Ignoro cuantas veces te han tocado, no quiero saber, no me importa cuantas bocas han tocado tus labios pálidos, ni cuantas veces tu cuerpo ha estallado de pasión locura y desenfreno, no deseo saber con quien comparto parte de tú vida, solo quiero que pienses en mi, sin sentir mi piel, sin saber la textura de mis labios,

Desatando en tu almohada el deseo, el lamento de lo que tienes por tocar y no tocas, de los besos que deseas y no das por las llamadas que haces y no estas, por mirarme sin saber que te miro igual.

Por tocarte, por poseer la delicia de unos labios de hombre con textura de infante me prometo que no vuelvo a besar a otro hombre, que mis miradas serán tuyas, mi piel solo será perfume para ti, mi esqueleto completo lo puedes portar en forma de llavero, donde tus ojos solo miran mi piel, y desean la fuerza de lo que obtengo mientras te tengo.