Ni soy ni estoy
nadie está aquí conmigo.

Aun sin ser, sin estar
siento!, me siento sola, encerrada
y ese muro que miro de frente es tan alto
tan imponente es su imagen, que siento que me aplasta,
me anula, sin permitirme siquiera dar un suspiro, gritar: auxilio!.

Nadie viene ya a cuidarme, a darme un abrazo, a besarme en la boca, no existe alguien que quiera ya tomarme de la mano a solas, acariciar mi cabello mientras duermo, mirar mis ojos detenidamente, grabar el tono de mi voz en su memoria, recordar la contradicción de mis discursos, conocer el significado de mi llanto, contar los lunares de mi cuerpo, alegrarse con mi risa, soñar con mi amor...

Y si viniese alguien ahora?
ja, de nada serviria, porque deje de ser hace poco y mi cuerpo yace debajo suyo, MURO.

(¿hay personas con corazon de piedra?)