Y para esta época me vuelve a retar la hoja en blanco, en la que dijiste que te convertirías en caso de que dejara de escribir… ¿y es que a alguien de verdad le importaría que dejara de escribir? ¿Será malo admitir que eso no me importa a mí?

Sin embargo, uno no puede dejar de admitir que siempre busca la aprobación de alguien más… así no te des cuenta uno termina escribiendo para algo o por algo, para alguien o por alguien. Quizá la aprobación que buscas es la propia, pero no creo que escribamos sin la intención aunque sea profunda de que alguien apruebe o desapruebe… siempre y cuando alguien lo lea.

Pero, aunque siempre pueda que exista esa sensación en mí, personalmente no estoy pendiente de eso, y descubrí que alguien a quien yo amo mucho tampoco… pues se fue dejándonos un montón de palabras que nunca nos enseñó en vida, ¿las tenía para él? ¿Será que presentía que eso le iba a pasar y nos lo dejó para que siguiéramos descubriéndolo? Quizá… quizá tantas cosas.

He notado que entre párrafo y párrafo a veces suelo contradecirme, y es que escribir y ese momento contigo mismo se vuelve a veces tan incómodo. A veces me digo que no es posible escribir todo lo que pienso, de hecho a veces no me lo permito… sólo a veces.