A veces la ceguera no se refleja en lo que no vemos sino en lo que no observamos. La vida es para los valientes... siempre triunfa quien en algún momento debió sacrificar algo. A veces es mejor despertar de un sueño que dormir en la esperanza de un sueño vano. Detrás de todo ego, hay un capítulo por reconocer. Sin lo clandestino el secreto tendría un motivo menos para revelar La huerfandad termina con la adopción de tu propia vida. Cada reencuentro no hace más que redescubrirnos y descubrir un mundo inmenso de sensaciones que aguardan ser reveladas. La mejor forma de eliminar un recuerdo, es no recordándolo. A nadie le vendría mal darse una vuelta por el pasado. Si sueñas y cierras los ojos, cuida que tus manos no recojan lágrimas. Es cierto que la verdad incomoda, pero es la única que derriba mitos. Siempre existe algo que hace que el hombre se escape. Las cosas por las que verdaderamente vale la pena vivir, no se piensan, se sienten.
Texto agregado el 17-11-2006, y leído por 399 visitantes. (3 votos)