Verso a verso
Para una Mujer

Joan Bosch © (2005-2006)


Prologo

El presente libro no fu escrito como tal, surgió ante tal acumulo de las sensaciones que a lo largo de poco mas o menos un año sintió un hombre que se atrevió a soñar y tuvo la osadía de plasmarlo en letras como necesidad perentoria de expresar sus sentimientos a los cuatro vientos.
No conlleva ninguna pretensión literaria, ni aporta nada nuevo que no se haya dicho, sólo narra entre letras el día a día de una de las partes en el intrínseco vivir y morir de un intemporal amor que floreció y se marchitó en el mismo medio en que vivió.

Joan Bosch


Amor viajero

Llegarme, me llega en cada día,
me llega toda tu ternura
que apaga mi amargura,
cuando leo y releo tu poesía.
Me embriago con tu verso,
tiene sabor y tanto de tu sentir
que no puedo ya prescindir
pues en él estoy poseso.

Y sí este verso peregrino,
sale de un solo tintero
envíame el que yo quiero.

Que lo pregonaré al viento
al plasmar mi sentimiento,
en un verso de amor viajero.


Quien pudiera...

Quisiera ser el poeta
que a ti te susurrara
palabras de amor
en la madrugada.

Quisiera ser el juglar
que a ti te cantara
baladas de pasión
en la fría mañana.

Quisiera ser el rimador
que a ti te recitara
versos de ilusión
en toda la jornada.

Quisiera ser el trovador
que a ti te enamorara
con flores en tus labios
al nacer el alba.

Quien pudiera ser el mortal
que a ti te besara...


Preguntas

Divinidad de divinidades
porque nunca te evades
a mis locas vanidades.

Vanidad de vanidades
porque siempre escondes
todas mis maldades.

Maldad de maldades
porque nunca eludes
mis inciertas virtudes.

Virtud de virtudes
porque siempre eludes
todas mis humildades.

Humildad de humildades
porque nunca escondes
las excéntricas deidades.

Deidad de deidades
porque siempre evades
todas mis falsedades.


Como describir..

Como narrar el rocío en la mañana
cuando tengo ante mí la luz del alba
que ciega la negra noche atormentada.

Y como voy a volar sin alas
cuando tu con tus miradas
me las ubicas en las mañanas.

Como referir el olor a silencio
si tu voz llena todo mi lamento
con perfumes de sentimiento.

Me es tan difícil de describir
todo lo que ahora pueda sentir
pues tu das sentido a mi vivir.

Y yo mujer no tengo nada
solo soy tu alma reflejada
que en verso es expresada.


Gracias...

Como voy a romper tu corazón,
que me llega en este de papel,
si estremece toda mi piel
y colma mi vida e ilusión.

El amor me llegó despacito,
palabra a mensaje plasmado,
mensaje a palabra suspirado,
entre las líneas del verso escrito.

Pues lo recibí muy, muy bajito
me llego dulce, tierno, contento
y estalló mi estremecimiento.

Y es por lo que sólo llego a decir
.-Gracias Amor, hoy me diste el vivir.


Eres inmenso caudal

Eres inmenso caudal de inspiración,
llegas a mis brazos cual arroyo fresco
en una calurosa mañana.

Eres inmenso caudal de exaltación
cuando besas, me estremeces
como el frío viento de la montaña.

Eres inmenso caudal de amor,
en estas sabanas de papel
muestras tu verso en la alborada.

Eres un inmenso caudal frescor,
compones con soltura
dándole matices a la palabra callada.

Eres un inmenso caudal de ilusión,
despiertas el alma dormida
trasportándola a la estrella anhelada.

Eres un inmenso caudal de pasión
como el pétalo cálido de una flor
al tibio roció de la madrugada.


Cuando seamos viejos...

Cuando seamos viejos
y nuestras palomas hayan volado
nos daremos todo el amor
que la vida nos ha negado.

Cuando seamos viejos
y los cuerpos estén cansados
nos miraremos a los ojos
con los corazones enlazados

Cuando seamos viejos
y los silencios sean callados
hablaremos de nosotros
que el resto ya estará olvidado

Cuando seamos viejos
y nuestros recuerdos sean borrados
nos besaremos con un te quiero
en nuestros labios calmados,


La palabra

Puede ser tierna como una flor
y cortar cual afilada daga,
es principio de ilusión
y el termino que desengaña.

Es puesta en nuestras manos
para que todos nos entendamos
nos da la vida, nos da la muerte
pero solo es una simiente
que nos da sus frutos,
según la cultivamos.

Puede ser sencilla y llana
o bien grosera y agreste
pues bien sea verso o prosa
ya sea escrita o salga de boca
la mediremos aunque cueste.

Que una palabra bien medida,
y mejor dicha, siempre tiene cabida,
aunque luego sea discutida.


En soledad

¿Habrá alguien por quien luchar?
Alguien en nuestro cansado vagar
que nos palie la soledad injusta,
o solo son quimeras de loco poeta.

Cae un día, la noche, y deja soledad
la savia muere y sigue la oscuridad
un día, un año y otro, y no hay vida,
muerte y soledad, en mi alma partida.

El rostro muestra todo su cansancio,
la angustiosa incertidumbre hace daño
son sueños sin voz, gritos de silencio.

Pues la soledad deja huella temprana
que solo se palia con la soledad pareja
de otra alma partida, a la nuestra unida.


Amor a dos

Si soy caudal de amor
el amor me llega solo
no sé porque me asolo
si sólo me llega amor.

El amor es vida compartida
que se comparte entre dos
que uno solo son pocos
y dos es la justa medida.

Mas no hay dos sin tres
y el amor es un estrés
cuando media el interés.

Pues tres es una multitud
que nos llena de inquietud
y mata nuestra virtud.


El amor y la tierra

Que mayor ventura,
que germine el amor sembrado
pues el amor regalado,
da su fruto al ser retornado
me dirán que interesado puedo parecer,
pero el que siembra,
siempre espera recoger.

Nunca esperé una tierra flor,
si no la sembré con amor
y si siembras patatas,
no recogerás pimientos,
así el amor se recoge
según sean los sentimientos.

La tierra se debe preparar,
abonar, cuidar y regar
y en tales menesteres
en el amor te has de esmerar,
una mentira, un abandono
es abono suficiente
para que el amor muera
sin dar su simiente.

Que no valen descuidos
ni las labores olvidar,
pues el amor crece, florece
y puede marchitar,
ya que de la tierra
salen los frutos deseados,
el amor dará su fruto
siendo dos en uno y uno en dos.


Morir para vivir

Hay mujer ilusionada por tu poeta,
no sabes que para darte el vivir,
él tiene que precisamente morir
y con ello darte el alma entera.

Pues deja tanto su triste huella
que en ello se le escapa la vida
quedando la pluma mal herida
con sangre de amor en cada línea.

Pero no te aflijas mujer
que esto solo es un menester
para que el poema pueda florecer.

Pues en llegando a ti, que eres su musa
da su simiente y germina en la vida,
que al él es nuevamente retornada.


Mi Flaca

Es mi Flaca puro hueso,
simiente de deseo,
esperanza que poseo,
gozo que verseo.

Es mi Flaca puro cielo,
luz del universo,
ave del paraíso,
firmamento de mi celo.

Es mi Flaca puro verso,
rima que sorbe el seso,
poema que vuelve loco
y dispone todo juicio.

Es mi Flaca puro amor,
cariño sin condición,
manantial de pasión,
vida en su esplendor.

Mi Flaca es…


Tu voz

Tu voz resuena en mi interior
cual fresca brisa de los andes
que sosiega todo el clamor.

Es cálida como la pasión
en fría mañana de invierno
al amparo de una ilusión.

Es serena en su candor
tranquilizando al alma
de su absurdo dolor.

Es suave deleite al oído
que lo llena de color
y calma el ánimo herido.

Es bella como los poemas
en el pétalo de una flor
que extingue las penas.

Se rompe en ternura
mostrando el corazón
en toda su hermosura.

Quiero escucharla mil veces
y muchísimas mas
si es que tu no desfalleces.

Pero con los oídos en vos
que solo sea un murmullo
de amor entre los dos.


Tu beso

Tu boca dulce manjar
grata de explorar
que me hace estallar
cuando te llego a besar

Mas si tu me besas
todo son sorpresas
exploras que embelesas
y me sabe a dulces fresas.

Transitas con atención
parando en el punto preciso
y siguiendo hasta el infinito
llenándome de excitación.

A mí me ha llegado
este beso ya mandado
que con gusto he tomado
de tu boca regalado.


Cruel duda

Es tan larga y cruel la espera
que los tiempos no pasan,
los minutos se amontonan
y la inquietud se me apodera.

Uno y otro, y otro detrás de uno,
mas de todos de ellos ninguno.

Sanguinaria ventana cerrada
que me asola, me carcome
ya que la amada no aparece
y mi alma sin luz tiene cegada.

Uno y otro, y otro detrás de uno,
mas de todos de ellos ninguno,

La luz se torna oscura,
mi verso se vuelve espeso
y al faltarme un solo beso
el poema es de amargura

Uno y otro, y otro detrás de uno,
mas de todos de ellos ninguno,

Escribo con renglones de sangre
cuando ella se muestra lejana,
hasta el pensamiento se agrava
al sentir que mi vivir no emerge,

Uno y otro, y otro detrás de uno,
mas de todos de ellos ninguno.

La mente pierde su cordura
y no se para de preguntar
lo que habrá podido pasar
para dejarme esta cruel duda.


Tu piel

Te veo en tu lejana morada
piel blanca de cálida tersura
que muestra toda la hermosura
cual grande es tu alma desnuda.

Perfumada con las flores
tan frágil, tierna y cálida
se abre cual crisálida
es hogar de mis amores


Amor soñado

Me recliné
para liviano descansar
y que al día siguiente
frondoso despertar.

No obstante me encontré
con la flor más hermosa
pues no sé si la soñé
o es que era una rosa.

Me tomo de la mano,
me acerco a su regazo,
se fundió en un beso
y en un cálido abrazo.

El contacto de su piel
me hizo estremecer
de tal manera que desperté
sin yo quererlo querer.

Y vi que no era una diosa,
que era un espléndido ser
de amor y cariño ansiosa
con formas de mujer.


Así eres mujer

Como la nieve en primavera
vienes balanceándote, a merced de la brisa,
suavemente, pausada, sin ninguna prisa
cubriendo la reseca piel de la tierra.

Llegas fresca, con cristalina hermosura
te fundes en mi piel con el cálido contacto,
recorriéndola y llenándome con tu encanto,
limpiando la negra y cruel amargura.

Creas serpenteantes ríos de pasión
clamas la sed del cansado corazón
renaciendo las flores con ilusión.

Llenas todo de vida hasta llegar al mar,
en aguas saladas tu vida va a terminar
con toda dulzura, para eternamente amar.


Eres poema con cuerpo de mujer

Eres poema en el alma,
luz en la mañana,
pasión en la mirada,
sueños de madrugada,
versos en la noche,
amor sin derroche,
suave despertar,
inmenso suspirar,
puro sentimiento,
beso en el viento,
corazón de niña
con cuerpo de mujer…


¿Soy egoísta?

Si contigo encuentro
la paz de mi agónica soledad.
Si contigo soy ave
que vuela con entera liberta.
Si contigo tengo
la luz esperanzadora de un mañana.
Si contigo hallo
la razón por la que se despereza mi alma.
Si contigo poseo
la fuerza que siempre me falta.
Si contigo logro
el consuelo a la pena que me mata.
Si contigo recojo
el fruto de mi vida desperdiciada.
Si contigo obtengo
el complemento a toda mi jornada.
Si contigo alcanzo
el descanso a mis fatigados huesos.
Si contigo descubro
mis más callados deseos.
Si contigo confieso
lo pequeño e inútil que soy.
Si contigo hago
que el mañana sea siempre hoy.
Si contigo veo
que no hay nada que me asombre.

Si contigo mujer... soy hombre...


Despertar

Tu rostro pegado al mío,
suspirando tranquila,
sin temores, relajada
como no queriendo despertar
tras una dura jornada
iluminando la estancia oscura,
con la luz del alma desnuda,
por la noche vivida,

Con la sonrisa del niño
en su primera chiquillada,
agarrando mi mano,
para no dejar escapar la felicidad
que ha tardado en llegar,
de mas allá de la eternidad
Susurrando “Te Amo”
entrecortada y adormilada.

Pero no temas amor
que no me ausento,
solo quiero escribir
lo que dicta mi sentimiento,
en los nuestros amaneceres
y lo fundiré en tu abrazo
para que cuando despiertes
mi verso este en tu regazo.


Dulce veneno

Quien pudiera tomar de tu dulce veneno
que embriaga el alma,
que mata la cruel soledad
de esta vida cruelmente atormentada,
que fulmina la callada palabra
que mata toda esperanza guardada,
que extingue la duda
de la oscura noche envuelta en amargura

Deseo tu suave virus
hecho de esperanza brutalmente madurada,
que ahoga la pena
largamente contenida en toda cruel jornada,
que destruye el tormento
del oscuro sentimiento de la duda,
que arruina la locura
largamente acumulada de mi alma oscura

Por eso deseo morir
con tu dulce veneno, que me dará la vida,
matara la amargura, ahogara la duda,
traerá la esperanza perdida,
destruirá la soledad,
fulminara la noche con la luz de tu mirada

Me embriagare
hasta sucumbir con tu dulce veneno,
que el morir dará vida
y luz al amor que te profeso,
es por lo cual te pido,
más y más de todo tu veneno


La distancia

La distancia son finas dagas
que abren la soledad del alma partida
que nos comen las entrañas,
trayendo el olvido, segando la vida

Es cruel amargura que mata
desliga toda pequeña esperanza
pues con daño la locura desata
truncando la ilusión y la templanza

Es violento huracán que arrastra los sueños
llevándolos mas allá de nuestros recuerdos
y recordándonos que somos pequeños

Es tan brutal y tan ingrata que mata el amor,
que nos separa mas y más sin compasión
y nos parte el alma, llenándonos de dolor


Beso en lontananza

El besarte en la distancia
me trae tu invisible presencia
con toda tu cálida esencia

Llegas en la espesura de la noche
en el reflejo de la luna adormecida
con una tenue luz sin reproche

Alumbras toda mi alma dormida
llenando de luz mi lánguida vida
avivando la esperanza entumecida

Eres luz de esperanza
eres invisible esencia
eres beso en lontananza


Una mujer, una..

Una mujer es una,
con todas sus cualidades y defectos,
con sus virtudes y debilidades,
sus carencias y sus abundancias,
sus pensamientos y sus locuras,
su sabiduría o sus ignorancias,
inseparables por partes,
según sean nuestros convencimientos

Una mujer es una,
no se puede separar cuerpo de esencia
El cuerpo sin esencia es carne,
es placer sutil y mundano
La esencia sin cuerpo es volátil,
no encuentra ser amado
pues ambos van juntos,
y es uno de la otra su custodia

Una mujer es una,
podrá gustarte su trabajo o forma de andar
o justamente lo contrario,
pero el uno y lo otro debe de estar
pues el separarlos no es bueno
y da mucho que pensar

Una mujer es una,
ama con el cuerpo y con el alma
que si el alma para el cuerpo no es,
este la nota en falta
y si lo que falta es el cuerpo,
es solo la mitad, y es nada


No me voy

No me vas a apartar de tu corazón
que el que esté lejos no es razón
para matar lo que es vida e ilusión.

Te podrá parecer que delirio
pero este es mi vivo suspiro
pues siempre a amarte aspiro.

No creas que me asustan las fatalidades
ya pase por crueles calamidades
para no saber afrontar estas adversidades.

Mas no quiero llamarte a engaño
que esto puede durar mas de un año
y podremos llevarnos algún desengaño.

Pero cuando es la vida lo que nos jugamos
hay que ser comprensivos y esperanzados
pues el mañana lo tendremos en las manos.

Así que no te atormentes, ni mi alma rompas,
que el tiempo en su lugar pondrá las cosas,
para amarnos y respetarnos entre rosas.


Buenos días amor...

Buenos días amor, lleno de melancolía,
hoy me faltó tu luz que es mi alegría,
tu ausencia me deja una cruel herida,
buenos días amor, con el alma partida.

Buenos días amor, nunca te tuve,
pero llenaste mi absurda soledad,
con una corta y fugaz felicidad,
que es lo que para siempre obtuve.

Buenos días amor, con la herida abierta,
siempre estaré llamando a tu puerta,
para ver si levantas mi vida incierta.

Buenos días amor, henchido de dolor,
queda mi corazón con este clamor,
al faltarle tu inmenso amor.


Hoy y llorando

Hoy té despiertas llorando,
triste con aflicción,
o es esta cruel desolación,
al ver la distancia
que nos hace perder la razón,
que nos llena de rabia
al no ser un unido corazón.

Porque aunque somos dos en uno,
en uno somos dos
que al estar unidos,
estamos cruelmente separados
no de pensamientos
pero si de cuerpos encontrados
pues nos vemos cada noche,
mas no estamos abrazados

Y a no mucho tardar
los corazones se van a encontrar,
sea aquí o sea allí,
pero en cualquier lugar,
para que juntos y abrazados
nos podamos eternamente amar.

Pero no te aflijas mujer
que esto solo es pasajero,
que el amor que té profeso
acorta el mundo entero
y juntos estaremos
cuando hoy te diga. Te Quiero


Morir de amor

Es una cruel agonía
soñarte en la noche y en el día
llenarme de melancolía
sentir que me falta el alma mía.
Es la angustia de otros brazos,
entregándote a otros besos,
olvidando mis sentidos versos
y la falta de tus susurros y abrazos.
Es un corazón herido
muertas las horas de alegrías
con las esperanzas perdidas
en crueles llantos y gemido.
Es no ver a las aves volar
que pasan desplegando sus alas
que se posan en fuentes y rosas
con su alegre y constante cantar.
Es no sentir los lamentos
en las ráfagas del viento
apagando mi sentimiento
con constantes desvaríos.
Es el alma con desgarro
cuando pasa un día y otro
con la muerte en el deseo,
pasa el tiempo y no te veo.
Es un lánguido suspiro
una ultima y fugaz caricia
de un dormir en la delicia
con el ultimo aliento.


Silencio...

Silencio, lamento y nuevamente silencio,
que no lo rompe el eco callado del viento.
Lamento, silencio y nuevamente lamento,
roto tan solo por el crujir del pensamiento.

Lamento, crujir y ecos del silencio,
torbellinos de callado pensamiento,
que se vuelven muerte en transito,
con crujir de vida en todo silencio.

Transito de vida a muerte en silencio,
crujir del eco callado con lamento
de muerte y vida en el pensamiento,
con torbellinos de mudo silencio.

Pensamiento callado por el silencio,
en crujir de torbellinos y lamento
con ecos de muerte lanzados al viento,
silencio, lamento y otra vez silencio.


Tu piel no es mi piel

Tu piel no es mi piel,
que presurosa te busca
en contactos imaginados,
mas allá de la espera,
irreales caricias
en la negra noche perpetúa,
que se eterniza en búsqueda,
y me desespera.

Tu piel es solo tu piel,
por la inmensa distancia
que separa nuestras vidas encontradas,
con jornadas de esperanzas truncadas
y la sola caricia, de tu incorpórea presencia.

Tu piel será mi piel,
al nacer la alborada,
cuando encontremos nuestros mañanas
y la noche con el nuevo día,
sea despejada.

Nuestra piel no es nuestra,
es de la esperanza,
que germina de sueños en la distancia
y da sus frutos,
al encontrarnos en lontananza.


Beso al viento

Tomo yo tu beso lanzado a los cuatro vientos,
beso de esperanza largamente contenida
escape de una vida cruelmente partida
que es dado con callados y ciegos sentimientos.

Lo tomo y lo hago mío en la esperanza perdida
la que me llevo en crueles sufrimientos
a vivir con muerte y padecimientos
con él moldeare mi sueño en una nueva vida

Lo hago mío y lo lleno de mis pensamientos
los que en esperanza, llenan mi vida
los que matan todos mis atroces tormentos

Lo lleno con la esperanza recuperada
y lo retorno a los cuatro vientos
esperando que tú lo recojas, mi amada


Aquí estoy...

No me escondo bella dama
que a su entera disposición
queda mi humilde condición
si es usted, quien me relama.

Mas yo soy como el viento
a veces fuera y otras dentro
entro y salgo y salgo y entro
y siempre con el pensamiento.

Que en el suyo estoy por entero
de febrero justo hasta enero
y nunca lo abandonaré primero.

Pues entré con versos
permanezco en los deseos
y me muestro con los besos.


Detrás del silencio

Detrás del silencio estas tu,
yo siempre al otro detrás.

Callada agonía en melancolía,
con ecos de cruenta poesía.

Barrera muda que no se rompe,
hasta que tú vendrás.

Detrás del silencio estoy yo,
tu eres poema en cada día.

Silenciosa inspiración al callarse tu voz
con soledad y desaparecerás.

Apenada música,
que siempre me llega en muda armonía.

Detrás del silencio, los dos en concordia,
en silenciosos gritos de la cruel discordia.

Detrás del silencio no hay nada,
solo nuestros callados versos.


Nosotros

Nosotros que somos dos en uno,
cuando juntos volamos para amarnos
y que ninguno queremos separarnos,
ya que sin uno, no es ninguno.

Nosotros que la distancia acortamos,
con el calor de un beso en el viento
y el deseo puesto en el sentimiento,
cuando con pasión nos abrazamos.

Nosotros que somos aves en el cielo,
surcamos las alturas en eternos vuelos,
para presurosas ir a nuestro encuentro.

Nosotros que del amor hacemos,
el más maravilloso y corto vuelo
y en el amor, en uno nos fundimos.


A ti mujer...

A ti mujer que cada día me regalas rosas,
flores salidas del corazón abierto al amor,
ternuras que sanan y calman el cruel dolor
heridas que son curadas, con flores hermosas.

A ti mujer que recoges mis versos de color
lanzados en la noche de negras tinieblas,
dándole tu espíritu y luz cuando versas
que me llenan, de un mágico resplandor.

A ti mujer que me regalas cálidas brisas,
llenas de ternura y apasionado calor
con la mas fresca y bella de tus sonrisas.

A ti mujer que tomas mi esperanzado amor
haciéndolo tuyo en todas tus querencias
con la luminosidad de todo tu candor


Maldita distancia

Maldigo la distancia que por días te aleja llenándome de melancolía,
con temores, oscuridad y ausencias que rompen todas las esperanzas
y maldigo el momento, que estando tan cerca se convirtió en funesto día,
cruel y desdichada distancia que separas a las almas encontradas.

