Tan fácil era hablarte
unir nuestros ojos en secreto complot
fugarnos a un rincon
y apagar los gritos y la luz
bailar todos nuestros látidos
y adornarlos con pestañas y deseos;...
pero no!
yo y mi baba resbalando pasillo abajo
consumido por la multitud
tranformandome en un punto
encogiendome, perdiendome en el infinito
mas dudas y mas fotos
entre otros amantes mucho mas certeros
mas felices
y sonrien
puaj! los vomito de envidia.
Y yo de nuevo, mas tarde
adaptado y diluido en el alcohol
con las pupilas ardiendo y con alito de mierda
me sumerjo en otra
sin mas complot que la inercia de la carne,
y mas tarde aún, despertado,
empapado de fluidos y sudor
debo irme a casa.
Texto agregado el 27-12-2006, y leído por 143
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