Hace falta llenar un formulario para hacer un amigo?, Es necesaria una cierta antigüedad?, hay que contactar una cantidad de horas semanales determinada para considerar a alguien amigo?, tenemos que coincidir absolutamente en todo?, debemos presentar mutuamente una declaración de bienes?:
definitivamente NO. La amistad es la simple atracción simpática entre dos o más personas; muchas veces quienes trabajan juntos durante la semana, y se llevan bien, bromean, se acompañan, se buscan y que con sólo mirarse ya saben lo que piensa el otro, dicen no ser amigos porque la amistad es otra cosa, como si hicieran falta los requisitos señalados más arriba. En esta época, en la que si hay algo que escasea es el tiempo, no nos merecemos poner una cantidad de requisitos estrictos para la consideración de alguien como amigo, porque quien más quien menos está ocupado la mayor parte de la semana en trabajar y otras veces la falta de dinero hace que no podamos comprometernos a viajar a ver a una amistad o a cubrir una salida de esparcimiento. Hay amigos de tiempo permanente, de toda la vida; hay otros con los que compartimos un período de nuestra vida y luego por cosas de la vida nos alejamos; hay amigos en el trabajo con los que no necesariamente compartimos el resto del tiempo; hay amigos con los que estuvimos muy cerca en cierto momento y hoy solo contactamos telefónicamente o por e-mail. Todos son amigos, todos son necesarios para cubrir nuestra cuota afectiva, ¡¡¡no hagamos una burocracia afectiva!!!, ¡los asados de los domingos no son la única fuente de amigos!. Lo invito a repasar su vida teniendo en cuenta estos conceptos, estoy seguro que al final de este recuento encontrará que su mundo afectivo es mucho más grande de lo que creía!.