Maldigo también la negra duda que nos llena de amarguras,
de sí hicimos lo que debíamos o nos frenamos por el miedo,
maldito el temor que nos asolas y que llenándonos de locuras,
a nuestros corazones dejas sumidos en cruel y agónico lamento.

Malditos lamentos, temores, miedos que nos traen el tormento,
nos llenan de oscuridad, rompiendo la esencia de nuestras almas,
que nacieron para ser una y la distancia las llena de sufrimiento.

Mas no creas distancia maldita que me llevaras a las tinieblas,
hay una tenue y pálida luz que sigue brillando en el firmamento,
y con mis rotas y maltrechas alas, pondré rumbo a las estrellas.


Cuan duro es...

Cuan duro es prescindir del primer beso,
el que nos llega al clarear la madrugada,
el que nos colma en toda la larga jornada,
el que nos carga de esperanza y deseo.

Nos llega tímido, como adormecido
para no despertar la mañana,
para darle tiempo al alma
a que este con su amor soñado.

Nos colma en nuestra penosa marcha,
con el paso firme y pausado
en la larga y cruenta caminata.

Nos carga de ilusión en la larga espera,
llenado el deseo largamente dormido,
con la llegada del lucero al despuntar el alba.


Pena, penita, pena..

Tiene penita pena, la que llora y se desconsuela,
amargo llanto que rompe su entristecida alma,
por la cruel separación, del amor que la reclama
en la distancia y siente no poder volver a verla.

Con mudos lamentos, que hieren la esperanza,
la que en ausencia a mí siempre me consuela,
que la distancia disminuye con solo percibirla,
es ilusión rota por vivir en inmensa lontananza.

Su sola visión me da vida en cada jornada,
alegra mis versos con su expresión llana,
la que con su presencia, toda mi alma llena
de mágicas jornadas en mi vida cansada.

Que solo esta fortalecida, cuando la veo plena
y que cuando me falta su dinámica presencia,
le causa llanto por la distante y cruel ausencia,
la que en esencia llora, y muere de penita pena.

Tiene penita pena, la que llora y se desconsuela,
la que en ausencia a mí siempre me consuela,
la que con su presencia, toda mi alma llena,
la que en esencia llora, y muere de penita pena.


¿Te puedo amar esta noche?

¿Te puedo amar esta noche?
En principio solo será una,
que sin una no hay ninguna,
pues ninguna es solo nada
y nada mas pido que esta noche.

¿Te puedo amar esta noche?
Hoy y ahora y después de ahora,
por siempre y no solo esta noche
que la noche termina al llegar el alba
Y la vida sólo esta recién empezada.

¿Te puedo amar esta noche?
No por un momento ni por dos,
hasta que de dos seamos uno,
que existamos uno o ninguno
y que ninguno seamos dos

¿Te puedo amar esta noche?
Y un día después de la noche
y otra noche después del día,
para que se llene el alma mía,
con la tuya, en eterna compañía.


En soledad

Cae el día y se enciende la melancolía,
la noche se despereza en la soledad,
el silencio me habla de oscuridad
y la luz se ira al romper el nuevo día.

Melancólica risa llena de maldad
que con llantos, nos regalas la vida,
nos robas la muerte con alegría
llenándonos de dulce perversidad.

La luz ya no brilla en la noche clara.
el día se llena de alegre tenebrosidad
Y el silencio se adueña de la aurora.

Solitaria luz de la oscuridad,
apaga mi triste melancolía,
matando la cruel soledad.


Amor al envejecer

Cuan duro es encontrar el amor al envejecer
y más si media una enorme distancia
que solo hace separarnos más cada día
es encontrar la vida y la muerte sin merecer.

Nos volvemos cómodos, perdemos la alegría,
nos cuesta empezar en nuestro atardecer
y pocas veces llegaremos a entender
porque la vida, nos priva de su compañía.

Es Posible que las fuerzas empiecen a decaer,
que los temores llenen nuestra existencia,
o que pensemos que es difícil de corresponder.

Mas yo puedo asegurar, que sin tener mucha esencia,
no tiene edad, te llega en la mocedad o al decaer,
nos puede matar, o dar vida según nuestra conciencia.


Velando sueños

El velar tu sueño es grata experiencia,
descansas confiada entre mis brazos,
los temores son por siempre disipados
y borrados en la tranquila conciencia.

Al verte descansar se desatan los sueños,
los míos porque te velo con inocencia
y los tuyos entregados en somnolencia,
que juntos se mezclan en mis desvelos.

Sigue durmiendo que uniré en fantasía
de los más grandes a los más pequeños,
para hacer realidad esta anhelada utopía.

Y si despiertas estarán todos cumplidos
en el albor y nacimiento de nuestro día,
con los corazones firmemente abrazados.


Amar después de amar...

¿Sirve amar después de amar?
O es que tenemos tal estupidez,
que finalizamos con sencillez,
lo que encontramos una vez.

Preguntándonos sin irritarnos.
¿Sirve amar después de amar?
Cuando solo nos afanamos,
por olvidar lo que logramos.

Perdemos lo muy anhelado,
por no dedicarle el cuidado.
¿Sirve amar después de amar?
cuando de ti se han olvidado.

Así que no es raro ni de extrañar,
que si el amor vuelves necesitar,
te llegues siempre a preguntar.
¿Sirve amar después de amar?


Que más da...

Que más dá quien muera primero,
si los dos morimos en el verso,
que es todo nuestro universo
en amor, de febrero hasta enero.

Pues al amar la vida damos
y con el verso la plasmamos,
que solo así la recuperamos
cuando en rima nos tornamos.

Así que en verso nos moriremos,
en vida siempre renaceremos,
aunque no seamos los primeros.

Pero los últimos tampoco,
que hay mucho poeta loco
que el verso, lo vuelve cuerdo.


Barquito de papel

Entre dos aguas navegas,
a merced de la corriente,
unas mansas y otras bravas
sin nadie que te oriente.

Atravesando las mareas
sin guía que te gobierne,
tempestades y resacas
abandonado a tu suerte.

Deseoso por hallar calas
para reposar mansamente,
en aguas resguardadas.

Mas tu sino, es eternamente
navegar, falto de esperanzas,
hasta que halles la muerte.


Mágica luz

Mágica luz en mi oscuro atardecer,
eres regalo de un corazón cansado,
en el principio que no creo merecer,
pero que por siempre te ha deseado.

Hoy por primera vez fuimos a yacer,
cual verso por mí eternamente soñado,
alumbras la antesala de mi oscurecer,
con la luz de tu corazón esperanzado.

Como poema en mi nuevo amanecer,
recibo tu beso alegre y apasionado
que al alma, da impulso a rejuvenecer.

Con toda la vida que me has regalado,
este corazón estará en ti al anochecer,
en todo momento y en amor renovado.


Una lagrima

Una lagrima de tu rostro he de beber,
pues yo la he provocado sin querer,
al darte amor en nuestro atardecer
y que tu no puedes corresponder.

Lagrima que no he de merecer,
pues nunca te debí entristecer,
al confesar lo que no puede ser,
que siempre me llegues a querer.

Lagrima que guardare en mí ser,
que me dará vida al envejecer,
la fuerza necesaria al decaer
y el eterno reposo al fallecer.

Lagrima que me sabe a amarga hiel,
mas es mía, yo la puse sobre tu piel
y aunque no quiera la debo recoger,
pues no quiero que llores mujer.


Soñar y volar

Soñar y volar
y volar para soñar,
soñar y despertar
y despertar al volar,
volar sobre el ancho mar
y en tu puerto fondear,
fondear al despertar…
Despertar de tu soñar.

Soñar, volar y despertar
al sueño de nuestro mar,
mar de sueño y esperar
de este nuevo despertar,
esperanza que en el mar,
nos une para juntos volar
y soñar al despertar…
En eternamente amar.


¡¡Qué noche amor que noche!!

Estrellas como sábanas
y por almohada tu hombro
tu pelo me protege del viento
en las frías madrugadas.

Sábanas de terciopelo
adornadas con miradas
y caricias en las auroras
estrellada de tu cuerpo.

Cuerpo lleno de alboradas
que es mi eterno consuelo
en las noches estrelladas.

Tu pelo agitado en sentimiento
entre las frescas esperanzas
que cubren todo mi lamento.


Vivo en vicio y vivo

Escribir es ya un vicio,
escribo desde que inicio
e inicio cuando escribo
y al escribir, yo me vicio.

Pues es vicio entretenido
y da soltura de mente,
pues no es de demente,
escribir algo entretenido.

Entretengo cuando escribo,
al verso dejo convencido,
al publico muy pensativo
y yo descanso, si escribo.

Y escribo porque vivo
pues vivo entretenido
y me muero si no escribo
pues vivo en vicio y vivo


A ti alma mía...

A ti esposa mía, que me llenas de alegría,
encadenas la triste y cruel melancolía
con versos de tierna y dulce poesía
que me colman por todo el largo día.

A ti compañera mía, que de sueños haces versos
y que con versos, velas todos mis ilusos sueños,
que formas realidades de quiméricos escenarios,
dándome la paz, en mis sanguinarios calvarios.

A ti amada mía, que custodias mi alma cansada
con abrazos de esperanza en la negra madrugada,
a ti que matas el silencio, con besos al llegar el alba
dándome la luz, con tu presencia siempre iluminada.


Cambiar

El que un poema te pueda cambiar
de forma de pensar para mejor,
me causa gran placer en la labor
de escribir para hacerte soñar.

Que no es tarea fácil de escritor,
el versar de sueños o armonizar
poemas sin quererte despertar,
hasta que se ilumine tu candor.

Así que sueña hasta despertar
con un dulce y tierno amor,
que yo tu sueño tengo que velar.

Y cuando ya te sientas mejor,
despertaras para cambiar
lo que yo plasme de mi interior.


Corto tiempo

El día siguiente es hoy
pues se lo robe al tiempo,
que es siempre muy poco
para el beso que te doy.

No corre, si no vuela
el tiempo se torna escaso,
no le hacemos mucho caso
y el alma se desespera.

Nos vemos y nos despedimos
casi en el mismo momento,
el reloj ríe siempre contento,
por lo poco que nos dijimos.

Nos miramos y no hablamos
lo dice todo el sentimiento,
que ocupa nuestro tiempo
y tan solo nos besamos.

Así que volveré a robar,
al tiempo no escatimar
y dejare de hablar
para poderte besar.


Locura de amor

Si tu sin mi no pasas, yo sin ti tampoco
y es lo que me vuelve cuerdo y loco,
cuerdo por ser hombre afortunado
y loco porque me quieres a tu lado.

Bendita locura que se une al alma oscura,
con la luz que llena mi amargura
en esta inmensa y feliz locura,
pues este mal, ya no quiero que tenga cura.

Seremos dos locos de amor eternos,
que en eterno amor, cuerdos nos volvemos,
en locuras tornamos nuestros sueños,
soñando aun cuando estamos despiertos.

Despertaremos a la vida, por años dormida
vida que no será ninguna quimera,
la viviremos en la hora primera
haciéndola realidad hasta la postrera.

Y si el tiempo se nos hace corto,
es porque somos el uno del otro,
que sin ti yo me vuelvo loco
y contigo solo un poco…..


Deseos

Saborea del llanto amargo
la frescura del cruel letargo,
sal dulce y solo quebrada
por la luz de una mirada.

Envuelve la espera callada,
el silencio siempre marchito,
los suspiros de mi lamento,
con el grito de la alborada.

Acaricia la mano desnuda,
deseo carente de toda duda,
huérfana de sutil frescura,
halago en mano ya madura.

Empalágame con tu beso,
es miel que me sorbe el seso,
cordura que ya no poseo,
se me fue con tu dulce deseo.

Sedúceme con tu verso
el que me ampara preso
con la libertad que poseo
cuando solo en ti pienso


Soñar despiertos

Despertar y soñar y en sueños despertar
es soñar despiertos y despertar a los sueños
sueños que solo nosotros somos dueños
pues soñamos y despertamos al amar.

Al amar soñamos en ser solo dueños
del despertar y eternamente amar
amar al soñar y nunca despertar
en el despertar de nuestros sueños.

Amar y eternamente soñar
y en sueños ser los dueños
para nunca mas despertar.

Y despertar en sueños pequeños
de los grandes seremos al amar
por y para siempre los dueños.


Epístola

Muy señora mía:
El motivo de la presente es para comunicarle que su sola presencia me turba el corazón y que solo pensar en usted se me alteran mis neuronas.
Su presencia desata en mi tales sentimientos ya olvidados que me preocupan y ponen en peligro mi solitario deambular.
Siento la necesidad de rodearla con mis brazos y no permitir que se me escape.
Necesito besarla hasta cortarle la respiración y hacerle peder la cabeza.
Me es de urgente necesidad hurgar en lo más recóndito de sus sentimientos para poner en ellos mis esperanzas.
Pretendo robarle sus pensamientos y que hacer de ellos un todo con los míos
Es por lo que y por tales motivos me veo en la necesidad de poner remedio a tales eventos rogándole tenga a bien atender a mi demanda.
Me haría el honor de envejecer a mi lado, de ser mi compañera para lo bueno y para lo malo y soportarme en mis achaques.
Y solo puedo ofrecerle mis pensamientos, mis esperanzas y mi corazón.
Esperando su pronta respuesta queda a su entera disposición un hombre nuevo lleno por su amor.

Rosa del desierto

Te vi varada al amparo del viento
para tomar de la mañana el rocío
que diera frescor al largo estío
que es dueño de tu desierto

Te percibí sin que pidieras auxilio
como ocultando el cruel lamento
que secaba todo tu sentimiento
en las largas jornadas del exilio

Del calor te resguardé al momento
las malas hierbas despoje con brío
y abone el terreno con ofrecimiento

Para que vivieras como yo siento
dándote el resguardo necesario
hacia tu perpetuo florecimiento


Amanecer en el amor

Esperanza que se halla más allá del mar
y de las estrellas baja llena de fecundidad,
envuelta en una fina capa de oscuridad,
solo la luna tu rostro viene a iluminar.

Besos guardados en la eternidad,
pasiones que se desbordan nada más llegar,
torrente incontrolado del verbo amar
caudal de larga espera hecha realidad.

Caricias, sueños, abrazos de perennidad,
hallados en negra noche para amar
y por siempre realizados a perpetuidad.

Desnudas almas que se unen al desear,
todo su mundo lleno de felicidad
y juntas se encuentran al clarear.


La prima Vera

Podría ser un día cualquiera y en realidad lo es,
mas no es lo que parece pues parece que no es
y es lo que parece, ya que la gente sonríe mejor,
y mejor sonríe o lo parece cuando canta el ruiseñor.

Cosas de la prima Vera que a todos nos altera,
y a mí no es que me altere que venga la prima Vera,
pues al ser prima, ella viene como y cuando quiera,
esta es su casa y estando en casa, llega como quiera

Ya entra, ya sale, o sale y entra según le place,
y siempre por la puerta, que es lo que me complace
pues mucho me place que no salga de esta ventana
que por la ventana ya entra al clarear la mañana.

Pues creo que corrió más de dos leguas
según cuentan las buenas lenguas,
que de buenas tienen el movimiento
que le dan a semejante y sutil miembro.
Y no es que yo con el miembro me explaye,
pues sé tenerlo quieto si ando por la calle
que para tales menesteres la pluma utilizo
o en su defecto el moderno y útil teclado.

Mas este me tiene y mantiene muy ocupado
pues las letras se van cada una por su lado,
que por otro lado es un laborioso tormento
y me siento abrumado al crear el sentimiento.

Y no me quiero extender más de lo que acontece
la prima Vera ha llegado y nadie sabe como ha entrado
puede ser por la puerta, la ventana o este teclado
mas lo importante es que ha llegado, ¿o sólo lo parece?


El reloj

Siempre que pasa igual,
sucede lo mismo,
cortas nuestro mimo
aunque nos parezca mal.

Pasa impasible el momento,
el reloj funciona igual
y yo me siento muy mal,
cuando cortas mi sentimiento.

Cruel e inesperado minuto,
que siempre pasa igual
y nos llegas sin miramiento.

Rompes nuestro mimo igual,
pues te sucedes a ti mismo
y casi nunca te parece mal.


Entre pétalos

Entre pétalos yaces,
lecho de rosas
en el cual reposas
y en amor te deshaces.

Entregas tus esencias
imitando a las flores,
perfumes de los calores
que das en querencias.

Noche con emociones
de pasiones contenidas,
que en amor las dispones.

Con miradas perfumadas,
de ti mujer de mis amores
en todas las madrugadas.


Me falta algo

No son tus besos
pues tengo tu sabor en mis labios,
no son tus ojos
ya que en los míos están reflejados.

No es tu sonrisa
pues tu rostro todavía lo ilumina,
no es la ultima mirada
ya que me miras aun adormilada.

No son tus suspiros
pues todavía están en mis oídos,
no son tus abrazos
ya que tu calor esta en todos mis poros.

No es tu último recuerdo
pues lo tengo gravado en mi cuerpo,
no es el primer pensamiento
ya que todavía no has despertado.

No es tu caricia
pues tu mano a la mía esta cogida,
no es la despedida
ya que en mi cama sigues dormida.

No es tu desnudo cuerpo
pues todavía al mío esta unido,
solo me falta tu “-Te Quiero-”
ya que lo has trocado por “-Te Amo-”


Hoy sé lo que no sabía…

Hoy sé lo que no sabía y sabía lo que no sé,
lo que no sabía, es que sabía todo lo que sé.

Sabía que el que espera desespera
y no sabía que no desespera, si en ti espera.

No sé si el rocío empapará mi frente,
pero sí sé que tu agua cura mi mente.

Siempre sabía de la constancia y el tesón
lo que no supe, es por qué renace la ilusión.

Nunca supe por qué el tronco florece,
pero sabía que el fruto siempre crece.

Supe que nunca podría el vuelo alzar,
mas no sabía que tú me hicieras despegar.

No sabía que mi noche termina con tu amanecer
y sé que la luz llegará de nuevo al anochecer.

No sabía que mi alma volvería a soñar,
pero sí sé que hoy y mañana, te desearé amar.

Hoy no sé lo que sabía
y sabía lo que no sé.


Palabras de amor

Tomados de la mano
con tan sólo mirarnos,
al vernos nos besamos
y sientes cuanto te amo.

Una melodía cantamos
entre la mirada y el beso,
canción ya en desuso
que nos lleva a otros años.

En que yo era un chiquillo,
tú mujer de quince años,
con el amor recién hallado.

Frases ya tan gastadas
de lo mucho que las digo,
pero día a día renovadas.


En ti soy hombre

No soy poeta… soy hombre
que responde a tus impulsos,
das amor sin que me sobre
en cada uno de tus besos.

Me llenas en los momentos
que me siento ruin y pobre,
oyes siempre mis lamentos
sin necesidad que lo implore.

Tus abrazos tiernos y cálidos,
me salvaguardan siempre
de momentos no deseados.

Cuando dices siempre te amaré,
colmas todos mis sentidos
y por eso mujer… soy hombre.


No soy poeta...

No soy poeta y no lo seré nunca,
pues esto que empieza me inunda
y de terminar así no hay manera,
lo que jamás empezar pudiera.

Ay verso sutil y traicionero,
no quieres salir del tintero
y por mucho que me esmero,
aún no se te ve el primero.

Y no me vengas con cuentos
que de ellos tengo cientos,
pues riegan mis pensamientos
y afloran en sentimientos.

Te afanas en esconderte
y yo en encontrarte
el verso queda latente
y la musa expectante.

Muéstrate claro y sencillo,
que si el poeta es listillo,
arduo es que pierda un tornillo,
si no perdió ya el estribillo.

Hazlo sin gritar ni hacer alarde
y no me seas tan cobarde
que mi musa está que arde
y yo siempre llego tarde


Por debajo...

Por debajo de tú falda, se esconde un vergel
de espeso bosque y manantial de placer,
ríos de gloria cuando yo me acerco a él,
jardín con aromas de flores al amanecer.

Por debajo de tu blusa, hay montes a conocer
escarpados y agrestes de belleza sin igual,
que mis manos quieren y desean recorrer,
en senderos hermosos de jornada colosal.

Por debajo de tus ojos hay sabor a sal,
las lágrimas que no dejaron de brotar
en noches de amargo sueño celestial.

Por debajo de tu alma se oculta mi hogar,
residencia de tu esperanza en manantial,
que me regalas, cuando me quieres amar.


El verbo amar

Yo amo, tú amas, nosotros amamos,
es presente indicativo del verbo amar,
que indica nuestro presente al amarnos
y en nosotros conjugamos el verbo amar.

Nos fusionamos en el simultáneo versar,
hacemos el verso con nuestras manos
y en las manos tenemos nuestro pensar,
que nos viene a indicar cuanto deseamos.

Son deseos de presentes pensamientos,
el futuro solo nosotros lo haremos llegar,
con el diario versar de los sentimientos.

Conjunción que nos viene a llenar,
yo amo, tú amas, nosotros amamos,
pues juntos hacemos verso al amar.


Si se pierde...

Si se pierde la esperanza ¿qué nos a de quedar?
¿Solo la negra noche que nos quiere matar?
¿El oscuro y húmedo frió del fondo del mar?
¿O el silencio del alma en todo lugar?

Es cierto que la oscuridad se nos apodera,
que el sueño se nos pierde o desvela,
pero siempre queda una débil candela
que de luz, al alma oscura regenera.

Es necesario tener el alma abierta,
pues en cualquier mañana incierta,
llamara de nuevo a nuestra puerta
y se irá, si no hay respuesta.

Así que no cierres nunca el corazón,
el nuevo día nos dará la una razón
y la luz, para vivir una nueva ilusión,
que matará la oscura ofuscación

La vida como viene se va y así el amor,
hoy lo tenemos y mañana solo dolor,
más no por ello nos asolará el temor,
pues regresa siempre con una flor.


Encontré lo que vi..

Lo que vi es lo que encontré y fue solo una mujer,
mujer desnuda de cuerpo, de alma desnuda es mi querer,
desnuda alma encontrada en mi desnudo atardecer,
desnudos cuerpos abrazados en nuestro amanecer.

Pasiones contenidas, deseos encontrados,
abrazos y besos que fueron robados,
que de piel estaban despojados
y en piel han sido por siempre hallados.

