular esa pregunta…
- Tu alma, solo eso, me das tu alma, que luego te regresaré cuando se halla cumplido el plazo del prestamo
- Mi alma?- era mi turno de reír, y lo hice.
- Si, si, me da su alma y le presto cualquiera que usted elija.
Mire en los estantes, que de pronto y no se como se toparon con mi mirada, allí había frascos, etiquetados, cada uno decía un nombre y una fecha. Me sorprendí al leer nombres de personas famosas de la historia y el mundo.
Me miro, entendió mi asombro y prosiguió:
- Como ve hay mucha variedad de almas…solo dígame cual desea tener y será suya por un tiempo considerado para que pueda explotarla como lo desee
- La que quiera?
- La que quiera!
Completamos así el tramite, firme unas hojas, sin letras “chicas”
- Señor es un placer hacer negocios con usted- dije ya sin tener control siquiera de lo que decía- Por cierto su nombre es…?
- Tengo muchos nombres…algunos me dicen Satanás, otros lucifer; y otros simplemente “el Diablo”…
Se me heló la sangre, retrocedí desesperadamente, abrí la puerta y salí corriendo sin llevarme el alma que había elegido y también dejando la mía sobre el mostrador. Y mi firma! Mi firma plasmada en esos sucios papeles!
Que idiota fui, pero no seré el único que caerá en ese negocio y eso me reconforta…es todo muy sencillo, primero trato cordial, sutiles y tentadoras propuestas y luego Zaz! Pronuncia su nombre, sales corriendo y olvidas por siempre lo que es tener un alma.