Historia triste de una flor
Dedicada a una mujer que nunca lo fue
19 años de habitación y de cama compañera
Techo visionado hora a hora, día a día, años tras años
Historia triste de una flor
Con espinas ajenas, clavadas antes de nacer
Entre amor e ilusión su cuerpo creció, llena de dolor
Juegos de calle imaginó, con sombras y sol
Cuerpo con alma, en un mar de sabanas blancas
Con vivencias de un mal, sin hacer el mal
Sentimientos amorosos de ojos quietos
Respuestas en sonrisas sin habla, con mirada agradecida
Sensibilidad que emana, desde tus mañanas
Sonrisa que encarcela mis sueños
Experiencias de la vida injusta y vana
Ojos trasmisores de sonrisa calma
Movimientos quietos de mente que vuela
Palabras perdidas, preguntas con amor
Amor de Madre, con esperanza cabal, sufriendo hasta el final
Sin ayuda, segundo a segundo con sonrisa a su niña acariciara
En su ausencia, solo soledad
Sentido desconocido de la vida
Quien aparca una vida, para el sufrimiento de otra
No puedo pensar, solo asumir, que todo tiene un fin
Se atragantó mi garganta al saber tu final y una sonrisa por tu libertad
Un alma a la energía universal va y otra aun le queda que esperar
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