Poros que en el infinito son unidos,
imperecedero abrazo que ha de mostrar
del final de lo que fueron separados.

Desnudos corazones deseosos de hallar,
la felicidad de la que fueron apartados,
encuentro de seres vivos en el verbo amar.


Sant Jordi 2005...

Busque en todo el jardín del edén
la flor más hermosa para regalártela
en este día, pero no pude encontrarla,
ya tenía dueño, ya estaba entregada,
pensé, llegué tarde, esta flor ya no existe,
y me sentí apesadumbrado y triste
por no poder entregártela.

Quise encontrar él más sublime poema
que te dijera cuanto te ama el poeta,
mas, ya se había escrito y regalado
y me sentí enormemente angustiado
por no ser quien te lo hubiese versado.

Angustia y pesadumbre que voló
al comprobar que lo buscado
a mí me había sido regalado.

TU….


Me llega...

Me llega el suave tacto de tu mano
como buscando la caricia anhelada,
aquella de la que fuiste despojada
una cruel y larga mañana de verano.

Me llega la tristeza en tu mirada,
puesta por el largo y amargo llanto,
esperanza rota por el quebranto
en tu alma siempre entregada.

Me llega tu suspiro con el viento,
como buscando la alborada
que cure tu eterno sufrimiento.

Me llega toda tu espera truncada
ávida de amor en el lamento,
que recojo con mi alma enamorada.


Compañera…

Compañera de lo bueno
en lo malo Compañera,
de mi llanto consuelo,
cómplice de esperanza,

Compañera… Compañera.

En mi sueño Compañera,
compañera en el desvelo,
verso en todo mi poema,
inspiración que ya poseo.

Compañera… compañera.

Mujer eres compañera,
compañera de mi querer,
hombre de alma plena
porque tú eres mujer.

Compañera de poeta
y poeta compañera

Compañera…


Tiempo cruel...

Tiempo cruel que secas la flor.
que le borras todo su esplendor.
apagándole su bello color
y cargándola de amargo dolor.

Que gastas la fragancia con prisa,
que te lo llevas en viento y brisa,
no apagaras la dulce sonrisa
que le llegara con premisa.

Solo permites la oculta inocencia,
del recuerdo vivido en esencia,
de aromas que colman la conciencia,
llenándonos de grata presencia.

Las flores ya se secaron,
el perfume ya te regalaron,
con esmero las has guardado,
y mi amor no se ha marchitado.


Verso descarado

No vi. a verso más descarado,
entra y sale y sale y entra
según y como le convenga
y no parece que esté cansado.

Te ve y de nuevo se inspira,
esté o no esté a tu lado,
se olvida de lo versado
y crea una nueva rima.

No teme al poema pasado,
sólo en el presente cavila
del futuro no está preocupado.

Y es tan ágil cuando versa
que no se siente agotado
pues solo en ti piensa


PALABRAS

TE ADMIRO
porque me llenas de mágica poesía...
TE ADORO
como diosa de mi eterna alegría...
TE PRETENDO
pues sanas mi melancolía...

TE DESEO
como mujer y compañera cada día...
TE PRECISO
pues eres toda mi compañía...
TE QUIERO
con el egoísmo de que seas mía...

TE NECESITO
pues sin ti sé que no viviría...
TE ESPERO
hasta mas allá de mi existencia...
TE AMO
hasta darte el ultimo aliento de mi vida.

Palabras gastadas de tanto usarlas,
que cada día son renovadas
y con el corazón proclamadas.


No, pero... Si

No podré correr grandes distancias,
pero alcanzare las estrellas.

No veré el clarear de la mañana,
pero advertiré la luz de tu alma.

No escucharé al ruiseñor cantar,
pero sentiré tu palpitar.

No lanzare una jabalina,
pero recogeré tu sonrisa.

No pensare con claridad,
pero madurare felicidad.

No acariciare una diosa,
pero mimare a mi esposa.

No haré grandes esfuerzos,
pero lograré los pequeños.

Mi cuerpo estará limitado,
pero conseguiré lo soñado


Así apareciste...

Fresca como el rocío de la mañana,
cálida como el inicio de la primavera,
con la fragancia de rosa recién cortada,
así te muestras al despuntar el alba.

Tus ojos traen un destello dorado,
como el trigo recién cosechado,
que las tinieblas han iluminado,
en la luz que me has regalado.


Con las alas abiertas a la esperanza,
poquito a poco, transparente, mágica,
cual diosa llegada de la noche negra,
así apareciste en mi sombra trágica


Ven

Si te lo dije, hoy te lo vuelvo a repetir,
en tu abrazo pierdo la noción del tiempo,
parece corto, pues eres todo mi sentir
y encuentro el alivio al callado lamento.

Cuando te encuentro, sea por un momento,
borras la soledad de este amargo vivir,
cesa la lucha que me llena el pensamiento
y la esperanza, de nuevo vuelve a revivir.

Así que muéstrame el sentimiento,
en la transparencia de tu existir,
que robaré el porqué de tu llanto.

Desnudaré tu alma al escribir,
versos maduros en el tiempo
que florecerán, al verte venir.


Larga jornada

Larga y cruel jornada,
tiempo de ausencia
si me falta la presencia
de la mujer amada.

Jornada inmensa y larga,
ausencia prolongada,
con la presencia robada
del amor que se entrega.

Entrega que reduce tiempo,
acorta la larga distancia,
me trae en toda la esencia
tú amor en todo momento.

Corto momento de jornada
que disminuye la ausencia,
con la esencia y la presencia,
de la mujer que es más amada.


La ultima vez

La última vez que me vi en el espejo...
me pregunte quien en realidad era,
pues solo alcancé a ver tu reflejo
ya que mi visión se quedó ciega.

Lo que vi me dejo muy confuso,
del que fui solo quedaba la huella
pues en mi, su dulce amor puso,
la más brillante y divina estrella.

Vi a la mujer en toda su belleza,
la esperanza plena en el destino,
llena de la más admirable pureza.

Vi confusión y realidad en el reflejo
pues no era yo, que solo la vi a ella,
La última vez que mire en el espejo...


Hoy soy...

Hoy soy... porque quiero serlo
y lo quiero porque lo soy
y aunque no pueda quererlo,
lo quiero ser también hoy.

Hoy soy... y tengo lo que doy
que si no lo doy no lo tengo
pues tengo todo lo que soy,
si doy todo lo que obtengo.

Hoy soy... y amo lo que doy
pues intento dar lo que amo
y lo que amo es lo que soy.

Hoy soy feliz pues en ti revivo,
vivo cuando todo me doy
y me doy por que estoy vivo.


Corazón desnudo

Desnúdate amor
como solo tu sabes hacerlo,
muéstrate tal como eres
con el alma al viento,
que la brisa recorra
tu callado sentimiento
y que mi verso
recoja tu esencia
al componerlo.

Tomarte de la mano
para recorrer el universo,
hacer míos cada uno
de tus pensamientos,
es lo que quiero
alcanzar con este verso
que llenara y calmara
los corazones sedientos.

Sed de vida, brisa en el alma
es cuanto yo deseo,
verso de los corazones
publicado a los vientos,
sueños y realidades
que en ti por siempre poseo.

Corazón repleto
de alegría y estremecimiento,
que con besos y pasiones
le llegan a mi verso
y maduradas en todo
y cuanto por ti siento.

Si ves...

Si ves un hombre desnudo en tu cama
no te asustes soy yo y estoy con el alma.

Si notas que te besan no cierres los ojos
pues quiero secar todos tus lamentos.

Si ves que te penetro en la mirada
no apartes tu alma esperanzada.

Si sientes el contacto de una piel
no huyas del que te es siempre fiel.

Si notas que te acaricia el viento
piensa que en él va mi sentimiento.

Y si ves que pierdo toda la razón
es porque te entregué mi corazón.


Cuando tu no estás...

Es larga y tortuosa la vereda en mi vagar,
falta de reposos, llena de sequedades,
ni una marchita flor que desgarre
la monotonía del polvoriento deambular.

Sol abrasador que se te mete en el alma,
huesos sedientos de cobijo donde reposar,
sudor en los ojos con sabor a sal,
aire que revienta los pulmones al respirar.

Horizonte infinito carente de libertad
que aprisiona los pasos al caminar,
cadenas que arrastran el silencio,
ausencia de ecos en gritos de soledad.

No hay tiempo ni lugar en el eterno errar,
repetición de imágenes y sensaciones
de ayer, siempre y mañana,
hoy las volveremos a encontrar.

Solo florecen los marchitos pensamientos,
los que secan la razón y detienen el caminar,
los que me hunden en cualquier pedregoso lugar.
Es tortuosa y larga la vereda cuando tú no estás.


Mi vieja

Ven mi vieja, aquí a mi lado,
hablemos de cosas que hemos pasado,
tuyas, las mías o las que se han olvidado.

Advierto en tu pelo tonos plateados,
refleja la vida, los años pasados…
testigos de besos que no son olvidados.

Esas arrugas, cada una tiene su dueño...
dime, mi vieja ¿cuál té quito el sueño?
cual de ellas salió cuando yo era pequeño.

Dame otro abrazo con esas manos,
manos cansadas de tantos trabajos
y siempre prestas a dar abrazos.

Las mismas que me acariciaban,
que me mecían, las que me abrigaban,
las que mi vida corregían y arreglaban.

Hoy están ya están muy fatigadas,
pero aun arropan mis madrugadas
y dan calor en todas las jornadas.

Y esos ojos lindos llenos de luz reflejada,
que recorren mi rostro en cada mirada
y descubren y calman mi alma apenada.

Los que apenas ya ven la noche estrellada
o el cálido lucero de la madrugada
pero que ven mi sonrisa siempre regalada

Tu espalda pequeña, la veo encorvada
con el paso mas lento y algo fatigada
pero no te apures no hay que hacer nada

Ya terminaste tu obra, la mesa esta puesta,
hoy eres la reina y eso es lo que cuenta
no es preciso apurarse, la puerta esta abierta.

¿Y sabes una cosa?... te traje unas rosas,
las que más te gustaban... las rojas,
las que cuando te ven se sonrojan...

Y cuando se sequen, guárdalas con celo
en aquel libro que ya se cae de viejo,
siéntate a mi lado y sigamos hablando...


Hoy quiero...

Hoy solo quiero verte de nuevo
y ver lo que más me agrada,
lo que me da la vida,
lo que hace de mi un hombre,
lo que me llena de esperanzas,
lo que aspiro aunque te asombre,
lo que me da la tranquilidad del alma,
lo que dispara mi deseo,
lo que colma mis anhelos,
lo que descarga mis frustraciones,
lo que proyecta mis sueños,
lo que ilumina mis ojos,
lo que me hace sentir activo,
lo que deseo acariciar,
lo que más quiero besar,
lo que me despierta por la mañana,
lo que me alegra la jornada,
lo que me duerme al terminar
lo que no me canso de contemplar,
lo que me regalas sin prisa...
Hoy quiero ver tu linda sonrisa.


Feliz día...

Ya no se si son días, meses o años
pero que importan los tiempos,
si hay amor y ternura sin engaños
en cada uno de los momentos.

Se bien que fue un día catorce
en que cruzamos las miradas,
antes o después de las doce
con algunas palabras versadas.

Pasamos y versamos de casi todo,
momentos buenos y poemas malos,
versos hermosos y ratos amargos
y lo celebramos de cualquier modo.

Porque no es importante la manera
y si el recordar en este día el detalle,
pues no fue como un día cualquiera,
aunque no logré rodearte por el talle.

Así que te deseo la mayor alegría,
en este día venturoso y especial
pues tu eres mi inseparable poesía,
lo celebremos por día, mes o anual.


Cruenta batalla

Eres mujer muy traicionera,
siempre atacas por detrás,
mas no todo lo que quisiera
pues me gusta lo que me das
.
Llegas despacito y sin apuro,
con presencia imperceptible,
cuando estoy más absorto
me abrazas sin nada decirme.

Tus brazos me aprisionan
cuando menos se te espera,
las ideas se me bloquean
y pierdo toda la presteza.

Se me vuela la inspiración
con tus besos que marean
y pierdo la concentración
en manos que me bloquean.

Es tan deliciosa la raptora,
que permito la trasgresión
y dejo para otro día u hora
lo que era mi ocupación.

Regalona me salió la niña,
que busca cualquier oreja
para hacerme cosquilla,
más la otra nunca se queja.

Y en tan trabajoso quehacer,
mis manos han de buscar
en que poderse entretener,
sea desvestir o acariciar.

Más no siempre es posible,
que cuando quieren empezar
ya no hay ropa disponible,
de la que poderte despojar.

Por la mía voy contrariado,
sin darme cuenta de la situación
pues hace rato que ha volado
y las ganas son para otra ocasión.

Ante tal y mágico evento
de nada que poderte quitar,
yo me quedo muy contento,
al no tener que trabajar.

Pues no hay tarea más fatigosa,
que deshacerse en un santiamén,
de prenda tan difícil y trabajosa,
como el maldito y cruel sostén.

Cada día es más embarazoso
el quitar prenda tan delicada,
que lo hace muy dificultoso
y puede llegar la madrugada.

Que si ropa no ha de haber,
se deleita y goza la mirada,
a los ojos le damos placer
y la mano esta descansada.

Más no quiero extenderme
en lo que les pueda relatar,
pues no logro desprenderme
si mi amada no me ha de soltar.

Así que tengan ustedes buena noche,
que uno hará lo que le dejen y pueda
y mañana les cuento con derroche,
si salgo vivo de esta contienda.


Recordar para olvidar

Olvidar, palabra difícil de madurar
que difícilmente quiero recordar
pues es lo que no me hace olvidar.

Que olvidar no es descansar
de lo que no deseamos recordar,
es recordar lo que queremos olvidar.

Con no olvidar es suficiente,
para que no cree simiente
y florezca el odio silente.

Que el odio es mal constante,
enfermedad del inconsciente
y con recordar ya es bastante.


En tus manos...

Vagar, viajar y vagar,
me pierdo entre tus manos
en mi eterno deambular
y descubro todos mis sueños.

Andar, respirar y andar,
manos en las que encuentro
el reposo al caminar,
en todo mi largo destierro.

Marchar, reposar y marchar,
descanso de todo sufrimiento
que tus manos quieren dar.

Caminar, soñar y descansar
hasta el desfallecimiento,
que en tus manos quiero hallar.


Alma enamorada

Me llega tu alma inspirada
en verso de flor regalada,
regalo de noche estrellada.

Beso a beso me adentro en tu mirada,
lento y despacio al estar iluminada,
rápido y sin prisas beso la luz callada.

Te hago mía pues ya no-tenia nada,
me lleno de ti en la noche desolada
y con tu luz llega toda mi alborada.

Me adueño de tu sonrisa brindada
en cualquier, corta o larga jornada
y del anochecer hasta la madrugada.

Tu alma de la lontananza será alejada,
con mis besos serás siempre acariciada
ya que tu alma ya te ha sido raptada.

Con mis sueños serás transportada,
en lecho de nubes y flor rosada
hasta el regazo del alma ilusionada.

Y cuando te poses sobre mi almohada,
serás la mujer mas querida y amada
del alma que por tu beso, tienes enamorada.


Llueve y llueve

Llueve y llueve tras los cristales
tras los cristales estoy y no sales
no cuando llueve sobre mis males
que se empapan de lluvias otoñales

Agua, frío y silencio llenan tu ausencia
gélidos gritos que inundan de humedades
los ecos del recuerdo sin tu presencia
en largas noches de lluvias torrenciales

Empapado y con la esperanza partida
desisto de tu cálida y dulce sonrisa
los cristales ocultan a la mas amada
y yo me voy con la húmeda brisa


El Sueño

No hermosa y gentil dama,
no siempre estoy risueño
y no es por falta de sueño,
pero me quedaría en la cama.

Que es ardua tarea el madrugar
y con humor ponerse a versar,
si bella dama se deja cortejar
pues uno así, no se quiere acostar.

Y luego pasa que me enternece,
el alba llega cuando amanece,
yo sigo soñando y en mis trece
y dormiría hasta que anochece.

Más el día me viene a recordar
que algún día tengo que versar,
para con dama poder conversar,
de lo duro que es el trasnochar.

Que no es buena esta vida soñadora,
me acuesto siempre con la aurora,
mi verso llega a dama encantadora
y yo quedo con sueño a toda hora.


Tu beso...

Tu beso me entra por los ojos,
se pasea por todo el corazón,
trastorna y alegra los sentidos
y hacer perder la cuerda razón.

Se aloja por siempre en el alma,
trastorna mis pensamientos,
me hace perder la ansiada calma
y renueva los sentimientos.

Si por uno que llega con la mirada
pues en nosotros esta la distancia,
mi alma se encuentra trastornada,
no se que pasaría en tu presencia.

Y no se lo que yo daría
por sentir tu cálida boca,
mi alma se volvería
rematadamente loca.


No sé ni como, ni cuanto,
pero si sé cuanto y como

No sé como alumbraste mi vida
si tu luz esta siempre encendida,
mas sé cuanto espere la amanecida
en mi tenebrosa alma oscurecida.

No sé cuanto te he de desear
desde el atardecer al clarear,
mas sé como yo quiero estar,
en ti vivir y morir al amar.

Sé cuanto tu me vas a esperar
a este o al otro lado del mar,
mas no sé como te puedo abrazar
y las vidas por siempre agrupar.

Sé como me llega la alegría
que sana toda mi melancolía,
mas no sé cuanto te añoraría
si no fueras toda el alma mía.

No sé ni como, ni cuanto,
pero si sé cuanto y como


Ansias

Ansias que del cuerpo y del alma alivio son,
que llenan las ansias de nuestra loca razón,
que ansiamos en toda y cualquier ocasión
pues satisfacen nuestra ansiada pasión.

Pasión esperanzada al llegar el alba,
despertar de la noche iluminada,
besos en penumbra de nuestra alcoba
que iluminan toda larga jornada.

Esperanza, pasión y besos en la alborada,
fusión de cuerpos en la noche callada,
almas que se encuentran en la madrugada,
vida que hallo en brazos de mi amada.

Ansias que por siempre consuelo fueron,
que alivian dos seres que caminaron,
por senderos de ansias se encontraron
y con ansias eternamente se amaron.


Eres…tu...

Eres fuego en el alma,
deseo en las entrañas,
la ambicionada calma,
albor en las mañanas.

Eres pasión en la mirada,
cálida y fresca brisa,
serena palabra callada,
poema en tu sonrisa.

Eres amor en esencia,
aromas de ilusión,
mágica trasparencia,
alegría en el corazón.

El consuelo que poseo,
la compañera de fatiga,
musa que yo verseo.
Eres tu mi fiel… Amiga.


¿Amar o no amar?

Dormir o no dormir, he aquí la cuestión,
que es cuestión a pensar tras un revolcón,
pues el dormir sin darse algún empujón
no es pensar, ni llenarse de cuerda razón.

Razonar o no razonar he aquí el pensar,
pues a mas de uno nos suele al pasar,
que por dormir no llegamos a adivinar
porque, nos quedamos sin el amor ejecutar.

Hacerlo o no hacerlo he aquí el problema,
que si no lo hacemos olvidamos del tema,
no practicamos el comprometido teorema
y no podemos componerlo en un poema.

Versar o no versar he aquí el argumento,
por el cual puedo o no estar contento,
que si duermo, no me mantengo despierto
y no hago el amor en su justo momento.

Amar o no amar he aquí la decisión,
que si amo no descaso con precisión,
si me duermo estoy en baja presión
y mi corazón se queda sin la pasión.


Quien pudiera...

Quien pudiera quedarse a tu lado,
acurrucadito en tu abrazo,
sin hacerle al reloj el menor caso.

Quien pudiera perderse entre tu pelo,
en las manos deshacer el enredo
de una noche en desvelo.

Quien pudiera acariciarte bajo las sabanas,
en cálidos contactos de las frías mañanas
y saborear la miel de tus entrañas.

Quien pudiera adentrarse entre tinieblas,
a tus ojos, con la luz que me ciegas
y ver todas las estrellas.

Quien pudiera pasearse por tus caderas,
sentir las palpitaciones sinceras
en el contacto de veras.

Quien pudiera besar tu relajada boca,
la que en la noche se vuelve loca
de pasión, que no es poca.

Quien pudiera desearte al clarear la alborada,
abrazarte por toda la larga jornada
y amarte hasta la madrugada.

Quien pudiera... quien pudiera...


Tus ojos

Mis ojos te vieron de pasada
pues hay miradas que alucinan
mas los tuyos se que iluminan
los largos senderos de la vida

Me acerqué a aspirar tu fragancia
aroma que llena de cuerda locura
pérdida de razón por tu prestancia
y ahora mi mal ya no tiene cura

Demencia que nubla el conocimiento
perfume que me llega a la conciencia
faros que irradian todo pensamiento
pues tus ojos son toda mi esencia


Tal vez...

Si alguna vez sientes un abrazo en la soledad
que te llena de cálida y placentera presencia
aliviando el encierro que mata con brutalidad

Y el frío cruel tapiza tu alma, que llora la ausencia
del ser que día a día se desvela y compensa
el abandono que te carcome la conciencia

O cuando en tu cama, de noche nadie en ti piensa
y percibes la solitaria compañía de las tinieblas
con ecos de silencio en la negra noche tensa

El dolor toque tu puerta, y muy cerca lo sientas,
que te llegue muy profundamente a herir
que solo la muerte sea el alivio que tu piensas

O si la duda te invade, que no puedes dormir
y el pensamiento se torna oscuro y confuso
atacando los sentimientos en un ir y venir

Cuando sólo sientas el viento helado del deseo
La fría carcajada de la muerte en la penumbra
O la amargura rota de esperanza que yo poseo

Que con su pálida sonrisa sin vida, se burla
de la lucha que mantienen las cruentas
dudas y la perspectiva de alcanzar al alba

Cuando el gran muro se cierre y ya no sientas
la esperanza entre tus crueles lamentos
con llantos que hieren mas de lo que piensas


Y sea el silencio quien te responde a gritos
callando los ecos de tu abandonado amor
con el ciego sonido de tus pensamientos

Cuando la oscuridad se mezcle con el candor
y la vida y muerte sean algo sin sentido
en tu eterno soñar recordarás, quizás con dolor...

Tal vez entonces entiendas, como te quise yo.


Mi mejor regalo

Unirse en el cielo sin apuros,
sin prisas y muy despacio,
olvidar la hora en los tiempos
y pederse por todo tu espacio.

