Sucedió en el siglo XXII

¿Que pasaría si un espíritu escapara del Infierno y que se rebelara contra Lucifer y Dios?

¿Qué pasaría si este demonio se disfrazara de mortal e intente destruir el mundo, y que la única persona que sepa de esto sea un chico de 16 años? Una tragedia que nadie conocerá.

En el siglo XXII el viaje interestelar había logrado grandes avances. Las primeras colonias en la Luna y en Marte, ya albergaban miles de personas y muchas industrias.

Todos las, personas siempre pensaban en las estrellas. Pero un chico de nombre Dereck se había quedado en la Tierra, ya que le gustaba este entorno, además que sus padres no tenían el suficiente dinero como para viajar al espacio.

La zona donde vivió alguna vez estuvo llena de gente rica, pero estas personas fueron a la Luna, y la zona estaba prácticamente deshabitada, solo quedaban pocas familias, era el único hijo de su familia, estudiaba en una escuela cercana donde había muy pocos alumnos y muchos salones vacíos.

Faltaba una semana para su graduación... cuando sucedió, un bombardeo incesante a la colonia marciana, no hubo ningún sobreviviente; los viajes a Marte fueron cancelados y la gente de la Luna, regresaban a la Tierra por miedo a morir.

Los científicos intentaban explicarles a la gente que no había posibilidad de que un asteroide de gran tamaño impactara contra la Luna, muchos científicos se reunieron al día siguiente del impacto en Marte a las 10:00 PM, en la NASA para dar un informe televisivo sobre la destrucción de la colonia marciana, sin embargo, esa misma noche una estrella fugaz paso por el cielo estadounidense, y la NASA junto con muchos científicos desaparecieron, y todos se preguntaban ¿por qué sucedía esta anomalía astral? ¿Por qué?

Y entrando a lo sobrenatural y espiritual...

En algún lugar del infierno un demonio se rebelaba contra todo reino y todo poder, quería destruirlo todo, su nombre era Rasogod.

Rasogod fue un demonio huérfano como muchos, él descendía del mismo Roger Dark, había sobrevivido a la llamada “Revolución del Ángel X” donde Jonh y muchos de sus amigos conocidos habían sido destruidos, para suerte de muchos Seto Rey, tataranieto de Jonh logró acabar con la revolución.

Ahora Rasogod quiere comenzar una nueva revolución.

Los sobrevivientes estaban tan ocupados en reconstruir el Paraíso y el Infierno que dejaron a un lado la Tierra momentáneamente.


Mientras tanto Dereck, estaba despreocupado en su vida cotidiana, sin imaginar lo que pasaría.

La calle donde vivía se llenó de gente con dinero y aunque no tuvo más amigos, había llegada desde la colonia lunar una chica muy bella y que parecía saber algo del ataque.

Se sentía atraído a ella y un día se armó de valor y se dispuso a hablarle, ella estaba sentada leyendo una revista en la banca de un parque.

- Eres nueva ¿verdad? ¿Qué lees? – le dijo Dereck.
- Un articulo sobre la destrucción de la colonia marciana... Oh es verdad, me llamo Crístal. – le dijo con una sonrisa.
- Yo me llamo Dereck.
- Dereck, no sé lo que pienses pero creo que vi algo extraño un poco antes del incidente en Marte.
- Algo ¿cómo que?
- Como un lucero, que estaba muy cerca de Marte.
- Eso si sería muy extraño, no sé de ningún cuerpo celeste que ahora este cerca de Marte.
- Si pero tenia mas o menos el tamaño de una persona.
- Eso es imposible.
- Lo mismo pensé yo.

Por la noche, cuando Dereck veía las noticias se dio con la sorpresa de que junto a Marte había un lucero de tamaño humano, esto se podía ver con una ampliación inmensa, exactamente lo que me había dicho Crístal, pero, además se podía apreciar una silueta humana en el brillo gracias a las fotografías de un telescopio.

En todos los periódicos de la semana circulaban las noticias de la colonia marciana como esta:


¡Ataque a Marte!

4 de diciembre del 2124, esta fecha será recordada por muchos como el hecho más increíble de la historia humana, un gran numero de meteoros se desvió de su curso y se dirigieron hacia Marte, Un hecho anormal, casualmente todos los meteoros se dirigieron hacia la colonia de Marte donde se calcula la perdida de mas de 100 millones de vidas, eso sin contar el gran numero de material tecnológico.
Este hecho ha fomentado el terror en la colonia lunar, tanto así que la mayoría de selenitas a decidido mudarse a la Tierra, con esto la población terrícola a tenido un alza del 30%.
Volviendo al tema de Marte, gran numero de personas que observaban casualmente ese día aseguran haber visto un brillo de tamaño humano en la orbita de Marte, así mismo lo confirma el telescopio Jonson (el más moderno y construido hace pocos años) que tomó una fotografía en el espacio de aquel supuesto resplandor, en el cual se puede apreciar una forma humana. Además del sorprendente hecho de otro meteoro que chocó contra la tierra y causó la destrucción de la NASA, tal vez no estemos seguros en ningún lado del Universo.
¿Extraterrestres? ¿Dios ha venido para el Apocalipsis? ¿Superhombres? La verdad nadie lo sabe.


Era espeluznante, sin embargo los sucesos cesaron tan repentinamente como habían comenzado, mientras tanto todo no era color de rosa en el Paraíso.


