- Que nos pasa?
- …
- Podría ahora mismo desdibujar tu figura, prefecta y sublime, como el sol desaparecido que nos hiere.
Y yo te quiero… habitando entre mi mente y cambiando mis colores.
No dejo de pensar en cada mundo. ¿Cómo habitar?.
Y yo te quiero, con tu violencia asesina, despertando inútilmente mis fibras deformes.
Este inmundo deseo de hacer algo y no soy nada.
Un círculo vacío que me atrofia,
Y la rabia…
Veo como te mece el viento, de un lado hacia el otro,
A veces pienso que deseas desaparecer.
Te iluminas inevitablemente, allá donde está tu fe. En la montaña.
Como desearía quedarme en ti para siempre; imposible.
Tierras lejanas me llaman, se que volveré, mas no será igual.
A muchos les habré defraudado, indudablemente,
Hoy patria mía, hoy te defraudo