Entrar guiado por tus manos
sin que se opongan paredes,
cuando nos abrazamos
en los largos y fríos atardeceres.

Sin lámparas ni luces encendidas,
solo tus ojos que me iluminan,
abriendo mis cansadas pupilas
para hallar los brazos que esperan,

Subir hasta el paraíso infinito
y bajar a los fondos marinos,
para alcanzar el Olimpo,
en tus encantos divinos.

Y volar con las alas abiertas
galopar por senderos inciertos,
carrera de almas completas
en el vuelo de los sentimientos.

Andar por las sendas de la piel,
oler tu aroma en el anochecer
darte el beso tierno y fiel,
es el camino a recorrer

Buscar entre sábanas las caricias,
la suavidad del alma entregada,
descubrir de sus ojos las delicias
y en el cabezal la luz de mi amada.

Saciarse de la esperanza callada,
oír los silencios del alma llana,
hasta que este llena y embriagada
en los ecos serenos de la mañana.

Unir deseo con piel y piel con deseo
como regalo de los ansiados sentidos,
es obsequio y realidad que yo poseo,
desde que estamos unidos...


Preso de amor

Me tienes encadenado a tu amor,
son cadenas que no causan dolor
pues enlazado quiero yo morir,
para atado a ti por siempre vivir.

Dulce condena entre las estrellas,
eres mujer entre las más bellas
estrella que ha sido y tengo robada,
preso de amor estoy por mi amada.

Reo y libre por siempre en ti soy
pues el amor que te tengo hoy,
ayer de ti me lo apropie
y mañana te lo regalare.


Quisiera ser...

Desearía sustituir a tu almohada
cuando a ella estás abrazada,
ser el pliegue de la sábana
que está pegado junto a tu cara
con los brazos formar el lecho
donde te posas y descansas
que mi piel sea la cálida ropa
que abriga tus madrugadas,
disponer mi corazón como habitáculo
de todos tus sueños,
ser la tenue y pálida luz
que té despierta por las mañanas
y darte los buenos días
con un beso al llegar el alba.


Cruento tiempo

Lento el transcurrir del tiempo,
desespero cuando no te tengo
y si te veo es solo un momento.

Tiempo cruel y en desacuerdo,
contigo pasa como el viento
y sin ti es todo un tormento.

Esperarte se me hace pesado,
encontrarte es esperanzado
y pronto el tiempo a pasado.

Más llegará el día esperado
que siempre este a tu lado
y el tiempo tendremos parado.


Andar por tus letras

Da gusto perderse en tus versos,
me guías sin prisas hasta las estrellas
mostrándome las más bellas,
haciéndome el señor de los sueños.

Viajar por cada uno de tus poemas,
adentrarse en tus pensamientos
para que afloren los sentimientos,
que rompen todos mis esquemas.

Cada uno de ellos cura los lamentos,
enjuagando las amargas lagrimas
causa de todos mis tormentos.

Caminar por todas tus fantasías
y encontrarme entre tus sonetos,
llena mi alma de gratas alegrías.


La comida de..

Señora no se me preocupe tanto
que no perderá la hija con llanto
pues con alegría ganara un retoño
y por su guiso la quiere todo el año.

Es cierto que usted esta acá
y yo ando mas bien por allá
pues allá, con ella será acá
si su estofado me lo lleva ella.

No la llamo mama política
por que estamos de elecciones
pues no quiero alterar las votaciones
y quedarme sin comida tan rica.

La llamare suegra como es natural
que a la madre de su hija así ha de ser
ya que no seria de buen menester
que yo me quedara sin cocido colosal.

Así que señora y muy suegra mía
ponga toda su experta atención
en conocer al yerno de su devoción
que devora sus platos con alegría.


Luna llena...

Luz llena de esperanza,
que te reflejas en mi amada,
la traes desde lontananza,
a la sombra de mi almohada.

Iluminas la noche negra
con el reflejo de su estrella,
trasladando por la espesura
la imagen y la luz de ella.

Luminaria que en la oscuridad
transportas toda su presencia,
serenando la cruel soledad.

Sueño al inicio de alborada,
que entra por mi ventana
y trae tu alma enamorada.


Somos...

Somos fieras enjauladas
detrás de nuestras pantallas,
que encienden las huellas
al ser por siempre liberadas.

Somos deseo en la frase callada,
conjunción de ecos en la alborada
y gritos en la noche atormentada
que llegan por la muda palabra.

Somos abrazo en las nubes,
contacto incorpóreo de pieles,
surcos eternamente fieles
en los encuentros breves.

Somos contacto en el viento,
brisa fresca del sentimiento,
cálido y grato recibimiento
que llega con el pensamiento.

Somos amor en toda categoría,
caricia regalada con alegría,
mino de mágica melodía,
anhelo al terminar el día.

Somos tal y como somos,
fieras, abrazos, deseos
y nos complementamos
libres cuando nos amamos.


El ayer ya no es esperanza

En ti, no se alarga ni acorta el tiempo
pues llenas todo este breve momento
y cuando lo recuerdo ya es pasado

¿Recuerdas acaso el tiempo que viviremos?
ciertamente que no, pues no lo conocemos,
que el saber del mañana, es olvidar el pasado,
recuerdos que del futuro me han llegado,
al pensar que desde el ahora me has amado,
pues el futuro y el ayer se han mezclado,
las esperanzas y los recuerdos se han entrelazado
para que hoy estés nuevamente a mi lado.

Caminaremos juntos por las veredas,
con la mirada firme y hacia las estrellas,
nos olvidaremos de nuestras lejanas huellas
y avanzaremos de frente sobre las nuevas,
no perderemos la mirada en lontananza
pues sola llegara sin mas tardanza,
ni viviremos en la lejana añoranza
pues el ayer, ya no es esperanza.

Quimeras que un día espera fueron,
con ilusiones el futuro nos trajeron
y en el presente reales se convirtieron.


Fin de.....

Ho¡¡ fin de semana glorioso
esperanza de no hacer nada
estar con linda osa amada
y disfrutar cual gentil oso

Duras tan y bien poco
que apenas te recuerdo
de cuerdo me vuelvo loco
pues si de ti me acuerdo

Que el próximo sea largo
nos saques del letargo
no dejes sabor amargo
y seas algo menos luengo

Que por osar, oso y espero
que llegues mucho primero
y tenga verso en el tintero
para la osa que yo quiero


Tu sueño

Tu sueño es don que me concedes
del que demanda sin condición,
en una fantástica inspiración,
que llega cuando te adormeces.

Del letargo sale la razón
en quimeras hechos versos,
estrofas que son deseos
con mágica composición.

Es despertar todos los ensueños
el velarte en cualquier situación
y de visiones hacer días bellos.

Amor duerme en esta ocasión
que al custodiar tus sueños
plasmare en ellos mi corazón.


Amor en la distancia...

Un día sin ti se me hace eterno,
me doy cuenta que te necesito
se acrecienta el deseo,
se sosiega el sentimiento,
Interminable se hace la espera,
cuando no te veo por el firmamento
y deseo estés nuevamente a mi vera,
para regodearte en el encuentro,
Apareces con la brisa de la mañana,
te obsequio un poema mísero
y lo regalas con un dulce beso
trayendo luz de vida por mi ventana
Te recibo siempre con prisa
llegas desde el silencio callado
a despertar al espíritu enamorado
y me calmas con tu sonrisa
Amor de mas allá de los mares
deseos de pasiones carnales
regresas en besos puntuales
y complementos espirituales
Cuando llegas por lontananza
los tiempos se hacen efímeros
renuevas toda la esperanza
en la eternidad de tus brazos
Más un día uniremos las alas
surcaremos el cielo con ellas
volando mas allá de las ideas
y yaceremos bajo las estrellas


Amores de calle

Amores que se derriten, amores presurosos,
gentes que se afanan negando sentimientos,
asfalto en llamas con cuerpos sudorosos,
fragancias ardientes esparcidas a los vientos.

Es ir y venir para no llegar a ningún lado
con pensamientos de cuerda locura,
dejar un rastro que ayer ya hemos dejado
en deseos de placentera premura.

Se empapa de fuego el pavimento,
los cuerpos se funden transitando,
con aromas lanzados al viento
en el hoy que no hemos buscado.

La velocidad agobia las pasiones,
sexos que chocan sin encontrarse,
olores sin esencia de las ilusiones,
amores que se hallan al perderse.


Buenos días...

Amanecer a la vida tras una larga partida,
abrazar la esperanza cruelmente perdida,
hallar el camino que me lleva a la salida,
en ti es realidad, que llena la espera vivida.
Verte aparecer tras la enorme distancia,
llenando el espacio con tu fragancia,
trae a mi alma toda la mágica esencia
que siempre me llega con tu presencia.
Sentir los latidos de tu corazón,
en abrazo que despeja la razón
con el palpitar de tu ilusión,
es deseo y toda mi aspiración.
Percibir que de mi formas parte
y temblar con tan solo besarte,
no habrá vereda que nos aparte
del destino ni un solo instante.
Estremecer el callado sentimiento
y gritar al sigiloso pensamiento,
con silencios amarte en el viento,
es mas de lo soñado que yo siento.
Dormir al amparo de tu alma
me trae la anhelada calma,
el abrazo como almohada
y descanso en toda jornada.

Hoy amanecí... te vi... te sentí...
estabas en mi... me estremecí...
y en ti.................... me dormí...


Reflejos

La luz ciega tus ojos con amargos sollozos,
viendo en la penumbra lo que tanto te asusta,
palidecen las estrellas y la luna no alumbra
y se torna el reflejo confuso con tus llantos.

El alma se siente herida con la esperanza partida,
te asolan los quebrantos envueltos en crueles lamentos,
muerte por momentos que envenena los sentimientos,
visión que en noche oscura siembra la amarga duda.

Más enjuga los llantos y mira los seres reflejados,
que la luna esta iluminada en la faz de la enamorada
y no ves los rostros de los cuerpos entrelazados.

Ya mas tranquila y sin lagrimas en la mirada,
pon todos los sentidos en los entes que están unidos,
uno es la luz que te alumbra y el otro, tu cara reflejada.


El otoño...

El otoño se vistió con toda su inspiración,
desnudando el alma del frío abrasador,
con la cálida y cruel muerte de la flor
y el aroma de la trágica descomposición.

Cae el verso, se marchita la hoja del dolor
vestida desnudez en caudales de pasión,
por ríos de esperanza en germinación,
al amparo de la noche hambrienta de color.

La gélida brisa trae torrentes de emoción,
lluvia de sentimientos en todo su ardor,
melancólicos sueños en composición.

Época gris y carente del esperado calor
que desnuda al más ardiente corazón,
vistiéndolo de fresco y nostálgico amor.


¿Cómo, cuando o porque?

Hay preguntas que uno se hace
y no sabe responder,
sencillas preguntas
para respuestas complejas.
¿Cómo, cuando o porque?
nos llega a acontecer,
que unas nos llevan a las otras
aun siendo disparejas.

Si el ser humano
tuviese respuesta a las preguntas
seguramente
no se las llegaría a plantear,
pero esta en su condición
el saber las respuestas
para escoger la vereda
por la que caminar.

Largo es el sendero
que nos toca transitar
y el saber la respuesta
no merma las dudas
pues no sabemos
lo que mañana ha de pasar,

Pero si puedo
asegurar sin vacilaciones,
que el amor
siempre te logro regalar
hoy, mañana
y en todas las ocasiones.


Te amare...

Te amare por solo breves momentos,
espacio efímero, que florecerá eterno
llenando de fragancias los sentimientos,
que germinan en el corazón tierno.

Podrá parecerte que es poco
lo que perduran los pensamientos,
más tu ternura me vuelve loco
y persevera en mis conocimientos.

Solo en tres se hallarán los tiempos,
fugaces, prolongados o eternos
en que el amor unirá los cuerpos.

Al naciente abrazo será el primero,
de segundo una vida yo quiero
y por toda la eternidad el postrero.


Tu abrazo

Es bálsamo para mi seca piel,
energía regalada sin condición,
tranquilidad en jornada cruel,
imagen que colma la razón.

Es quimera nacida de la ilusión,
realidad en el entusiasmo fiel,
resguardo que desata la pasión,
deseo esbozado a pincel.

Es perspectiva en el día aquel,
calor que aviva la imaginación,
sustancia y anhelos de estar en él.

Es deseo en toda la expresión,
ternura con esencia a miel,
amor que alimenta el corazón.


¿Quimera?

Decir lo que por decirlo esta ya gastado,
que por expresarlo no es desperdiciado
y es perdurable cuando es prodigado
pues por decirlo es día a día renovado.

Hacer lo que se hizo en su momento
sin ceder ni forzar al cuerpo,
sintiendo la brevedad del tiempo
en la eternidad del sentimiento.

Desear lo que tanto se ha deseado
y esperar en el ser amado,
el reflejo de lo que es ansiado
es deseo por ti regalado.

Soñar lo que por soñado es real,
realizar lo imaginado tal cual,
la esperanza hacerla actual
y que el soñar sea habitual.

Vivir lo que hemos soñado,
hacer presente lo deseado
y decir tu eres el ser amado,
no es quimera de enamorado.


Una flor...

Tersa flor envuelta en roja pasión,
ardor cubierto de pétalos bermellón,
sangre que estalla en el corazón,
ardiente ternura que es toda mi razón.

Conocimiento que me lleva a la locura,
desnudez de cuerpo y alma pura,
que ilumina la noche gris y oscura,
mostrándome su calor y su frescura.

Fresca flor nacida en el ocaso,
que alivia mi cansado paso,
me resguarda del cielo raso
cubriéndome con su abrazo.

Da calor al llegar el oscurecer,
al alba me hace reverdecer
y yo soy quien llego a ser,
porque la flor es mi mujer.


El Tiempo...

El tiempo pasa sin prisas,
rápidamente pausado,
con las fatigadas sonrisas
del momento no pasado.

Lenta y cruelmente rápido,
velozmente entre las brisas,
hasta el viento se ha parado
en las horas parsimoniosas.

Sin premuras pero sin pausas,
pasa, salta y esta detenido
para contener nuestras causas.

Umbral de periodo esperado,
en final de días con tardanzas,
espera lenta, por estar a tu lado.


El ultimo beso...

Es cálido, suave y dado con esmero,
se posa tierno, dulce y placentero,
casi imperceptible al ser el postrero,
llega sereno y es el que mas espero.

Es la entrega que me llena tanto
la calma que por siempre deseo,
el albor que en la noche poseo,
es el anhelo en un solo contacto.

Es el principio que yo quiero,
al finalizar un día extenso
y florecer el ardiente sueño

Es caricia que despierta el verso,
acuna el alma en el descanso
y da vida con tan solo un beso


En la profundidad...

En la profundidad de la oscura noche,
y con la altura de la luna iluminada,
en la alborada del derroche
y con la justa luz de mi enamorada

Beso al viento en la madrugada,
brisa que vuela con el pensamiento,
y trasporta hasta tu almohada
todo el sueño de mi sentimiento

Quimeras que un día fueron,
realidades que forjamos,
con el deseo te trajeron
y hoy en uno nos amamos


La vida en dos abrazos

Uno de buenos días y el otro a la partida, todo un mundo que se resume en unos segundos, eternos, breves pero solo nuestros.

Brazos al viento para abrigar la esperanza, para atrapar el deseo y detener el tiempo.

Miembros temblorosos que aprietan la carne para que no escape el sentimiento, mezcla de sudores, caudal de anhelos entregados en vigorosos encuentros.

Apoyos de los callados lamentos, palabras expresadas con el roce, silencioso dialogo en la unión de los cuerpos.

Eterno vivir en la brevedad del momento, espera larga que se funde en los primeros segundos germinando con el fruto de un beso.

Abrazo tierno y callado trasmisor de vida, contacto de sinfónica poesía, ecos de silencios con gritos de alegrías, primavera en flor que llega todos los días.

Manos alzadas para recibir el nuevo día, ayer fueron consuelo de la melancolía, hoy son torrentes de alegría y mañana serán ríos de nueva vida.


Te besaré...

Te besaré con mirada felina
e iluminaré tu cuerpo en la neblina,
sombras y volúmenes besaré sin descaro
hasta desenterrar el poro más raro
y al amparo de mi boca te regalaré
apasionamiento, deseo y te besaré...

Besaré el más apartado pensamiento
con el arrumaco dado en sentimiento,
tu aullido besaré para ahogarlo
con el callado placer de regalarlo
y en el eco del grito te robaré
savia, vida, esperanza y te besaré...

Te besaré en la punta de los pezones
me deleitaré en dos buenas razones,
acaloradamente te besaré, mi diosa
hasta que fríamente estés dichosa,
entre muslo y muslo degustaré
tibias humedades y te besaré...

Besaré la cálida primavera
que de ti emana por donde quiera,
sin quimera te besaré en la boca
en callado susurro florecerás loca,
flor de hembra placentera
que se entrega, al besarla por entera.


Calla amor...

Calla amor que no te oigo
que se pierde tu corazón
y se me nubla la razón.

Calla amor que no te escucho
que el eco llena el pensamiento
y ahoga todo sentimiento.

Calla amor que no te percibo
que la pasión recorre la huella
y se apaga la estrella.

Calla amor que no te veo
que la luz me torna ciego
y el día se vuelve negro.

Calla amor y dame el silencio
que con él me llega tu poesía
a toda el alma mía.

Ama, vive, y callada sueña
que al hacerte mi dueña
yo de amor, me enmudezco.


Carta a Nené

Buenos días amor:

Puedes escribir de todo,
cómo, dónde y cuánto quieras
pues no me parecen quimeras
vivir acariciando las estrellas,
yo la verdad no necesito ir tan lejos
para sentirte, para abrazarte o besarte
ya que estás dentro de mí
y floreces cada día al despuntar el alba,
me das tu fragancia en toda la jornada
y colmas mis deseos en la noche callada.

Hablamos y hablamos
y entre ello conversamos,
miramos al frente
y en el momento nos amamos,
ya hemos superado al pasado,
el presente se nos queda pequeño
y del futuro somos los dueños
pues no vivimos de sueños
ya que tornamos
ilusiones por realidades,
vamos mas allá de la fantasía
pues el amor
nos llega renovado cada día.

Es cierto que nuestros deseos
no se han visto cumplidos,
ni se verán jamás,
puesto que en cada momento son nuevos
y conforme los realizamos,
otros nacientes deseamos
y todo esto es lo que nos hace sentir
y saber que estamos vivos.

No he tocado tu piel
pero te podría describir su tersura.
Tu aroma todavía no llegó a mi olfato,
pero siento en cada momento tu fragancia.
No he visto tus ojos,
pero tengo tu luz en los míos reflejada.
Tus labios en los míos no se han posado
pero tengo todo el sabor
y calor del beso que me has dado.
Tu abrazo y el mío no se han fundido,
mas siempre me ha reconfortado
la unión que hemos tenido.

Me dirás que estoy divagando,
soñando y que no estoy en mis cabales,
pero no es delirio la vida
cuando es concebida,
cuando es plena de sentimientos
y esperanzas cuando es vivida,
cuando en ella me despierto cada día
y en ella descanso, sueño, vivo
y amo en tu compañía.

Te preguntas
si nuestras pieles se aceptarán,
es una incógnita que el tiempo nos dirá,
pero si puedo aventurar
la respuesta que me llega
de la certeza de todo el deseo
y el amor que nos profesamos
y que será difícil que una vez juntas
podamos separar nuestras manos.

Ya somos uno en dos
y esto, no lo separará
ni el tiempo ni la distancia
que esté yo allá o tú aquí
es sólo una situación
de proximidad física,
pero la unión espiritual
no creo se pueda aproximar más
pues estás por entero dentro de mí
y no hay espacio para más.

Por eso te digo y repito
que puedes escribir todo,
cómo, dónde y cuánto quieras
puesto que la realidad
ya no son quimeras,
pues estás en mí
y me siento a tu vera.


Peregrinar

Largo es el camino, largo el caminar,
buscando respuestas en el viento
en sinuosas sendas para hallar el hogar,
y al paso dejando el pensamiento.

Reflexionando en la ruta de tu vagar,
caminar por el abrupto razonamiento
y en la brisa la oculta razón encontrar
del eterno y buscado sentimiento.

Respuestas que fijan el movimiento
y dan reposo al fatigado transitar,
secando lagrimas de cruel lamento.

El horizonte limpio esta por llegar,
atrás queda el oscuro sufrimiento,
larga es la vereda, largo el peregrinar.


El abrazo

Pasos perdidos en el tiempo
vagando por el pensamiento,
errando con el cruel lamento
y arribando a tu encuentro.

Tu y yo frente a frente
Y lo demás no prevalece,
la mirada se enternece,
el corazón salta al verte.

Miradas que se tropiezan
cuerpos que se juntan,
labios que se buscan
extremidades que se cruzan.

Tiempo largo el esperado,
brazos alzados al viento,
brisas en el sentimiento,
abrazo finalmente hallado


Largo es...

Larga noche de desvelo,
largo caminar por el deseo,
larga es la espera del consuelo,
largo el desahogo que en ti poseo.

Me desvelo en la noche larga,
por velar el brillo de su estrella,
la alborada se despliega
con la luz que emana de ella.

El deseo es largo al caminar
pues al volver la vista atrás,
parece que acabas de empezar
y sigues estando donde estás.

Del consuelo es larga la espera,
esperando esperar y nunca alcanza
pues uno parece que se desespera,
evocando el alivio de la esperanza

El desahogo aplaca el llanto,
el quebranto nos hace olvidar,
recordando todo y cuanto
nos queda de amargo llorar.


La ducha...

Efluvios desprendidos,
vapores sofocados,
de poros encendidos
y en el líquido refrescados.

Se desliza en limpio y dócil descenso,
refrescando el sudor arrebatado,
arrastra las impurezas del deseo,
sofocando el calor exaltado.

Discurrir de arroyos por suaves veredas
arrancando de ti la suave fragancia,
de cada recodo, de todas las sendas,
e irradiando perfume por toda la estancia.

Fina capa que envuelve el cuerpo
mostrando la piel con destellos,
de limpias esperanzas en el tiempo
y pasiones en momentos bellos.

Cuerpo desnudo de mujer
con el contacto sobre la piel,
de la lluvia del placer
y el húmedo recuerdo de él.


Tu luz...

Luz que llega un día y otro día
apagas la oscura melancolía
encendiendo la mágica poesía
que colma la vida de alegría.

