¿Qué pasaría si Dios, desdichado y soñador quisiese matarse ? Nunca sus manos podrán apagar el tufillo irracional de su verbo. Sólo el delicado velo de la carne separa los dientes herrumbrados del alma del hombre civilizado. El lado brillante del suicidio es su propio poder.
Texto agregado el 07-12-2006, y leído por 115 visitantes. (1 voto)