...Una señora muy dulce, tierna y sentimental, prepara los tamales que se comeran el 24 de diciembre a las 12:00 de la noche, precisamente cuando el reloj marca la medianoche, los niños están preparando los cohetillos, las bombas navideñas... estrellitas de luz que destellan paz y armonía en los hogares de Guatemala.
Un señor le dice a su esposa que debe comprar la ropa que vestirá para esa cena en familia, "mira amor, te acordás que debés prepararte un bonito vestido para que los luzcas el 24...ahhh!! se me olvidaba que la fruta para el ponche está un poco cara, pero...lo vamos a hacer oiste?, recordate que lleva las pasas, las ciruelas, pera, manzana, piña deshidratada, durazno, si querés le echamos nueces partidas..." así se preparan los hogares y el dulce calor humano en la preparación de la comida navideña no pasa...al contrario se alborota más y más con el rico y delicioso sabor de los tamales que son una mezcla de masa de maíz, al que se le echa un recado (salsa de tomate), con carne de cerdo, o bien de pollo...mmmm ¡¡delicia!!, unas alcaparras, aceitunas, una ciruela...y se acompaña con una taza con chocolate caliente o ponche de frutas descrito anteriormente, un buen pedazo de pan, un trozo de pastel navideño si se quiere...¿ y los regalos? se abren a la medianoche, no faltan las manzanas y las uvas deliciosas. Y el descanso laboral 24 a mediodía, y 25 de diciembre. En las calles de Guatemala por las noches a partir del 16 de diciembre, se escucha un sonido muy peculiar...un tucuticutu...tucuticutu...son las famosas tortugas (así se le llama al instrumento) por las posadas que celebran en los hogares católicos...la espera del nacimiento del niño Dios, el árbol navideño con sus luces y colores...pero ante todo el abrazo de la medianoche en las personas que se aman y el calor que se enciende en los corazones...Así es la navidad en mi país natal Guatemala... |