Me llega en la lúgubre oscuridad,
alborada en desnuda claridad
que ilumina el sueño con prioridad
y apaga la pesadilla de la soledad.

Fantasías de reales ensoñaciones,
utopía que colma mis emociones
que despiertan mis aspiraciones
y me traen versos e inspiraciones.

Quimera real que vuela por el mar
en el sentimiento me ha de encontrar,
abrazado a la esperanza despertar
y en besos hacerme por siempre soñar.


Sensaciones...

Mezclar el roce de nuestras pieles,
gustar de los efluvios que emanas,
abrir los poros a nuestros sudores,
comunicar los deseos que reclamas.

Acariciar los sonidos que prodigas,
oír el silencio de los pensamientos,
ver lo que con diligencia prorrogas,
sentir los callados sentimientos.

Fundir el hielo con las miradas,
penetrar hasta las entrañas
y ahogar las voces calladas.

Son sensaciones compartidas
y el regalo de las almas unidas
que en abrazo son entregadas.


Deseos al viento...

Hay deseos que los lleva el viento,
puedo decirte que es cierto,
o al menos yo así lo siento
y con él me llega tu sentimiento.

Llega fresco y acaricia mi cara,
me despierta en la gris mañana,
llena de luz toda la alborada
y le habla al alma callada.

Susurros que apenas se perciben,
ecos que te describen,
sonidos que no prescriben
y que en el corazón se reciben.

Llegan raudos y serenos,
se acomodan muy calmosos,
desechando a los menos buenos
en batalla de eternos besos.

La victoria les sonríe y permanecen,
al alma dulcemente enternecen,
los sentimientos ya no me pertenecen
pues son los tuyos los que prevalecen.

El viento me trae tus deseos,
yo en sueños los poseo,
en mis letras los verseo
y al viento devuelvo en besos.


Flor de los Andes

Blanca flor de los Andes
que para mí has nacido
curas al caminante herido
en los extensos viajes,
das aroma a raudales
por el viento esparcido,
eres aliento conocido
que mata todos los males.

Flor silvestre que te hallas
en lejana y alta vertiente
buscaré de ti la simiente
errando sobre mis huellas,
me guiaré por las estrellas
para hallarte finalmente
en ladera distante
donde tu destacarás sobre ellas.

Tallo firme, erguido
y al viento los pétalos abiertos,
aromas a la brisa lanzados
que colman el sentido,
color tenue y pálido
que llena de estremecimientos.

La larga y cruel espera
ya por fin ha concluido,
tu fragancia ha traído
el viento hasta mi vera
y ya llegó la primavera
al corazón malherido.


El amor...

Hoy nuevamente germinó la flor,
al llegar el alba renace a la vida
y con él rocío nos regala su olor,
tras en la noche estar dormida.

Revive fresca, perfumada
Y es azotada por el intenso calor,
pero aun así no es marchitada
pues la resguarda todo el candor.

Amparo y sombra que le da vigor
en la tórrida y cruel jornada,
manteniéndola viva y con frescor.

Es simiente día a día renovada
que la priva del cruento dolor
y es germinada en la alborada.


Con una mirada...

Es cierto que casi nada nos dijimos,
pero sentí una sensación de deseo,
de conversación loca,
de proyectar nuestro nido,
de placer al besar tu boca,
de recuerdos ya vividos,
de estar viviendo el mañana,
de los abrazos perdidos,
de secar tu lagrima,
de oír nuestros suspiros,
de realizar la esperanza,
de tomarte de la mano,
de hablar con calma,
de hacerte alguna gracia,
de olvidarnos del mundo vano,
de acariciarnos en la penumbra,
de acelerar el tiempo,
de reinos de la vida,
de llorar en el encuentro,
de mitigar la despedida,
de alargar nuestro beso,
de guardar tu sonrisa,
de leerte algún verso,
de que planches mi camisa,
de que hagamos la cama juntos,
del placer de abrazarte,
de pintar y la casa arreglar,
de pasear por la vereda,
que tenemos que cenar,
de que queremos hacer el amor,
de que tenemos que soñar,
de que mañana nos miraremos
y volveremos a empezar.

Todo esto y algunas cosas mas
vi en nuestra mirada
y no nos dijimos casi nada...


La noche...

La lánguida noche
se apodera de los cuerpos,
que en los brazos de Morfeo
caen extenuados,
y en el lecho de blancas nubes
son depositados,
para en abrazo perdurar
por todos los tiempos.

Seres desnudos
vestidos de esperanzas y sentimientos,
cargados de angustias
que en abrazo mitigan el llanto,
que con un tierno beso
hacen de las estrellas su manto
y en comunión de sueños
abandonan los sufrimientos.

Despojados de los atavíos
se despiertan los sueños,
espacios y pieles
que se buscan sin cruenta demora,
las quimeras envueltas
en la pasión de tan fatigada hora,
hacen que nuestros deseos
se vuelvan pequeños.

Mezcla de caricias
y de afanes repleto de emociones
que descargan
las angustias de la esperanza,
tranquilizan el alma
y el cuerpo sin mas tardanza
y en amor satisfacen
los dormidos corazones.

Noche extenuada
y breve noche temporal,
eres pasión, eres locura
y curas la amargura,
despojándome de la soledad
con la hermosura
de la mujer que abraza
a este soñador mortal.


La siesta...

Se te cierran los párpados pensando en el descanso anhelado,
el cuerpo fatigado se encamina hacia la alcoba.
.- ¿No te importa si reposo por momentos?
.-¿Pero sola?
! ¡No! te llevo en mis pensamientos.
.- Anda ve, que te velará mi sombra.
Entras en la penumbra de la habitación y te desvaneces en el lecho,
yo quedo al acecho que nada te perturbe la ensoñación
y quedo buscando la inspiración en tu luz que me alumbra.
Entre miradas furtivas te veo relajada, con la mirada entornada
en los sueños que has sido agraciada, respiración rítmicamente pausada y en el silencio entregada.
Duermes tan dulcemente que no te percatas en que no dejo de mirarte pues es placer el contemplarte que gozo profundamente al desproteger a tu cuerpo de la sabana con que lo cubres.
Reparo en la mujer desnuda con toda su hermosura,
de altas cumbres y profundas laderas que enmarcan el deseo en praderas y la pasión en labios de frescura.

Advierto torrentes de sensaciones que se desparraman por tu piel, manantiales de dulce miel repleta de mágicas emociones.
Percibo los sonidos de tu desprotegido organismo que me cautiva
y es el mismo que ayer, hoy y mañana me hace perder los sentidos.
Una tenue brisa te lleva al estremecimiento que te despierta al momento con una limpia sonrisa.
.- ¿Que miras amor?
.- Amor... no miro, veo.
Veo tus sueños al viento, la entregada placidez de tu corazón,
la mujer que me roba la razón, la dueña de todo mi sentimiento.


Carta en décimas

Mi muy dulce señora mía:
Mi, que indica posesión
en grande y buena razón
de locura en el día a día,
al disfrutar toda alegría
que llena de felicidad
y luz en la oscuridad,
lo que de usted adquiero
dándome cuanto yo quiero,
muy y en amplia cantidad.

Muy y en amplia cantidad,
desbordando todo sueño
ya sea grande o pequeño
que se da con sinceridad
y con toda la claridad
que iluminó el día aquel
por el cual te seré fiel,
en que toda pasión loca,
me llegó desde tu boca
dulce sabor a fresca miel.

Dulce sabor a fresca miel
de flor y lejano panal
que endulza todo mi mal
si se posa sobre la piel
en jornada de amarga hiel
cuando esta en un pozo
el alma que yo esbozo
es quimera o fantasía
pero nunca serás utopía
señora por la que gozo

Señora por la que gozo
con toda la luz que aportas
en jornadas muy cortas
que es muy breve el trozo
de tiempo que yo destrozo
cuando te rimo y verseo
mirando tu contorno óseo
y acortando la distancia
que llega a tu fragancia
mía por serlo y que poseo.

Mía por serlo y que poseo
como regalo llegado
de un lugar muy alejado
en maravilloso paseo
con pasión, amor y deseo,
sanando mi melancolía
con tu luz y sabiduría
y me hace ser el dueño
del poco amor que sueño,
Mi muy dulce señora mía...


Versos y besos

Verso a verso me llegaron tus besos,
beso a verso se complace el deseo
beso a beso los plasme en versos,
verso a beso eres todo cuanto poseo

Poseo el deseo de tus besos
gozo en los besos de tus deseos
beso cada uno de tus versos
y verso en el gozo de tus besos

Besos que de mas allá son deseos
que en verso me llena de gozo
pues poseo los deseos tus versos

Versos que en deseos yo beso
gozo y poseo todos los deseos
que en besos moldeo en el verso


Enamorada...

Llegas con el vuelo del cóndor
tras remontar la sierra nevada
con el ala desplegada
y dejando detrás de sus plumas el color
que le hace del cielo señor
y dueño del sol en toda morada
desde la primera luz iniciada
hasta que la noche mata el albor.

Te abres cual perfumada flor
al despuntar la alborada
con la esencia regalada
que sama y calma el dolor
y el aroma embriagador
que llega en la madrugada
abriendo la noche cerrada
con el perfume del amor.

Llenas todo de color
con la luminosidad de la mirada
mágica poesía iluminada
en la armonía y el dulzor
que da el verso de amor
al sentirte mujer deseada.

Te entregas con el candor
de fresca rosa recién regada
con la vista callada
en el perfumado sueño de la flor
y toda la quimera y frescor
de mujer niña enamorada.


Nunca...

Nunca vi mujer más predispuesta
a lanzarse hasta unos brazos
y bajar la empinada cuesta
que en lo bajo la espera en abrazos

Nunca sentí en mujer más atenta
la ilusión de los suspiros
con la voluntad completa
de ser dueña de cada uno de ellos

Nunca goce de mujer más entregada
a la vida recientemente recuperada
con el cuerpo y alma esperanzada

Nunca a mujer vi, sentí y goce en sueños
que de las realidades nos hacemos dueños,
desde los más grandes a los más pequeños.


El deseo en la piel

El deseo de la carne no lo es todo,
es muy importante, no cabe duda
pero cuando la fruta esta ya madura
la simiente, es lo que florecerá en el lodo.

Es motivo de atracción piel tersa y jugosa
se cubre de tono, color y el tiempo la madura
la picotean las aves mientras esta sabrosa
mas el germen que queda es lo que perdura.

Es necesario que la piel se muera
que se quede en el puro hueso,
pues germinando, nacerá en la primavera.

Puede ser bueno
lo que para ejemplo he tomado
a la fruta carne y piel
es lo que la hace más apetitosa
pero el amor, si carece de núcleo
nunca será renovado


En el viento...

Veo tu cabello enredado en el viento,
cabalgando en la fresca brisa de la mañana
dejando una estela de luz por la ventana
que ilumina mas allá del discernimiento.

Percibo tu piel cubierta de nube sedosa
que con el viento da forma al infinito universo
plagado de secretos placeres e inmenso deseo
en cuerpo de mujer y flor hermosa.

Distingo en tu boca el néctar del maduro fruto
que da la cosecha tras la paciente y larga espera,
con los cuidados del sol, el agua y el viento.

Veo, percibo y distingo en el viento la esencia
del deseo a flor de piel y el estremecimiento
que en la brisa, me llega con toda tu fragancia.


Por pensar ya no pienso

Pensar que pensaba pensar
que por pensar ya no pienso
pues pienso que te siento
sintiéndote en todo mi pensar.

Siento tus besos fluir
por mi cansado cuerpo,
esperanza del tiempo
que esta por venir.

Percibo el calor del abrazo
que acorta la distancia,
es tu cálida fragancia
posada en mi tosco brazo.

Oigo el acompasado latir
de tus suspiros al viento,
brisa que en un momento
mi rostro llega a cubrir.

Distingo todo el deseo
que flota en el ingrávido aire
que se posa con donaire
en la vida que en ti poseo.

Veo el silencio callado
en el frío horizonte lejano
que arriban de tu mano
en cálidos ecos a mi lado.

Veo, distingo, oigo percibo y siento
lo que ya no esta en mi pensamiento
que pensaba pensar y ya no pienso
pues te siento en mi, aunque no te veo.


¿Alguien podría?

¿Alguien decirme podría?
Si es posible concebir
alguna bonita poesía,
sin tenerla que escribir.

Sin tenerla que escribir
no hay balada que suene,
sonara mal al discernir
y posible que no llegue.

Y posible que no llegue
a quienes va destinada
y se pierda o se quede
en tan solo una tonada,

En tan solo una tonada
el canto se torna presto,
haciendo de la cantada
un coro algo compuesto.

Un coro algo compuesto
de palabras en armonía
es lo que siempre pregunto
¿Alguien decirme podría?


Qué te puedo decir

Qué te puedo decir que no te dijera,
si el pronunciar tu nombre ya me libera
de la absurda oscuridad en que yo cayera.

Qué te puedo decir que no te dijera,
si sólo escuchar tu voz placentera
se despeja la duda que yo tuviera.

Qué te puedo decir que no te dijera,
si hoy tu boca un sólo beso me diera
enloquecería mas de lo que quisiera.

Qué te puedo decir que no te dijera,
si antes de soñarlo me llegó la primavera,
despertándome de la dormida quimera.

Qué te puedo decir que no te dijera...


¿Cuándo empieza o termina?

Cuando parece que todo termina,
es justamente cuando acaba de empezar,
la flor se torna creación
dispuesta a fructificar,
solo requiere viento, calor,
agua, frío e inclemencias
para que el tiempo la haga madurar.

Para que el fruto madure
necesita la muerte
en la profundidad del terreno
pues perdiendo la simiente,
encontrara en el resurgimiento.

La flor es menuda al nacer
pero con tesón llega a florecer,
mas para dar su fruto
todavía debe de crecer
y acortar la distancia
que le separa de la luz
y el calor que le dará
la energía necesaria
para desarrollarse.

El crecimiento es lento y penoso,
cuesta mucho alcanzar el cielo
y cuando esta en todo su esplendor
el sol le despoja de toda su hermosura, marchitando toda la envoltura
y dándole la savia necesaria
que la tornara de flor a fruta madura.
Una vez el fruto esta maduro
no termina su cometido
ya que su destino es volver a la tierra
de la cual ha resurgido
y para ello debe hallar
la vida en la muerte de la simiente.

Que vuelva a resurgir o no
es cosa de su elección
según busque la muerte,
ya sea desde dentro o desde fuera.

Si decide hacerlo desde dentro
mantendrá toda su forma y tersura,
pero el gusano de la duda
le comerá la simiente
y no tendrá mas esperanza
de nuevas primaveras.

Y si por el contrario lo hace desde fuera, servirá de alimento a las aves
y otros comensales
perdiendo así el jugoso fruto,
pero no la simiente que en todo caso
puede ser depositada en otro espacio o lugar
y así de nuevo germinar.

Por ello cuando parece
que todo termina,
es justamente
cuando acaba de empezar.


No quisiera...

No quisiera...
y debo hacerlo,
para mitigar el llanto
que enturbia mi cerebro,
con tercos pensamientos
que ciegan mi corta visión
de todo lo que en ti tengo
y valoro al sentir que te pierdo.

No quisiera...
y sé que lo necesito,
para ahogar la pena
que me consume por dentro
al separarnos el ancho mar
y que por mas que lo intento,
me priva de la primavera
que sin ti yo no poseo

No quisiera...
pero creo que lo preciso
para limpiar mi vista cansada
y ver el albor de la mañana,
tu reflejo en la gota del rocío,
la luminaria que palidece al sol,
tu cara grabada en la luna,
el rostro alumbrado por el amor.

No quisiera llorar... mas si que quiero


Descansar o seguir vagando...

Duermo en noche cerrada
y también a la luz del alba,
me sosiego si no te veo
y sí estas en mi almohada.

En todo momento descanso
aunque parezca lo contrario
que el amor me torna manso
al recogerme en lo soñado.

Dormido estoy desbaratando
el delirio largamente soñado
y no hay cuentas en el rosario
para no seguir descansando.

En sueño profundo me relajo
siendo mi cubil tus brazos
pues solo tengo un respaldo
y siempre lo pongo debajo.

Y así es placentero el descansar,
el ensueño siempre esta mullido
por los brazos del ser querido,
sea aquí o en cualquier lugar.

Por eso duermo, sueño y en ti reposo,
ya me canse de mi eterno vagar.


¿Despacio?

Lentamente el alma se consume
y solo le da vida tu sonrisa,
la fugaz caricia, los besos.

Así que no esperes que vaya despacio,
me embriagare de ti
en todo momento y ocasión.

Tomare tu esencia sin ser reacio
y trasportare la que yo te di
al tiempo sublime de la pasión.

Y en conjunción del amor que nos une
gozaremos del amor sin prisa,
en todo espacio, en los versos.


Uno, dos y tres

Uno, dos o tres y no éramos nada,
tres, dos, uno y lo somos todo,
en un todo somos uno en dos
y dos en uno, seremos los tres.

Llegará despacito y sin apuro
porque lo quisieron dos
y en uno lo engendraron,
tres de dos por deseo solo en uno.

Será frágil e indefenso
y su fragilidad dará la fuerza
por la que estará concebido
en la esperanza de ser forjado.

Doloroso parto para fraguar
que lo da el necesario tiempo
en la larga y penosa espera
del deseo hecho sentimiento.

Nace de la nada, en un suspiro,
en la brevedad de un sueño,
en el perenne y sutil delirio
con la quimera de la eternidad.

Más no es eterno sin el cuidado
que reclama un día y otro también,
alegrías y sinsabores por doquier
precisa para estar vivificado.

Y si se deja de lado o descuida
nos herirá de muerte el espíritu,
espectro que vagará por la vida
si no existe uno y dos sin tres.

Tres, dos, uno y no éramos nada,
y dos en uno somos ya los tres.
Tú, Yo y el Amor que nos hemos dado.


Te necesito

-Necesito oír el murmullo del viento en tu pelo,
tu fresca brisa que acaricie mis labios,
el huracán de tu corazón azotando mi frente
las tempestades que en ti sientes.

-Necesito saborear la miel de tu boca,
la sal de tus ahogadas lágrimas,
la sequedad de la madura piel,
la humedad de tus entrañas.

-Necesito ver lo que no está permitido,
tu desnuda y loca juventud,
tu vestida y sencilla madurez,
el cuerpo que alumbra mis razones.

-Necesito tocar la piel de mis sueños,
acariciar la luz que me ilumina,
apretar la mano al viento extendida
palpar mi esperanza encontrada.

-Necesito sentir que acaricias mis poros,
que mi calor se mezcle con tu aroma,
y que mis manos atrapen tu cintura,
para que no medie nada y formemos un todo.

-Te necesito con los cinco sentidos.


La noche...

-Noche cruenta
de húmedo quebranto,
sequedad del alma
que baja desde la sierra.
agua turbulenta
que amansa la sucia ladera.

-Noche eterna
en lagrimas de lamento,
mojando la esperanza
por el viento reseca,
espiral que se desata
con fuerza descontrolada.

-Noche negra,
mente en blanco,
humedad en la cadera,
seca la garganta,
torbellino que todo lo arrasa
y deja la nada.


Al atardecer...

-Atardecer rojo que despierta la pasión,
con el solo liviano murmullo del viento,
siluetas a contraluz que andan por el malecón,
en placido paseo, con la brevedad del momento.

No hay prisas por alcanzar el oscuro crepúsculo,
ni que la negra noche nos envuelva en confusión,
el paso sigue tranquilo, pausado y sin apuro
para aprovechar al máximo, lo que es nuestra razón.

De la mano, el viento nos susurra su canción,
balada de la brisa en el purpúreo firmamento,
silencio solo roto por el palpitar del corazón.

Andamos y nos encontramos con el tiempo
abrazos al atardecer en el rojo malecón,
besos de pasión, que no se los lleva el viento.


Llegará el día...

En que tus suspiros no se pierdan en el viento,
que tu aroma de perfume a las flores,
en que tu sonrisa ilumine la mañana,
que tu mirada humedezca la reseca piel,
en que tu boca seque mis lagrimas,
que tu pelo me resguarde del viento,
en que tu abrazo desate la locura,
que tu miedo apague mi duda,
en que tu sueño sea mi descanso
que tu llanto lave mi cara
en que tus brazos sean mi regazo
que tu desnudez vista mi melancolía,
en que tu frío cuerpo le dé calor a mi corazón.
Llegará el día...

En que tu amor me regale la vida,
este día no llegará...
pues este día... ya llegó.


Tiempo al tiempo

Diez años sin la luz,
nueve meses gestados,
ocho semanas de llantos,
siete días de tristezas,
seis horas de quimeras,
cinco minutos de locura,
cuatro segundos de descuido,
tres instantes de dudas,
dos momentos de amargura,
una vida de dolor...

-Un sólo corazón,
dos cuerpos que se buscan,
tres suspiros al viento,
cuatro brazos que se descubren,
cinco lágrimas perdidas,
seis calladas palabras,
siete caricias halladas,
ocho poros sudorosos,
nueve sueños satisfechos,
diez minutos de pasión.

Toda una vida de amor.


No necesito la vida

Necesito la brisa de la mañana
para que despierte mi rostro
del lánguido sueño consentido
y poder soñar despierto.

Necesito la luz de la alborada
asomar por mi ventana,
para que abra mis ojos
tras la oscura y cruel noche.

Necesito el perfume de la flor
para vivificar el sentido
dormido largamente
en el dolor y la ausencia.

Necesito el calor del sol
a primera y en todas horas
para calentar el frío vagar
de mis cansados huesos.

Necesito tantas cosas mas
que me ha negado la vida,
pero la vida no la necesito,
cuando me llega tu sonrisa.


Dormida Inspiración

El verso esta callado
y el perro sigue ladrando,
le ladra a la mañana
por robarle a su amada,
desesperado aullido
pues su luz se ha dormido.

Negros nubarrones
caen sobre el perro cansado,
canta desesperado
al llegar la madrugada,
sinfonía de gotas
que al perro han empapado.

El día se quedó dormido
y la luna suspirando,
el perro esta pensativo
y el poema dormitando,
¡Despierta inspiración¡¡
Que tu musa esta llorando.


Húmeda sequedad

Carencia de humedades,
esperanzas resecadas,
secas madrugadas,
llantos en sequedades.

Calor abrasador para la simiente callada,
espera escondida mas allá del dolor
que germina en el clamor de la alborada,
fresca humedad en que renace la flor.