Rasogod se hallaba escondido en el Infierno, demonios y ángeles lo buscaban, aun después del regreso de Lucifer, Rasogod se había convertido en un enemigo público.

- Un lugar seguro – murmuraba el demonio Rasogod entre las sombras – un lugar donde nadie sospeche.

Mirando un mapa del Espacio, Rasogod Buscaba “Un lugar seguro”... para él.

- Si quiero destruir la tierra ¿dónde me puedo ocultar? – poso su dedo sobre la imagen de un planeta con un satélite de un cuarto de su tamaño, donde abundaba la vida, tres cuartos de este era pura agua, la Tierra.

Después del caos de los meteoros, los comerciantes seguían promocionando el viaje a la Luna, y el terror causado por los meteoros se olvidó en menos de medio año.

- ¿Un concurso para dos boletos a la Luna? – preguntaba Crístal
- Pues, eso fue lo que gané – le contestaba Dereck.
- La gente a olvidado rápidamente a la colonia marciana y a la NASA.
- Sí, pero sigue habiendo algo que no me deja tranquilo.
- ¿Qué?
- Hay algo, lo presiento, las cosas no pueden haber acabado así por así.
- ¿A que te refieres?
- Una intuición, creo que hallaré lo que busco si voy a la Luna; sí, las respuestas están en la Luna.
- En ese caso yo también voy, no puedo perderme de esto.
- Iremos a la Luna.

Sus intuiciones de Dereck eran las correctas, si iba a la Luna resolvería el misterio de los meteoros.

Se hallaban en una nave turística, donde no eran los únicos que viajaban a la Luna, muchas personas de diferentes edades también se dirigían allá.

- No es un crucero de lujo, pero no esta mal; ¿tú qué dices Dereck?
- Sí, Cristal, ¿sabes qué hora es?
- No traje mi reloj.
- Disculpe señor, ¿podría decirme que hora es? – preguntaba Dereck a un hombre que pasaba por ahí.
- Cállate niño – le contesto el hombre de muy mala gana – el tiempo no te debe importar.
- ¿Y a este que le pasa? – peguntaba Crístal.
- No lo sé, pero creo que sabe algo.

Lo siguieron hasta su habitación donde se encerró y no salió en todo el día.

- No ha comido nada de nada – decía Crístal – ¿qué persona pasa un día sin comer?
- ¿Y si no es humano?
- ¿Extraterrestre?
- Podría ser cualquier cosa.

Estaban alunizando en un círculo metálico, el cual se abrió para que la nave pudiera ingresar en el interior de la Luna.

En la ciudad lunar debieron de haber seguido un tour por la Luna, sin embargo, el hombre misterioso que habían seguido se separó del grupo dirigiéndose a la planta energética Lunar.

- ¿Para qué iría allá? – preguntó Dereck – a menos que...
- ¿Qué? Dime.
- ¿Sabes lo que hay en ese lugar?
- Desde luego, es el sistema operativo de la Luna.
- Sin el cual la Luna y todos sus habitantes morirían.
- Ah… pero eso nos mataría a todos.
- Vamos.

Corrieron a toda marcha, hacia el edificio, Una estructura que a pesar de estar en el subsuelo era de gran tamaño, toda hecha de metal con una forma cónica.

Habían perdido el rastro del sujeto desde hace mucho pero seguían dirigiéndose hacia lo que sería su descubrimiento más grande.

Los guardias de seguridad del edificio se hallaban tendidos en el piso e inconscientes, el pase había sido roto y la alarma sonaba pero nadie la atendía.

Tomaron el elevador que llevaba a la cúpula exterior, desde donde se controlaba todo.

Al llegar a la cima pudieron ver a través de los vidrios el espacio y su belleza.

- ¡Mortales! – Gritó el hombre -¿Qué hacen aquí?
- ¿Qué o quién eres?
- ¿Chico eres religioso?
- Sí, creo en Dios.
- ¿Y en los ángeles?
- También
- Pues yo soy un demonio, puedes llamarme Rasogod, también puedes apreciar tu insípido planeta por ultima vez, por que desaparecerá del Universo.

Crístal mientras tanto se hallaba ocupada, tecleando el panel de control, había aprendido algo de sistemas hace poco e intentaba hacer un sacrificio.

- Prepárense para expulsión de la cúpula principal – decía una voz femenina desde los parlantes de la cúpula – en diez.

Rasogod se abalanzó contra Dereck y daban nueve, en el ocho Dereck se libraba de Rasogod, siete y Dereck empujaba a Crístal al ascensor, seis, cinco y cuatro Rasogod detenía a Dereck y Crístal gritaba al ver descender el ascensor.

Tres y las compuertas se sellaban, Crístal no podía volver a subir; dos, los llantos de una joven, y los gritos de un chico.

Y uno para el fin, La cúpula fue expulsada y casi al instante se hacía pedazos, Crístal sollozaba sin remedio mientras el ascensor descendía.

Toda la prensa asistió al lugar, la Luna había quedado fuera de control y la cúpula debía ser restaurada inmediatamente.

Crístal exoneró la parte de Rasogod como demonio en sus declaraciones, dijo que fue un intento terrorista, además ¿quién le iría a creer?

Fue nombrada una heroína igual que el pobre Dereck del cual no quedó ni polvo.

Esto quedó gravado en la mente de Crístal y fue visto por Seto, pero por ahora aquí acaba todo.

Fin