El Paradigma de Picasso


Me asomé a la ventana, llena de razón humana, celosa de entendimiento y vi que no había nada, nada que yo comprendiese, mas que puntos y rayas, y espectros cromáticos que indescifrables, irreconocibles e incongruentes...se deslizaban ante mis globos oculares...

Pero yo sabia que ese paisaje que de súbito estaba viendo, era la verdadera realidad de la cotidianidad imperceptible...

Porque vi...rayos gamma, rayos beta, rayos infrarrojos, rayos ultravioleta, decibelios, kilovatios, átomos, protones, gérmenes, virus, priones, bacterias, fuerza de gravedad, fractales, microondas, ultrasonidos...

Porque vi...fuerzas magnéticas, radioactividad, ondas hercianas, ondas electromagnéticas, gases, moléculas, fotones, fracciones de tiempo, temperatura, fricción del aire, humedad relativa, ubicuidad dimensional...

Porque vi...unidades de potencia, densidades, secuencias, corriente eléctrica, potencia termonuclear, fuerza hidráulica, fluctuaciones, resonancias, calorías, vapor, clima, condensaciones, grados de inclinación...

Porque vi...ondas cósmicas, ácaros, células muertas, polvo, rayos solares, altas y bajas frecuencias, sonido rosa, cacofonías, el influjo de la luna sobre los mares....

Y todo esto entre otros cientos de parámetros insufribles...que mareaban mi visión.

Pues todo lo que vi en aquel momento, era parte de una abducción del universo, del universo perverso que en mi reducto me acorralaba...como efímera humana expuesta a su consentimiento.

El universo que en torbellino se había introducido ( a la fuerza) por mi boca, y me había deglutido del revés, de dentro a fuera, y me había digerido por los pies y defecado por la cabeza en posición cabeza abajo, depositándome de una sacudida, ante el paisaje invisible que llenaba mi ventana...

Mi ventana!!!...allí donde yo me había quedado absorta durante ese larguísimo instante...ante presencias desconocidas, si mas no, tan reales y pertenecientes a mi propio mundo...como yo misma.

Y porque ya era el atardecer en su hora somnolienta, que al verme perdida ante tanto trazo abstracto...cerré los ojos y me sumergí en mis sueños, allí donde, por lo menos, reinaban mis sentimientos...los cuales creía conocer...

Y allí divagando entre impresiones cúbicas ansiosas y diagramas ascendentes felices, tuve una revelación de un personaje al cual nunca había comprendido hasta el día de hoy.

Y comprendí que el pintor Picasso gozaba ciertamente de infravisión y que después de ver el universo (probablemente) a través de un paradigma lineal incongruente, semejante a este, que se le debió aparecer como revelación definitiva de su genialidad...

Él, Picasso, aplicó en sus retratos artísticos, la curva circular de los sentimientos humanos, a los ángulos rectos de la perversa realidad llena de aristas agresivas.

Realidad que él vio, y que él supo que tal como nos condiciona totalmente, aun así no nos conmueve jamás...al menos que no sea en forma de impacto...o al menos que seas, tu mismo, un loco artista de esos...tal como fue él... y que así sintió compadecencia por la realidad gris e incomprendida y decidió perfumarla de colores.

Así pues (según mis conjeturas) Picasso que sí se dejo conmover por el impacto de lo insustancial, no trató de pintar la cuadratura del circulo, sino la circunvalación del cuadrado...

Él no deshumanizaba los rostros ovales... si no a la inversa de lo que parece, humanizaba líneas rectas...

Y que conceptualmente lo hizo ( a mi parecer) para darle sentimiento al cemento de las ciudades, a las tuberías de los guetos y a las chimeneas de las fabricas...

Y con eso intentó humanizar el futuro...al igual que George Orwell, pero esto ya forma parte de otro sueño...inalcanzable y cruel.


Silvia Escario
21-11-06

(que Picasso me perdone desde su tumba ej ej ej)