Mísero instante de belleza
en que es perfumado el lodo,
retorna el calor evaporándolo todo
dejando sólo la seca tristeza.

Monótono y lánguido calor
dueño de la simple inmensidad
que devoras la tibia humedad
secando la incipiente flor.

Seca flor regada en llantos,
esencia secada al viento,
bañada en sentimiento,
alborada de quebrantos.


Deambular por las olas

Placido romper de las olas,
ideas que se amontonan
las otras, detrás de las unas,
tenue luz al obscurecer.

Pies bañados en silencio,
suspiros que se lleva el viento,
quejido al morir el alba,
fugaces reflejos en la noche.

Humedad en las entrañas,
recuerdos pasajeros,
paisajes olvidados,
monótono deambular.

Perderse en uno mismo
y en el ocaso encontrarse,
crepúsculo del caminar
cuando el día se ha dormido.


Respuestas al alba

Cae la tarde sin haber amanecido,
apenada ventana de su luz ausente,
sonrisa apagada por el oscuro llanto,
mísera brisa que agita el alma,
frío que sacude las entrañas,
ideas que vagan por el viento,
negras nubes que me ciegan,
tormenta que llega del desierto,
crujir de sueños en la noche
y la duda que siempre pregunta.
¿Por qué y hasta cuando,
faltará la luz que me alumbra?

Pregunta que no se puede responder
cuando aparecen otras preguntas
que nos sumergen en un mar de dudas
¿Será la noche un desierto sueño?
¿Se cegaran las ideas con el viento?
¿La brisa enfriará las esencias del alma?
¿El llanto apagará la sonrisa ausente?
¿Amanecerá otra vez por mi ventana?
Respuestas que sólo las trae el alba


Canción...

Adiós con el corazón,
que con el alma no puedo,
al despedirme de ti
de puro amor yo me muero.

Se repite el estribillo sin cesar
en esta mañana de sol triste,
en que emprende el vuelo
la ultima estrella de la mañana,
la primera luz del alba,
la brisa que mece mi pelo.

Adiós con el corazón,
que con el alma no puedo,
al despedirme de ti
de puro amor yo me muero.

Se repite y yo me muero
si a mi ventana no llega la luz,
si de la sierra llega el silencio,
si tu rostro no esta en la luna,
si se evapora el perfume de la flor,
si ya no canta el ruiseñor.

Adiós con el corazón,
que con el alma no puedo,
al despedirme de ti
de puro amor yo me muero.

Se repite y vivir ya no puedo
en la oscuridad de la noche,
en el tórrido y desolado desierto,
en el camino sin horizonte,
en la soledad del cosmos,
en la profundidad del abismo.

Adiós con el corazón,
que con el alma no puedo,
al despedirme de ti
de puro amor yo me muero.

Se repite y me revelo,
grito al viento tu nombre,
aparto de mí la negra duda,
hago en amor el equipaje
y abro las alas al viento
para contigo alzar el vuelo.

Buenos días corazón,
que despedirme no puedo,
si me ausentase de ti
sin tu amor... yo me muero.


Placer y tormento...

Se desato la tormenta en la estancia,
las prisas vuelven el ambiente cargado,
olvidos que no carga la maleta reacia,
remolona a duras penas se ha cerrado.

Pasos para arriba, movimientos abajo
no olvides los trapos, la camisa ya presta
cierra la ventana si no es mucho trabajo,
repasa el aseo y péinate esa cresta.

Viajar, que placer y que tormento
del equipaje se resiste la maleta
y eso que parecía un momento.

Más si parece tarea compleja
el dejarlo todo preparado y listo,
por listos nos déjanos la pelleja.


En ti...

-Me busco y no me encuentro,
me confundo con mi sombra
ya no soy del espejo, el reflejo.

-Me escucho y no me oigo,
mutismo de gritos en la brisa
es el callado eco del silencio.

-Me contemplo y no me veo,
solo la incorpórea figura,
me disipé en el recuerdo.

-Me palpo y no me toco,
manos repletas de nada,
sólo se acaricia el viento.

-Memorizo y me olvido
que me cobije en la mirada
y de la palabra soy alojado.

-Me busco y no me encuentro
pues en ti... estoy perdido.


Desnuda

Eres simple
pura línea estilizada,
nítida, transparente,
eres delicada.

Eres la noche
con estrellas en el pelo,
lucero y cuerpo celeste,
eres mi universo.

Eres pequeña
cual diminuta simiente
que renace de la tierra.

Eres tierna flor
que se deshoja y se viste
con cuerpo de mujer.


Palabras... palabras...

Detrás de mis palabras
sólo están las tuyas.

Palabras a merced del viento,
se cruzan o se unen
a veces nos confunden,
gritos de la noche
en callada madrugada,
cascada de silencios,
torrentes no escuchados,
ríos colmados de palabras.

Mejores son las que decimos
y peores las que no oímos,
palabras que son hechos,
hechos que son palabras,
nos matan con su ausencia,
su presencia nos vivifica,
nos acompañan en la muerte
y en la vida siempre faltan.

Detrás de tus palabras
siempre están las mías.


En la noche...

-Alcé el vuelo en la negra noche
para encontrarme con la luna
e hicimos el amor sin derroche,
abrazados en su cara oscura.

-Intima complicidad madura
que nos da la luz ausente,
perdida del pudor sin duda
y la ternura echa presente.

-Deseos enlazados al instante
que olvidan la cruel amargura,
con la dulce pasión constante.

-Entrega en penumbra soñada,
para regresar nuevamente
y ver su cara iluminada.


Pensando en ti

Es breve el tiempo
fugaz la caricia
efímero el sueño
temporal la sonrisa
momentáneo el deseo
pasajera la brisa
precario el contacto
insegura la duda
fugitivo el abrazo
provisional la espera.
Eterno el beso.


Sí Supieras...

¿Que más puedo decirte?
Si el eco no trae respuesta
¿Que más puedo escucharte?
Si oigo la callada pregunta
¿Que más puedo llorarte?
Si el ojo no tiene lagrima
¿Y cuanto más puedo amarte?
Si en la ausencia me falta la vida.

El silencio no trae respuesta,
porque el silencio es la soledad
aguardando un día tras otro
sin hora ni fecha fijada,
con el ansia de poder hablar.

Algunos días negros,
algunas palabras frías,
y una senda gris perdida,
me acerca a la puerta final
que no me es posible explicar

Cuando vuelva de la sombra
mientras sienta mi pesar
Y no soporte mas la vida,
percibiré que estas conmigo,
aunque no te pueda besar.

¿Que más puedo pedirte?
Si el viento se lleva la palabra
¿Cómo poder olvidarte?
Si tu recuerdo llena mi alma
¿Qué más yo quisiera abrazarte?
Si no mediara la distancia
¿Y cuanto más quisiera yo amarte?
Si ya no puedo amarte más.


Soñando te soñé

Tome el desnudo sueño
perdiéndome por tu piel
y encontrándome en él
vi dos sueños en uno.

Igualmente imperfectos,
perfectamente iguales,
sueños que son reales
en efectivos ensueños

Y soñando te soñé
con el sueño desnudo
y desnudo en la piel
hasta que fuimos uno.


Tu beso...

Sensatez que llega a mi boca
en la caricia de tu beso,
agridulce pasión loca
que me tiene sorbido el seso.

Besarte desata la locura
del que esta de ti poseso
y endulzas la razón pura
con la sabiduría de tu beso.

Tu beso que me vuelve loco
y trae a mi la cordura
de mi sentido que es bien poco.

Quiero llenarme de prudencia
con todo el saber de tu beso
y que mi locura... sea conciencia.


Luna oculta

Nube que oculta la luna,
reflejo de luz ausente,
pálida linterna oscura,
negra noche presente.

Mirar en la negrura
perdida del horizonte,
solo se halla la sombra
que la bruma esconde.

Otra oscura ausencia
en cruenta y larga noche
que agranda la distancia.

Y que sólo enciende
la luz de la esperanza,
de verla nuevamente.


Ligero equipaje

Un poco de todo
y un mucho de nada
un verso gastado...
una palabra perdida,
un recuerdo olvidado...
la encontrada mirada,
un suspiro al viento...
la luna iluminada,
luz en el sentimiento...
la esperada alborada,
el sabor de un te quiero...
su aroma en mi almohada,
un tiempo robado...
la esperanza hallada,
el dulzor de un beso...
la amarga partida,
un viaje eterno
para ver su cara.

Es equipaje ligero
en esta jornada
pues cargo de todo
y no me llevo nada.


Te Amo...

Es volcán en erupción
que desciende por las laderas,
en candente y rojo corazón
hasta fundirlas por enteras.

Se recrea con las mariposas
que vuelan en la composición,
hasta descubrir las esencias
que inundan toda ilusión.

En asombrosa disposición,
alcanzaremos las estrellas
para vivirlas en la unión.

Y al descender de ellas
encontraremos la pasión,
en dos palabras bellas.


Flor de otoño

Blanca belleza
bañada en la pureza,
vestida de esperanza
de raíz a cabeza.

Cuerpo transparente
en su vestimenta
pues cubre la simiente
que el alma contempla.

Alma de llantos desnuda,
plena de quimera
que desecha la duda
de florecer la primera.

Voluntad que se despoja
con la fresca brisa,
otoño ya sin hoja,
vida sin tener prisa.

Viento tardío y gélido
que deshoja la flor,
deja el tallo retorcido
y en la simiente el amor.

Otoño en la piel,
primavera en el alma...


Acoso...

Te buscaré en el alba
por cada rincón,
en cada alameda
por cualquier callejón.

No te perderé de vista
ni al doblar la esquina,
vayas despacio o deprisa
siguiendo cualquier pista.

No se disipara tu aroma,
que perseguiré tras la brisa,
en el pétalo de las flores,
detrás de cualquier loma.

Caminaré por tu sombra
hasta mas allá de la tarde
y en la noche me guiaré
por el brillo de tu sonrisa.

Te acosaré en la penumbra
y estrecharé la vereda
para que tu caminar,
te lleve siempre a mi vera.

Y no tendrás escapatoria
que no siendo diosa,
estarás en los cielos
cuando vivamos en la gloria.


Nueva Primavera

Viento de otoño
en cálida primavera,
que altera el cuerpo
y perturba el alma.

Llegas inesperado
por la florida ladera,
la flor has acariciado
con la fresca brisa.

Se estremece el pétalo
con tu fría sonrisa,
llegando hasta el tallo
la flojedad que no avisa.

Congelas el riego
que a la flor da vida,
acercando el invierno
en una fugaz caricia.

Desconciertas a la flor
con tu insistencia,
privándola del color
y su perfumada esencia.

Perfume que es disperso
por el soplo de abundancia,
que llena el universo
de olorosa fragancia

Cielo pleno de florecimiento
con la flor de la tierra,
arracada por el viento
para mi nueva primavera.


Entre sábanas

Lienzos sutiles de ilusión
que cubren la sedosa piel,
dándole calor y pasión
a los deseos del alma fiel.

Tejidos que abrigan la belleza
dando forma al deseo del alma,
lecho y reposo de la cabeza
en la muy anhelada calma.

Sudarios de poros entregados
a la placidez del sueño
que en ellos son resguardados
haciéndonos sus dueños.

Paños de blanca esperanza,
traen luz en noche cerrada
y al cuerpo ponen en danza
al clarear la madrugada.

Sábanas de mi deseo
que pueden acariciarte,
dibujan tu bello cuerpo
con solo tocarte...


Tu luz como destino...

Solitario está el camino,
camino hacia mi morada,
morada que es mi destino
donde me espera mi amada.

Es el caminar por la vereda
lento y con mucho desatino,
hasta encontrar la ladera
del crepúsculo matutino.

Salgo de peregrino
con la luz de la alborada
que iluminará mi camino.

Larga e inmensa pradera
con tu luz como destino,
para hallar mi primavera.


La panacea...

Poción para el corazón
sin efectos secundarios
que nos dará la razón
envueltos en sudarios,
De acción sudorosa
en los poros abiertos,
con fragancia a rosa
que curan los cuerpos.
Disminuye la soledad
por su benéfica labor
que da la tranquilidad
al solitario y cruel dolor.
Calma el oscuro llanto
tomado por pareja
de lo cual tiene su encanto
si la dosis no se deja.
Restaura la humedad
en la sequedad del alma,
dándole a esta la bondad
de la ansiada calma.
Puede crear adicción
si se toma en demasía
y si es con moderación,
despierta la fantasía.
No necesita receta
para bien poderla tomar
y la cura será completa
en el momento de amar.


Te deseo

Con la premura que me da el tiempo
que hace de nosotros sólo un suspiro,
dándonos la sensación de estar vivos
cuando tan siquiera hemos nacido.

Encontrar en el oscuro pensamiento
con la tenue luz de cualquier rincón
que nos ilumina el sentimiento.

Ver en la vieja fotografía
la que ya está gastada,
descolorida de tanto mirarla,
tu imagen se une con la mía.

Oír como despiertas al dormido tiempo
con palabras escritas por el corazón
y en tu voz son renovadas al momento.

Escudriñarte a través de la mirada
perdida en el firmamento
buscando la luz de la alborada
que indaga en el consentimiento.

Acariciar los recuerdos rescatados del olvido,
aquellos que un día te hicieron sentir viva
con la inocencia y el calor del primer beso.

Beber la salada y amarga lágrima
que resbala por tu semblante,
hasta saciar mi sed de espera
en el momento de hallarte.
Con toda la esperanza
puesta en el mañana
que ya asoma en lontananza.

Acariciar tu pelo en la brisa
de la fría madrugada
la que nos despierta deprisa
tras una fatigada jornada.

Abrazar tu cansado cuerpo,
que se fundan los huesos
formando un solo esqueleto.

Verte desnuda en amor,
cabalgando por las estrellas,
cubriéndote sólo con el pudor
de unas palabras bellas.

Descubrir el universo
que se esconde en tu boca
con la pasión de un beso.

Tomarte en toda tu esencia,
alma y cuerpo en propiedad,
para saciar la apetencia
de la hambrienta soledad.

En forma, tiempo y lugar
hasta que el alma se muera
de tanto amar.

Te deseo...


Gaviota errante

Vuela gaviota errante,
no la hagas esperar
llévale mi mensaje
mas allá del ancho mar.

Búscala tras la colina,
en el río y la rivera,
o en la campiña florida
que ya es primavera.

La verás en el pétalo de la flor
con la mirada perdida
en el sueño de su amor
que llegará en la madrugada.

Si la ves en el pensamiento
dile que siento gran melancolía,
dale con fervor y al momento
el abrazo que le envío en este día.

Y dile que en ella pienso
en todo tiempo y lugar,
vuela, vuela y no pierdas tiempo
que por mí, la tienes que besar.


Llegaré

Con el rocío
al clarear la alborada.

En el ocaso
de un recuerdo olvidado.

Con la primera
estrella de la tarde.

En el pensamiento
de una larga jornada.

Con la ola
que rompe en la playa.

En el aroma
de la rosa regalada.

Con la brisa
que refresca el rostro.

En la primavera
recientemente encontrada.

Llegaré de la nada
para alojarme en tu todo.


Baila bailarina

Baila, baila bailarina
con tu ritmo celestial
y la danza cristalina
del albor matinal.

Baila, baila con el viento
que llega tras del mar
que en la brisa yo siento
tu incansable danzar.

Baila, baila una vez mas
por encima las estrellas
que la danza que me das,
son las palabras más bellas.

Baila y no dejes de bailar
y que la danza me alcance
pues con ella sabré amar,
mientras tu danza no falte.


Yo más que ayer

Parece que la vida no pasa, pero caen los días, los años, unos detrás de otros y sin darnos cuenta estamos inmersos en la seriedad del tiempo que nos dice que ya somos mayorcitos. ¿Mayores para que?
O es que el tiempo sólo nos viste de cordura y que las locuras no están ya a nuestro alcance, la verdad es que yo no lo veo así, el día de hoy tiene exactamente 24 horas como el de ayer y no le encuentro la diferencia para que tenga que ser distinto, tengamos un día mas, o un día menos acumulado en el cuerpo no es razón para dejar de un lado todo aquello que nos vivifica por segundos, lo que nos da la sensación de que somos dueños del tiempo, lo que nos da la energía para seguir hacia adelante sin importarnos el momento, lo que hace que traspasemos las normas, que para eso fueron creadas.
Así que hoy tenga un día mas o un día menos, haré lo que yo creo que me da el derecho de haberme dedicado antes a las normas, a lo establecido y a los demás sin pensar en mi mismo dejando mis fantasías y sueños postergados para mejores momentos.
Porque ahora soy Yo, hoy más que ayer.


Del verso vasallo

-Lanzaré mis versos al viento
sin importarme donde lleguen
y quien les dé acogimiento.

-Y no me ha de preocupar
la forma en expresarlos
si plasman todo mi pensar.

-No me alarma estén bien escritos
o que cumplan con la moda
de ser tiernos y muy bonitos.

-La crítica no me da espanto
según sea o no constructiva
pues llueve cuando yo canto.

-El que se lean al estar muerto
puede ser o no importante
yo los escribo aquí o en el huerto.

-No pienso en la entonación
ni si esta es un total desatino
yo solo desafino con inspiración.

-El que les diga algo a los demás
me puede gratamente satisfacer
pero el escribirlos es mucho más.

Hoy más ayer, yo me callo
y escribo cualquier verso
que de él, soy su vasallo.


Hoy más que ayer.

Quiero encontrar tu piel
en la fresca madrugada
con el abrazo siempre fiel
de la mujer enamorada.

Deseo perderme en tus senos
llenos de vida y fecundidad
para hallarme en los sueños
que a mi alma dan felicidad.

Aspiro al dulzor de tu boca
que mitiga las amargas horas
de la esperada pasión loca
en el beso que me entregas.

Anhelo traspasar tu mirada
para ver las profundidades
de tu esencia bien guardada
en todas las oportunidades.

Necesito fundirme en tu cuerpo
para sentir que estamos vivos
que de la muerte no es el tiempo
pues vivimos con todos los sentidos.
Hoy más que ayer...


Soplo de vida

Píntame la piel con tus labios
y dale color a mi alma
que es consejo de sabios
para encontrar la calma.

Con la palabra sosegada
escribe poemas sobre mi torso
hasta llegar la madrugada
en que ambos seamos el verso.

Y cuando nos llegue el tiempo
de la esperanza encaminada
con tus manos moldea mi cuerpo
para plasmar el alma querida.

Pinta, escribe, moldea la obra soñada
sin pensar nunca en la despedida
y al final de la extensa jornada
con tu boca, dame el soplo de vida.


Desnudo

Vendré desnudo tal cual nací
con el alma hecha ilusiones,
tan sólo con el amor que te di
y cubierto con tus pasiones.

Arribaré de más allá de la nada
para alojarme en tu todo
que es tu alma enamorada
y nada traeré de mi lodo.

Me presentaré con el viento
para resguardarme en tu abrazo
me vestirás del sentimiento
que eternamente es nuestro lazo.

Llegaré para cubrir mi desnudez
con la urgente necesidad
que me da la penuria y la escasez
de tener la ansiada felicidad.

Mostrándome tal cual soy
abrigarás mis esperanzas
puestas en el amor que te doy
hoy sin mas tardanzas.

Desnudo vendré
para vestirme de ti
y seguro encontraré
el amor que ya te di.


Anoche...

Ayer no vino la luna
la noche fue oscura,
no mecieron mi cuna
me faltó la ternura.

El cielo se oscureció
faltaron las estrellas,
nadie me adormeció
con melodías bellas.

El eco del silencio
fue amo en la penumbra,
mi tez se entristeció
sin la luz que le alumbra.

Oscuros pensamientos
se apoderan del alma
con encantamientos
que rompen la calma.

¿Dónde estas luminaria?
con resplandores pequeños,
tu claridad es necesaria
pues das luz a mis sueños.

Anoche faltó la luna...


El encuentro

Vagando en las ondas
las sombras se mezclan,
en el viento, palabras
y miradas que se cruzan.

Con la noche los saludos,
los versos en la alborada,
la jornada trae suspiros
a la luna iluminada.

Se desatan los sueños
al dormirse la jornada,
sentimientos pequeños
para el alma despertada.

Renace la dormida flor
y con ella su fragancia
que llena la vida de olor
en la inmensa distancia.

Imágenes que trae la brisa,
luz que llega por la ventana
es la regalada sonrisa
al despertar la mañana.

Transcurre la floración,
llegando el fruto esperado
del alma es inspiración
para el espíritu necesitado.

Se estimula la esperanza
con el amor regalado,
la vida llega por lontananza
cuando es retornado.

Los deseos se desatan
y con ello las pasiones,
sentimientos que delatan
a los lejanos corazones.

La distancia es más cruel
cuando separa el amor,
el contacto de la piel
nos calmaría el dolor.

Mi corazón herido
volará hacia el poniente
para hallar al ser querido
que espera impaciente.

Y al llegar la madrugada
en los brazos me posaré
de la mujer enamorada
que yo siempre soñé.

Almas que se buscan
se encuentran los cuerpos
vidas que se unen
por todos los tiempos.


¿Borracho?

Dolores que golpean mi frente,
músculos indecisos,
ojos que se cierran a la luz,
borrachera de los sentidos,
manos torpes para acariciar el viento,
boca reseca carente de sabores,
respiración sin ritmo de tantos suspiros,
corazón fatigado que no renueva la sangre,
piel lánguida empapada en seco sudor,
vuelo desordenado de pensamientos,
escalofrío que recorre las vértebras,
lentitud para recuperar los recuerdos,
total abandono del alma y el cuerpo.

¿Borracho?
Consecuencias, excesos que se pagan
y pasan factura al clarear la mañana,
con una tremenda resaca.

¿Borracho? Pues sí...
Me embriague de ti
y deseo extasiarme nuevamente
para perder el conocimiento
y dormir la borrachera en tus brazos.


No me pidas...

Que venga...
Cuando ya estoy en ti.

Que te acaricie...
Cuando soy tu piel.

Que suspire...
Cuando solo en ti pienso.

Que te bese...
Cuando soy tus labios.

Que te mire...
Cuando solo a ti te veo.

Que te abrace...
Cuando soy tu cuerpo.

Que te quiera...
Cuando por ti me muero.

Que te necesite...
Cuando solo a ti te tengo.

Que te ame...
Cuando sin ti no sé vivir.

Cuando eres lo que más deseo
No me pidas...


Así eres...

Ni cuerda, ni loca,
solo esperanza sonriente.

Ni buena, ni mala,
solo luz del alba naciente.

Ni rubia, ni morena,
solo ternura persistente.

Ni alegre, ni seria,
solo sentimiento consciente.

Ni gorda, ni flaca,
solo deseo de mirada ausente.

Ni alta, ni baja,
solo pasión hecha presente.

Ni fea, ni guapa,
solo mujer perdida entre la gente.

Así eres mujer
cuando nada eres... lo eres todo.


Vuelo a las estrellas...

Adormiladas figuras vagando por la terminal,
espera cruenta y larga que no termina de pasar,
bultos de todas clases, equipajes sin par,
caras somnolientas que no saben dónde van.
.-¡¡Niño, deja la pelota que no se puede jugar¡¡
La espera se hace larga, gentes de aquí para allá,
miles de destinos, unos que van, otros que llegan
y el niño que no deja de enredar.
Ultimas comprobaciones antes de embarcar
.-¿Algo que declarar caballero?...
.-Creo que no, lo que llevo esta permitido en este vuelo.
.-Que tenga buen viaje, tenga la bondad de aguardar...
Nuevamente retorna el sopor a la estancia,
nervios que se desploman, voces inteligibles,
miradas perdidas buscando una respuesta
y el volar de la mosca con su molesta presencia.
¿Cuánto tiempo se perderá al no pensar en nada?
¿Cuánta nada hay en el pensamiento en su vagar?
¿Cuánto se llega a pensar en la larga espera?
¿Cuánta quimera hay en todo pensar?
La abstracción se rompe por la mecánica voz
.-Pasajeros del vuelo 1470 a las estrellas...
sírvanse embarcar por la puerta de la esperanza
y recuerden que no se permiten querellas,
tan solo sueños e ilusiones puestas en lontananza...
Actividad febril que despierta al mas dormido,
sueños y pasajes que cambian los destinos,
ordenado y paciente caminar por el recuerdo,
puerta abierta dejando atrás los olvidos.
Incierto desorden que nos pone en el sitio
expectativa ante lo incierto y desconocido,
fría y seca sonrisa que nos acomoda,
no hay vuelta atrás, emprendemos nuestro destino.
.-Bienvenidos al vuelo de los sueños...
volaremos por encima de las quimeras
hasta alcanzar las más alejadas estrellas
encontrando los abrazos que somos dueños...

“De sueño en sueño, sueño que no es sueño”.
Y soñando... despierto en que soy tu dueño,
dueño de un sueño que en ti me despierto
del dormido, esperanzado y eterno sueño.


Tu... mi inspiración

El tiempo mengua
mengua la distancia
la distancia vuela
vuela en la esperanza.

La esperanza descansa
descansa en los sueños
los sueños que despiertan
despiertan con el alba.

Con el alba llega la luz
la luz de tu mirada
mirada profunda
profunda es tu alma.

Alma de mi existencia
existencia que renace
renace en tus brazos
brazos que he soñado.

Soñado con el deseo
deseo que me acercan
acercan tu inspiración
inspiración que en ti poseo.


Dos en uno

-Miradas que se encuentran
deseos y ansiedad,
palabras que se cortan
soñada felicidad.

-Suspiros que se cruzan
no importa el lugar,
brazos que se buscan
cansados de esperar.

-Corazones que se unen
en un solo palpitar,
almas que se funden
con la luz al clarear.

-Sueños que empiezan
en la noche a despertar,
bocas que se besan
para poderse expresar.

-Cuerpos que se atraen
sin poderlo controlar,
seres que se descubren
en la pasión de amar.


Me tienes...

-Me gustas cuando despiertas
con la mirada perdida
buscando la ducha a tientas
que te estimule a la vida.

-Me agradas recién duchada
con tu cara deprisa
la piel de nuevo inmaculada
y la renovada sonrisa.

-Me encantas con el primer café
que da energía y movimiento
pues te renueva la fe
y aviva el sentimiento.

-Me hechizas cuando te vistes
sin saber que ponerte
y haces de ello chistes
solo por complacerme.

-Me fascinas al estar lista
y preguntas cuál niña
¿Paso bien la revista?
¿O ya tenemos una riña?

-Me hipnotizas con un beso
que me lleva al universo
.-Cariño he ganado peso
y no escribas de ello un verso.

-Me seduces con tu abrazo
que me deja pensativo
.-Amor, me voy al trabajo..
al volver, ten listo el aperitivo.

-Me absorbes los pensamientos
con tus lindas palabras
.-Cielo ten listos los condimentos
y las cacerolas fregadas.

- Me rematas bien coqueta
al despedirte en la puerta
.-Rey mío me tienes tan contenta...
!Ojo¡ No se te olvide la moqueta.

-Y de este corto cuento
saco la siguiente moraleja,
en mi casa mando yo...
cuando mi mujer me deja.


Quince...

Quince sonrisas...
no secaran mis llantos.
Quince paseos...
no acortaran mi caminata.
Quince canas...
no nos harán mas viejos.
Quince arrugas...
no desangran mi corazón.
Quince miradas...
no me dirán todo de ti.
Quince palabras...
no es una larga conversación.
Quince poemas...
no llenan mi alma entera.
Quince suspiros...
no detienen mi huracán.
Quince noches...
no compensan de la larga espera.
Quince tardes...
no consuelan tus sufrimientos.
Quince madrugadas...
no palian todos los nervios.
Quince días...
no borraran todos mis sueños.
Quince abrazos...
no mataran mi soledad.
Quince besos...
no calmaran mis suspiros.
Quince momentos de pasión...
no sacian mis deseos.
Quince días de tu vida es solo un aperitivo
no me conformo con tan poca cosa
deseo que me des quince vidas.

Y cuando estas agonicen por su propia esencia,
necesito quince eternidades en tu presencia.


Encuentro…

Encuentro tu recuerdo
perdido en mi olvido
y olvido que me he perdido
en el recuerdo de tu encuentro.

Recuerdo tu primera sonrisa
perdida entre la gente,
me olvido del tiempo pasado
al encontrarme a ti abrazado.

Abrazo que me ha recordado
que en el tiempo estaba perdido,
saliendo ya de mi olvido
cuando te he encontrado.

Encuentro olvidado,
en el tiempo perdido
que ha sido hallado
cuando te he recordado.


No sé por qué.

La vida es tan injusta
con el que halla la felicidad,
y separa nuestras orillas
con el mar en su inmensidad.

No sé por qué.
Tu calor esta ausente
al despertar la alborada
y el sueño se torna agreste
al cobijarse en mi almohada.

No sé por qué.
La sonrisa se apaga
al mediar la distancia
y la cruel pena
nos llena en su constancia.

No sé por qué.
Se apacigua la condena
trayéndonos el olvido
recordándonos todo
y lo poco que hemos vivido.

No sé por qué.
No, ciertamente que no lo sé,
pero no es ese mi destino
y me revelo contra él
por hallar de nuevo tu camino.

Y esto si sé porqué...


Quisiera

Quisiera mostrarte la Luna y el sol amándose
en lecho de rosas al amparo de las estrellas
o a la diminuta flor resurgir entre la nieve
de la cordillera en una fría y gélida mañana.

Quisiera llevarte de la mano por la reseca campiña
para que la empaparas con el sudor de la esperanza
y que alzaras el vuelo por encima de las nubes
para que vieras la luz que alimenta la tierra.

Quisiera esperar tu llegada con la tibia alborada
tras una noche cruenta y excesivamente larga
para iluminar la oscura y obstruida ventana
que por tiempo ha permanecido apagada.

Quisiera colmarte de frescas y fragantes rosas
para relajar y aromatizar tu cansado cuerpo
y que en el ansiado sueño despertaras
en lo que has esperado por tiempo

Quisiera y siempre quisiera...
mas son sólo sueños de poeta
hombre sencillo y corriente
que por atreverse a soñar...
A ti te quisiera.


Vuela gaviota

Vuela, vuela gaviota
mas allá del ancho mar,
vuela presurosa y vuela alto
que tu nido has de encontrar.

La mirada siempre al frente
para los vientos surcar
que están rotas las cadenas
y nadie te impide volar.

Si miras hacia atrás
veras que fuiste presa
por tu propia voluntad.

Y al ser dueña del viento,
vuela... vuela gaviota
en pos de la libertad.


Niebla en la plaza

Solitario deambular del poeta,
densa niebla y espesas dudas,
la luna llora en su amargura
al dulce sol que no la alumbra.

Pasos cansinos perdidos en la noche,
crujir de la hojarasca que todo lo inunda,
otoño cruel que matas la esperanza
de una cálida flor en la alborada.

Poeta que no avanza al caminar,
tiempo y horas que no trascurren,
monótona, lánguida y gélida brisa,
la fina lluvia le golpea el alma.

Humedad que empapa de las entrañas,
resecas palabras en papel mojado,
versos y poeta por siempre fijados
en la cerrada niebla de esta plaza.


Me sobra y me falta...

Me falta el aire de tu pelo.
el agua de tus labios,
el fuego de tu cuerpo.
Me falta la vida...
Tengo fuego en las entrañas,
agua en la mirada
y el aire en la sangre.
Me sobra la muerte...


Vagabundo...

Vagabundo fui a parar en tus versos,
ardientes, fecundos como deseados senos,
me adueñe de ellos en un abrazo
hasta fundirme en todo tu cuerpo.

Versos que acarician mi frente cansada
y al alma la golpean hasta extenuarla
para que despierte del silencio
a que a sido condenada.

Transmites vida, esperanza, el callado deseo,
la palabra justa que llega al entendimiento
que rompe la negra y tenebrosa noche
con la luz que nos regala el alba.

Llegan sin prisas, pausadamente,
como el fértil vuelo a las estrellas
de dos entes en lecho de poemas y rosas,
negándose luego a bajar de ellas.

Mimas la estrofa haciéndola un todo
con inseparables besos nos regalas
pensamientos, dudas, enseñanzas
que nos hacen resurgir del lodo.

Así pues volveré a fundirme en tu cuerpo,
con el apasionado y ardiente abrazo
que me mostrara todos tus versos
para no seguir vagando por mis letras.


Canto por no llorar...

Canto por no llorar
que si lloro, no puedo cantar.

Cantare a la luz
reflejada en tu pelo,
la de tus ojos
hace tiempo que no la veo.

Cantare por no llorar
que si no canto me muero.

Le cantare a la flor
que me recuerda tu aroma,
el calor de tu piel
se escondió en la memoria.

Canto por no llorar
que si lloro, no puedo cantar.

Cantare a la brisa
que al alba me acaricia,
el sabor de tu boca
se lo llevo la ventisca.

Cantare por no llorar
que si no canto me muero.

Y cantare a tu recuerdo
para que no se lo lleve el viento
que cantando y llorando,
no despertare del sueño.

Canto por no llorar
que si lloro, no puedo cantar
y si no canto de pena me muero.


Colgado de tu amor

Me parece que no sé dónde estoy,
me quede colgado del tiempo,
el espacio, en un sueño, un lugar
y un atardecer asomados al balcón.

En una playa que no llegue a visitar,
con un ángel blanco en la vereda,
unas flores de primavera
y el corto abrazo que te di

En un café recién echo,
el pescado requemado,
la fiesta en la Solana
y el beso en el automóvil.

En la nieve de la cordillera,
la sombra de aquel árbol,
en un paseo por la carretera
y despertar a media mañana.

En caminar de la mano,
perdernos en la autopista,
esperar el turno del aseo
y en tu sonrisa al llegar.

En visitar el supermercado,
nuestra primera mirada,
en la visita a tu mama
y las sabanas estrenadas.

En él perdernos entre la gente,
aquel apartado hotel,
las largas caminatas
y sentarte en mis rodillas.

En el viaje a las estrellas,
el merecido descanso,
en tomarte de los brazos
y calentar nuestros cuerpos.

En visitar la cascada,
la merienda en el jardín,
el encuentro de nuestras pieles
y el beso en la alborada

En la triste despedida,
la comida familiar,
unas flores al llegar
y el pasear de tu cintura.

En el beso al ir a trabajar,
el besar tus ojos,
la mesa recién puesta
y él abrazarnos desnudos.

En los susurros a media voz,
el vuelo del cóndor,
él desearnos vestidos
y en regalarte una flor

En las caras repetidas,
el intenso trafico,
en paladear tu boca
y el deshacer la cama.

En quedarnos en casa,
él reírte de mis tonteras,
en arreglar el computador
y el acariciar tus caderas.

En ordenar la vivienda,
el pensar en ti si estas fuera,
en el chocolate de la nevera
y en acunarte al dormir.

En el sueño realizado,
en la apuesta perdida,
la encontrada esperanza
y la primera siesta.

En planes para el mañana,
en un poema inconcluso,
el niño que nos atropella
y en el atrapar los sueños.

En que no hicimos la cama,
en engañar a la doncella,
la tranquila conversación
y el suspiro compartido.

En el vino vertido,
en buscar un regalo,
el mirar las fotografías
y el visitar la nueva morada

En contratar a los pintores,
la complicidad compartida,
en desnudar nuestras almas
y el hacer el amor al alba.

Recuerdos desordenados
alojados en mi corazón
que me han dado toda la razón
para quedarme colgado de tu amor.


Golondrina errante

Duele recién mañana
sentir la brisa fresquita,
mas me duele con el rocío
no besar tu boquita.

Volaste con el viento
a buscar la primavera,
con simientes frescas
en otra apartada era.

Con el volar del tiempo,
los granos encontraras
y en el crudo invierno
mira lo que dejaste atrás.

Golondrina errante
que hallaste otros calores,
dejaste tu nido
que siempre a de esperarte.


La poesía es hambre

Hambre de apetitos contenidos,
los que están a flor de piel
y en deseos lanzados al viento,
con los ojos en humedades.

Hambre de necesidades
y soledades en la noche,
afán de encontrar un mañana
cuando el hoy está perdido.

Hambre que el cuerpo no sacia
con la llegada de otro cuerpo,
que se alimenta de sueños,
el amor eterno, la esperanza.

Hambre que provoca llantos
con la palabra olvidada
y estremece los recuerdos
alojados en el alma.

Pasa hambre el poeta
al soñar en su musa
y más pasa el hombre...
al no ser ella una diosa.


No llores...

No llores hermosa Luna
porque las nubes oculten al Sol
que de ti no se ha olvidado
y esta llorando porque no te vio.

No llores hermosa Luna
porque no tengas su reflejo
que él esta llamando a los vientos
para limpiar el firmamento.

No llores hermosa Luna
que el cielo ya lo despejo
y la luz de tu amado
te llegara con todo su calor.

No llores hermosa Luna...


Pensar, soñar, volar

Pensar, soñar, volar
y retornar a las estrellas
para de nuevo poderte amar.

Miraré a la luna en su reflejo
con ella he de encontrar
tu amor en el mismo espejo...
el que un día me hizo soñar.

Bajaré de las alturas
para recoger mi corazón,
el que quedó olvidado
en el mejor sitio de tu hogar.

Te haré el amor en sueños
que no te quiero despertar
y al alba te posare una flor,
sin espinas, para no sangrar.

Al cielo he de volver
con mi melancólico cantar
que podrás escucharlo
sobre las olas del mar.

Pensar, soñar, volar
y retornar a las estrellas
para de nuevo poderte amar.


Que importa...

No creas que te voy abandonar,
cuando te acabo de encontrar.

Que más me da si no me abrazas,
si tengo tu calor entre mis brazos.

Puede que encuentre otros amores
pero nadie me dio tus ilusiones.

Y crees que sea vital el que me beses,
si tengo por siempre tu sabor en mi boca.

Pensaras que estoy loco con razón,
mas sólo tu me robaste el corazón.

No voy a llorar si de mi te olvidas,
me alegraré porque estas en mi recuerdo.

Que me puede importar si me amas o no...
lo importante es que te amo yo.


Sábanas blancas

Sábanas de fino lino
reposan sobre tu cama,
adornadas de la primavera
que trajo a nuestras canas.

Puras, limpias, inmaculadas
que dan resplandor en la noche
a los sueños que son impregnadas
y cobijo hasta despuntar el alba.

Delicadas, suaves y livianas
que reflejan la belleza
y retienen los deseos
de quienes son usadas.

Etéreas, frágiles, ligeras
como las pasiones
que en ellas son liberadas
al terminar la jornada.

Sábanas blancas
entretejidas de esperanza,
en ellas recibí tu cuerpo
y te entregué el alma.


A ti mujer

A ti rosa hermosa
que regalas tu perfume
y estremeces el alma
haciendo que ésta despierte.

A ti hermosa flor
que regalas primavera,
a esta caduca piel
haciéndola imperecedera.

A ti flor de mujer
que regalas sueños
a quien en su ocaso
dejó de ser un niño.

A ti mujer hermosa
que regalas la vida
con la fe y la esperanza,
a quien la tenía perdida.


Nocturno

Ave nocturna,
señora de la noche
que atrapas los sueños
allá donde se esconden.

Extiende tus alas
majestuosa águila
y no dejes que escapen
los que yo pueda soñar.

Vístelos de largas plumas
para que puedan remontarse,
camino a las estrellas
y tu nido encontrar.

Que siendo dos en la noche,
como uno hemos de volar
y haremos nuestros los sueños
de cualquier poeta mortal.


Una flor...

Es de extrema delgadez
la flor que a mí me inspira,
frágil como la gota de rocío
y el tibio sol del atardecer.

De colores pálidos al alba
acentuados por remolinos de trigo
dorados al sol del medio día
y el claroscuro del fin de jornada.

Es de aromas tenues y frescos
que se alojan en las entrañas
perfumando el pensamiento
y trastornado los sentidos.

De esbelto tallo y sin espinas
para que pueda ser tomada
sin temores de que te hiera
o que te desangre el alma.

Es la eterna primavera
que del poeta se adueña,
no le seca la esperanza
pues es sólo una quimera...


Este no

Me puedes robar tus besos,
tus abrazos me pueden faltar
puedes frenar mis deseos,
o que tus ojos me vuelvan a mirar
podrás matar mi esperanza
y tu amor me lo puedes vedar.

Pero el amor que yo te doy
este...
este no me lo puedes quitar.


12 Campanadas...

Fue tan larga la espera
que no la puedo precisar,
segundos, horas, años...
las campanadas del reloj
una tras otra no dejaban de sonar.

Sonrisas, jolgorio,
cantos desafinados,
algún amigo se acerco a saludar,
pero la sonrisa que uno espera,
esa no terminó de llegar.

Si que llegó la nueva jornada,
pletorita de deseos para algunos,
aunque a mí me pareció igual,
si negra era la noche
negro es el amanecer
cuando por el horizonte
la luz no termina de aparecer.

Una tras otra
y detrás de la otra, la una,
una copa tristemente vacía
sedienta de la alegría.

¿Dónde quedo la esperanza
que hoy no llamo a mi puerta?
¿Que se hizo de la complicidad
que alimento mis sueños?
¿Porque ya no sopla la brisa
que me trae tu aroma?
¿Que fue de las olas
que bañaban las costas de mi locura?

¿Dónde esta el deseo
que esculpía nuestras pieles maduras?
¿Que fue de las mariposas
que jugaban en nuestro entorno?
¿Porque los versos
no se empapan de la tierna dulzura?
¿Dónde fueron a parar los abrazos
lanzados al viento?
¿Que fue de los paseos
por las lejanas estrellas?
¿Porque desaparecieron
las sábanas de nuestros sudores?
¿Que se hizo de los proyectos
que nutrían nuestra vida?

Preguntas que una a una
con las campanas voy tomando
y el tiempo las responderá
según los ecos se vayan acabando.

Fuero doce campanadas,
doce sorbos de expiración,
mas con sólo once
ya quedé embriagado de muerte.

El trago del olvido...
lo reservare...
para cuando haya fallecido.


No quiero...

No anhelo cortos suspiros,
si cuando me faltas, yo no respiro.

No aspiro a una mirada,
cuando la luz de mi existencia eres tu.

No persigo la caricia de la brisa,
si sólo me llena tu intenso viento.

No quiero que beses mis versos,
si mis sedientos labios esperan los tuyos.

No deseo los abrazos al viento,
cuando mi piel sólo espera tu calor.

No pretendo solo un recuerdo,
sí tú eres mi eterno pensamiento.

Yo no quiero que me quieras,
sólo ámame...


Me siento raro,

Con sueño y soñando,
recordando los olvidos
para no olvidar los recuerdos.

Escribiendo versos
al versar tus escritos,
y besando al viento
para buscar tus labios,

Mirando tus ojos
para encontrar los míos,
y cantando por no llorar
cuando lloro en mi canto.

Intentando volar
con las alas rotas
y mirando a la luna
con el cielo encapotado.

Embriagándome de ti
cuando ya estoy borracho
y buscando la mañana
en la tarde de mi ocaso.

Persiguiendo a la primavera
con la nieve en la cintura
y abrazando al árbol seco
que me dio fruta madura.

Paseándome por la vereda
sin tus manos en las mías
y buscando la almohada
que ya no esta en mi cama.

Con sueño y soñando...
me siento raro.


Jardinera...

Jardinera de mis versos
que se pasea entre rosas,
haces de las palabras toscas
un manantial de deseos.

Abonas los poemas
con bálsamos mágicos
que curan los llantos
de las tristes penas.

Das riego de esperanzas
a los versos ya secos,
con el agua que regalas.

Dame de beber de tus besos
y libérame de las condenas,
jardinera de mis versos...


Destellos de luz...

Destellos de luz regalan tus ojos
que muestran el alma inmortal,
colmada de amor, pasión y deseos
en forma de divino ser carnal.

Destellos de luz están en tus labios,
néctar que sana el cruento mal
de las esperanzas sin dueños
que vagan por la noche temporal.

Destellos de luz adornan tus senos,
fachada del universo intemporal
de todos los sueños eternos.

En la unión de seres encontrados
que converge la razón celestial.
Destellos de luz... arrojan los cuerpos.


Mendigo de amor

Apoyado en cualquier esquina
la cara gacha, la mano extendida,
privado el rostro de la luz
que no a mucho fue su vida.

Desaliñado el corazón,
ojos nublados, la mano extendida
llantos que le ahogan el alma
y le queman las entrañas.

Andrajoso en su soñar,
secos labios, la mano extendida,
viento que azota el rostro
sin los besos de la brisa.

Derrotado en la esperanza,
folio manchado, la mano extendida
sangre en el pensamiento
que le mata cualquier verso.

Cuerpo de vida ya ausente,
poeta de la mano extendida
apoyado en esta esquina
mendigando lo que es su vida.


Cuando la vida pase...

Cuando nuestros cuerpos
busquen el tibio sol de la mañana,
tomaré tu mano para sentir la energía.

Cuando el tiempo
ya carezca de sentido
te cogeré de la cintura
para seguir paseando.

Cuando se seque la flor que te regale,
quiero sentir su aroma
en el viejo libro que atesoras.

Cuando nuestros ojos estén cansados
y apenas nos veamos
acariciaré tu cara
para palpar la belleza.

Cuando dejemos de ser niños
quiero que juguemos
con nuestros nietos en el salón

Cuando nuestras pieles
estén envejecidas por los años,
te besaré en la boca
para saborear el joven amor.

Cuando nos olvidemos de quienes somos,
te recordaré no como fuiste,
si no como eres.

Cuando apenas
tengamos de que hablar,
miraré tus ojos
para continuar dialogando.

Cuando nuestras carnes
y pasiones se enfríen,
te abrazaré para darnos calor.

Cuando a mi pluma
se le evapore la tinta,
la empaparé con mi sangre
para escribirte “Te amo”.

Y cuando la vida se nos escape...
descansaremos los dos.


Desnúdate…

Desnúdate amor
como tu sabes hacerlo,
que deseo tu cuerpo maduro
al amparo de un beso.

El beso tierno y dulce
en el abrazo eterno
y el eterno suspiro
que le robaré al viento.

Y no he de robar
lo que sé que me pertenece
pero mi alma se emociona
si el viento tu pelo mece.

Besos cruzan el tiempo,
con la brisa marinera
y sanan cruel lamento
cuando llegan a mi vera.

Eres la flor más hermosa
que al abrazarla florece,
te entregas sin espinas
cuando mi vida amanece.

Quiero al rayar el alba
en ti de mi sueño despertar
y tu puedes hacerlo...
sólo desnúdate amor.


Sólo abrázame...

Abrázame como sólo tu sabes hacerlo
muestra tu alma, dame a beber de tu mirada,
tus ojos de deseo y sentimiento están llenos
y no desesperes, sólo abrázame.

Abrázame que yo siempre espero,
se acorta el tiempo y este ya no importa,
espero por ti y por mí, porque te deseo,
pues soy tuyo, sólo abrázame.

Abrázame como tú lo sientas,
olvida los miedos y ve despacio
que te cubriré de los fríos vientos
con mi cuerpo, sólo abrázame.

Abrázame, como hace tiempo lo hice
entregándote la razón de todo mi sentimiento
que por amor, la vida a tus pies he puesto
para poder amarte, sólo abrázame.


¿Han visto algo más hermoso?

Sin rimel en los ojos,
patas de gallo muy marcadas,
con ojeras por no dormir,
el pelo alborotado,
o con rulos
para intentar estar peinada.

Los labios resecos,
sin carmín
que le dibujen su cara,
la epidermis agrietada,
pasos cansados
que se pierden en la alborada.

Piel marcada por el tiempo
que la hace más deseada,
bella y hermosamente desnuda
al despuntar la mañana...
¿Han visto algo más hermoso
que el cuerpo de la amada?


Déjame...

Déjame amarte, sólo amarte
mientras dure la esperanza,
y que la noche sea nuestra aliada
en esta playa de aguas mansas.

Déjame soñarte, sólo soñarte
hasta que despunte el alba
y la brisa nos envuelva
en la mañana del ocaso.

Déjame desearte, sólo desearte
entre tanto no se apague la vida
y que el viento de la cordillera
me traiga tu fresca sonrisa.

Déjame abrazarte, sólo abrazarte
virtualmente en toda jornada
y que la gaviota se pose
en aquella escondida cala.

Déjame besarte, sólo besarte
tras la entreabierta ventana
y que la luz ilumine el alma
que a ti te ha sido regalada.

Déjame, tan sólo déjame...


Ven y dame la mano

Ven y dame la mano
que iremos a pasear.

No por lugares lejanos
que nos hagan soñar,
si no por la plaza del lugar.

Veremos a la gente que se afana
para llegar a ningún sitio
pues no saben dónde van.

Veremos a los palomos enamorados
que no les importa el lugar
mientras les echen migas de pan.

Veremos al perro que mueve la cola
mientras ve la gente pasar
por si alguien lo acaricia en su deambular.

Veremos al comerciante avispado
y con la sonrisa en los labios
esperando que le vengan a tratar.

Veremos al niño
con su juguete nuevo
y al que no tiene con que jugar.

Veremos a la flor engalanada
que por unas monedas
te da un segundo de amor.

Veremos al solitario poeta
que no sabe dónde está
pues nunca a dejado de soñar.

Y veremos a la niña llorar
pues su poeta hoy,
un verso no le pudo regalar.

Ven...
ven y dame la mano
que sólo iremos a pasear...


El muro...

Soy hombre del norte,
frío, seco, sin alma,
bajo de la cordillera
tan sólo por acariciarte.

Acariciar tu cálida luz
que llega a iluminarme
lejana estrella del sur
hija de la misma noche.

Noche cerrada en los ojos
cansados de tanto mirarte
sin verte estrella lejana
falta tu luz para aliviarme.

Miro al cielo impaciente
de verte tan inquebrantable
se estrellan sobre pared firme
mis sueños para besarte.

¿Quién demolerá este muro?
que llega a ocultarte.
¿Quién lo derribará?
para que pueda abrazarte.

Millones de versos gritan
mis esperanzas al viento,
millones de besos golpean
el inalterable muro.

Lanzo al aire mi último verso
con la fuerza de mi sangre
para derribar el muro
que me permita amarte.


Nené...

Tomaré el polvo de la tierra
del que ya no pisa nadie,
por lo reseco y agrietado
del caluroso e implacable sol
y lo empaparé con mi sangre
para darle suavidad moldeable,
sin impurezas, sin aire,
hasta que por la mano resbale.

Le quitaré lo que sobre,
las dudas y los oscuros temores,
el llanto, el hambre de espera,
el miedo y las sutiles ansiedades,
poniendo en su lugar los sueños,
la ilusión en un nuevo día,
la fe, la amistad, el amor, la vida
y un suave toque de alegría.

Lo amasaré sin prisas
con voluntad inquebrantable,
con caricias y mimos,
con la fuerza de las manos
para darle consistencia
y no permitiré que se seque
aunque pierda toda mi sangre
y la vida se me escape.

Cuando sea masa compacta,
cerraré cualquier ideología
y posare mi mano desnuda
para recorrer toda su planta,
tomándola sin reparos,
ni en el tiempo premura
y conocer de que materia
saldrá la esencia que perdura.

Moldearé el barro con paciencia
dando volumen según convenga,
formas torneadas como sustento
caderas y tronco que aguante la vida,
manantiales de alimento como senos,
brazos prestos para el abrazo,
manos abiertas sin reparos
y rostro de diosa en cuerpo de mujer.

Cuando ya tome su forma
eternamente definitiva,
este pulido y abrillantado,
lo vestiré de finos lienzos
de esperanza y de pasión,
uniré mi boca a la suya
dándole vida con un beso
y la llamaré... Nené...


¿La vida?

La vida es esperanza
al despuntar la alborada,
es ilusiones en lontananza
que nos llegan cada mañana.

Es el abrazo del alma
en nuestra morada,
es alegría o tristeza
que nos depara la jornada.

Es soledad en la noche callada
el despertar de los sueños
al amparo de nuestra almohada.

Son los recuerdos bellos
del alma enamorada
que nos hace de la vida dueños.


Doce meses, doce rosas

Verso a verso me llegaron tus besos,
Verso a beso se complace el deseo,
beso a beso los plasme en versos,

Traes luz de esperanza
en invisible esencia
con un beso en lontananza.

Soy sueño renovado
que sana el cruento dolor
con tu beso regalado.

Eres mujer compañera,
compañera de poeta
y poeta compañera.

Soy fuego en el alma,
deseo en las entrañas,
la ambicionada calma.

Eres bálsamo para mi piel,
energía regalada sin condición,
tranquilidad en jornada cruel,

Soy efluvios desprendidos,
vapores sofocados,
de poros encendidos

Eres tierna flor
que se deshoja y se viste
con cuerpo de mujer.

En verso de amor viajero
se dicen el primer te quiero
y sólo por ti yo muero.

Doce meses, doce rosas,
dos solitarios corazones
que buscan sus bocas.


En el viento...

Dime desde el otro lado
con susurros en el viento
que de mi no te has olvidado
y que estoy en tu pensamiento.

Yo por ti amor siento
y siempre te he recordado,
aun sumido en el lamento
por tenerme de ti apartado.

Dime lo que tienes guardado
dentro de tu hondo sentimiento
que por tiempo me es vedado.

Yo espero en sufrimiento
el amor por ti atesorado
y que hoy no me trajo el viento.


Siete años...

Siete años ya han pasado,
tan eternos, tan largos
que ni cuenta nos hemos dado,
siendo años desperdiciados.

Han cambiado dos gobiernos,
los hijos ya se han casado,
muchas veces soplaron los vientos
y nuestro árbol se ha secado.

Nuestros padres fallecieron,
miles de flores hemos recolectado
que ellas solas se marchitaron
y ya solos nos henos quedado.

Los días de los sueños se alimentaron,
lento el transcurrir del tiempo
que nuestras sienes ha blanqueado
y las bocas no se besaron

Se borró nuestra sonrisa,
las pieles se agrietaron,
el deseo voló con la brisa
y los cuerpos no se amaron.

Solo queda esperar a la muerte
que es la que nos ha reunido,
tan sólo para volver a verte
y darte el beso que no te he dado.


Adiós amor...

Soñando espero a la muerte
a primera hora del alba,
que llegará al no verte
con tu luz en mi ventana.

Negra noche en el ocaso
que de todo se apodera,
te llevas la luz de un sueño
en mi caduca primavera.

Mariposas asesinas
que me devoran el alma,
traen la muerte sin prisas
en la turbulenta calma.

Adiós dulce amor...
te fuiste como llegaste,
dejándome en el dolor
que al llegar encontraste.


Sólo tu...

Quien tu miel ha saboreado,
el azúcar le sabe amargo
es de sabor muy distinto
y no humedece los labios.

Al que ve tu perfil en la luna
en el océano se le refleja,
encontrara otras estrellas
pero tu luz en el mar prevalece.

A quien habló con tus ojos
la palabra se le queda muda
y ningún sonido pronuncia
delante de otros rostros.

Mas el que en ti se hizo uno
de otras fragancias huye,
pues no siendo tu aroma
la esencia pierde su perfume

Solo tu fuiste tierna flor
para un caduco jardinero
que te regó con su amor
al ser único y postrero.


En el ocaso...

Hoy caminé por el ocaso
cuando el sol no alumbra,
sólo por sentir tu reflejo
sobre mi tez desnuda.

Gotas de llanto amargo
me humedecen la piel,
la noche está llorando
por que no te pude ver.

Negro y frío nubarrón
que de mí te está ocultando,
mostrándome la nada
que en la noche estoy hallando.

Grito al viento tu nombre
con ecos desesperados
y el silencio sólo responde
con lamentos callados.

Se quebranta la noche
y llora la triste luna
empapando mi alma
de ingrata amargura.

Silencio y amargo llanto
que llena la oscuridad,
nada se refleja en mi cara
al caminar por el ocaso.


Algún día..

Cuando mis ojos
apenas si puedan aguantar
la luz del tórrido sol,
seguiré viendo tu reflejo
en la cara oculta de la luna.

Algún día...

En que mis cansados pies
puedan apenas sostenerme,
tomare tu firme mano
para pasear por la vereda.

Algún día...

Cuando mis pensamientos
se pierdan en las tinieblas
y no recuerde apenas quien soy,
sentiré tu mano en mi hombro
para saber que todavía estoy.

Algún día...

En que las pasiones
hayan volado con el viento
y apenas sean un puro recuerdo,
deseare tus dulces labios
que me darán palabras de aliento.

Algún día...

Cuando se apodere de mí
el crudo y frió invierno
y apenas sea una hoja marchita,
mirare a tus lindos ojos
para sentir la cálida primavera.

Algún día...

En que de nosotros
apenas ya no quede ni el recuerdo,
rescatare del polvo y del tiempo
tus entrañables versos.

Algún día...

Cuando la esperanza ya este muerta
y apenas sea un puñado de polvo,
resurgiré en forma de rosa
para ponerla en tu boca
en un cálido y tierno beso.

Algún día...


Buenos días...

Buenos días mi señora,
perdone la intromisión
por entrar en su morada
sin justificada razón.

No, nada quiero venderle
pues mi verso no tiene precio
y no es porque valga mucho,
es que todavía no lo sé.

Sólo vengo a comprar
un poco de inspiración
para estas letras torcidas
que necesitan composición.

Podrá usted llamarlo poesía,
pero sólo son pensamientos
que los escribo día a día
y los lanzo a los cuatro vientos.

Sin duda se preguntará
por qué comprar quiero,
el pensamiento que llenará
la tinta de mi tintero.

Es bien claro y sencillo
cuando uno da lo que tiene,
se queda sin escritillo
y la idea se adormece.

Por eso de usted preciso
abusando de su paciencia
que hagamos un inciso
para llenar mi complacencia.

Le compraré un sueño,
una tenue esperanza,
aquello que no tiene dueño,
o lo que está en lontananza.

Me dirá y con mucha razón
que son cosas que atesora
guardadas en su corazón
hasta que llegue la aurora.

Pero usted no tema
que será bien pagada,
le abriré mi ventana
y pondré luz es su mirada.

Le mostraré el infinito
llevándole a las estrellas
y algún poema chiquito
con las palabras más bellas.

Pondré en su corazón el calor
para soportar el frío intenso
el que nos deja el dolor
de un amor inconcluso.

Le daré la evidencia
de que es muy amada,
con mi corazón cada día
puesto en su almohada.

Me dirá que es muy poco
pero es cuanto tengo
y si a sus pies lo pongo
con ello ya me ilumino.

Con la luz que recibiré
me considerare agraciado
y el poema le regalaré
cuando ya este terminado.

No hay mas desgracia
en la vida del poeta
que hacer versos a medias
y la poesía incompleta.


No hay...

No hay quien más te quiera
como este corazón loco
que te busca por la tierra
para unirnos en el cielo.

No sabe de realidades
ni atiende a la razón,
el que tu no le ames
no le quita la ilusión.

Hace oídos sordos
a todas tus palabras,
sólo habla con tus ojos
si se unen las miradas.

Y no le importa
si es escuchado
pero se reconforta
cuando sólo a ti té a amado.

No hay amor mas profundo
como el que yo te doy
sólo vivo para quererte
y saber que en ti yo soy.


En Santiago...

Pasearé por sus avenidas
para encontrarme en los recuerdos
de los fatigados días de alegrías.

Me detendré a coger tu mano
para por el centro pasear
y ser él más feliz de los humanos.

Veremos la gente presurosa,
un ángel blanco volar
que traerá la hermosa primavera.

Compartiremos golosinas,
nos miraremos a los ojos
y soltaremos unas sonrisas.

Oiremos a la banda tocar,
contemplaremos el Cóndor
que nos viene a saludar.

Y cuando ya llegue el ocaso
cogidos de la cintura nos diremos...
.-Eres todo cuanto yo he amado.


Versos viajeros...

Partirán mil versos al clarear
que llenaran toda tu estancia
y cuando te vengas a despertar
te dirán que no hay distancia.

Serán letras surcando el mar
que arribaran hasta tu orilla
y con el día al germinar
te darán un beso en la mejilla.

Saldrán del puro sentimiento
del hombre que te supo amar
mas no le cabe en el pensamiento
te pueda por siempre olvidar.

Surgirán de los recuerdos
del amor por ti regalado
que los tiene bien atesorados
en el corazón que has llenado.

Brotarán como hermosas flores
al llegar la florida primavera
para perfumar de las mujeres
a la que es única y postrera.

Mil versos partirán
aunque este ya en el ocaso
y seguro te besarán
sólo porque tu me has amado.


Evocaciones...

Pasan y pasan los días,
en angustiosa melancolía
caen las hojas del calendario
y no retornan las alegrías.

Se adueñan del alma mía
las crueles tristezas a diario
sólo con la leve fortaleza
de un tiempo en ti evocado.

Recuerdos situados
en lo recóndito del corazón
que al ser aflorados
reconfortan la sombría razón.

Tendremos que morir para vivir
o la muerte ya esta en nosotros..
yo sólo vivo para poderte escribir
y los olvidos serán para otros.

Tu permanente recuerdo
da un sentido a mi vida,
mas yo pregunto cuando...
la tuya será por mí compartida.


Juntos...

Un día fueron los sueños
la savia de nuestras vidas,
se apagaron los besos
dejando las almas dormidas.

Despertar en las tinieblas
de una vida desperdiciada
encontrando detrás de ellas
la luz en tan sólo una mirada.

Separados la nada somos
y cuando en amor vivimos
juntos en el todo existimos.

Eternamente en ti pienso,
muero cuando no te tengo
y vivo cuando te beso.


¿Acaso importa?

Que importa la oscuridad
en que estoy sometido
si tus ojos son la claridad
que yo no he merecido.

Que importan los lienzos
de tu vestimenta
sí a través de tus ojos
veo tu alma desnuda.

Que importan las curvas
de tu organismo
sí en tu esencia
esta el sendero recto.

Que importa la distancia
que nos separa
sí toda tu presencia
me llega con la alborada.

Que importan los sueños
de mi vida cansada
sí con tus besos
es nuevamente renovada.


Solo imagínate...

Imagínate...
Que las rosas pudieran volar,
te llegaría la primavera
que yo te deseo regalar

imagínate...
Que mis versos supieran nadar,
te dirían te quiero
por todo el ancho e inmenso mar.

Imagínate...
Que los sueños consiguieran hablar,
callarían los silencios
de los besos que te quise dar.

Imagínate...
Que mis ojos te pudieran mirar,
te darían los buenos días
con la luz de la mañana al despertar.

Imagínate...
Que mis manos te lograran abrazar,
rodearían tu cuerpo
para que no me quisieras olvidar.

Imagínate...
Que un día te alcanzara a besar,
te daría todo el amor
que antaño no te pude dar.

Solo imagínate...
que yo, ya lo imagine...
tan sólo recordándote.


Rostro al viento

Espero al viento de madrugada
con la respuesta a lo que siento,
sentimiento de noche callada
que en la alborada borrará el lamento.

Largo suspiro en ausente brisa
que no trae aire sobre mi rostro,
cruel gemido de la esperanza
que se escapa perfil al viento.

Espero el más mínimo soplo
que me llegue de tu orilla
al mar de mi abandono.

Es aliento de vida
que cura él desanimo
de mi alma dormida.


Buscándote...

Mis ojos te buscaron
por todos los senderos
de verdes bosques
y en el inmenso cielo.

Mis oídos te buscaron
en los sonidos nuevos
con los tenues murmullos
del silencioso eco

Mis pies te buscaron
por los agrestes campos
repletos del polvo
que levanta el viento.

Mis labios te buscaron
por el mar y sus recodos
esperando el frescor
de la brisa en su lamento.

Mis manos te buscaron
temblándome los dedos
en la silenciosa noche
de un lejano recuerdo.

Más vacíos regresaron
para amargar los llantos
del hombre que en amor
todavía no-té a olvidado.


La Flor...

La más hermosa
nunca esta al alcance de la mano,
vive en la agreste cordillera
de los vientos al amparo.

Y no es porque se esconda
pues esa es su condición,
estar en la empinada cuesta
donde la puso el creador.

Florece una sola vez en la vida
sin tiempo ni estación,
torna él frió en cálida primavera
para el alma de quien la vio.

Es como la gota del rocío
frágil como la inspiración,
su aroma no llega al olvido
y te anula la cuerda razón.

Sólo la puedes contemplar
mientras florece,
si la arrancas del lugar
de pena muere.

Te dará su efímera vida
y con ella su aroma y color
para que después de la partida
sepas que conociste el amor.


Otra vez mañana...

Nos encontramos
en sabanas de fino lino,
las aves al rayar alba
nos despertaron con su trino.

Noche de sensaciones
que rebosan por la piel,
las calladas pasiones
hablaron en el día aquel.

Dialogo inconcluso
si nos aferramos a él,
las palabras del verso
todavía están por ver

No me ato a lo vivido
pues ello torna viejo,
la esperanza venidera
rejuvenece el pellejo.

Tu madura desnudez
me viste a mí el alma,
en la quimera que tal vez
hoy ya es mañana.


En un día cualquiera

Con solo una sonrisa,
una tenue mirada
dejas mi ventana
todo el día iluminada.

Aceleras el corazón
en su monótono palpitar,
haciendo que pierda la razón
con tan sólo poderte contemplar.

Me despiertas los sueños
de su lánguido letargo,
haciéndolos frescos
en el caluroso verano.

Refrescas la inspiración
con solo tu presencia
dándole a la composición
el perfume de tu esencia.

Aroma que me trae el viento
hasta esta apartada orilla
que me llena de sentimiento
para hacerte esta coplilla.

Hoy ya te vi...
y con ello llenas mi vida.
mañana te volveré a ver
si tú lo quieres chiquilla.


Yo fui...

Yo fui tantas cosas
que un solo recuerdo
me posterga al olvido.

Yo fui el soñador
que a la quimera hizo despertar
con un solo verso al clarear.

Yo fui el poema viajero
que cruzaba el ancho mar
solo por poderte enamorar.

Yo fui la ventana abierta
tras la noche cerrada
que se iluminaba al alba.

Yo fui el abrazo al viento
que llegaba con la brisa
pleno de sentimiento.

Yo fui la tierna sonrisa
que borraba la pena
en noche de luna llena.

Yo fui la palabra callada
diálogos en silencio
en una sola mirada.

Yo fui el paseo matutino
de dos peregrinos
buscando su destino.

Yo fui la esperanza
de la tardía primavera
en el ocaso de la flor.

Yo fui la locura
rescatada de la cordura
de un poeta cantor.

Yo fui la pasión
de una rima ansiosa
sobrada de inspiración.

Yo fui el deseo de la piel,
de dos seres que en uno
se fundieron en el día aquel.

Yo fui tanto y en cuanto
que sin tu beso...
sé que no fui nada.


Epilogo

Fuimos un sueño que se hizo realidad...
y la propia realidad nos hizo despertar


Joan Bosch © 2005-2006