Esta pequeña historia tiene lo que algunos llaman una gran imaginación espero que les guste. (está escrita tal y como me la relataron, nada más ni nada menos)

Me encontraba yo con mi padre, caminando por un prado verde con pequeños montes. Estábamos paseando un día domingo, disfrutando una de esas pequeñas caminantes en la mañana. íbamos de la mano y el cielo se encontraba muy claro, de esos que a uno le llegan a doler los ojos de mirar hacia ellos. Nos encontrábamos caminando y nos detuvimos en un monte.
Se pararon mirando hacia el horizonte, discutieron algún que otro detalle y retomaron su camino.

Transcurrió un segundo y se encontraron en la parte trasera de una casa de color negro, con barreras de metal por las que corría electricidad, pero no estaban activadas en ese momento. El cielo había cambiado de un color tan bello y claro, a uno de color negro, tenebroso, de los que anuncían una tempestad de los infiernos. Cercana a la casa había un bosque muy oscuro y lleno de árboles. Al lado existía una playa también inquieta y con las aguas muy turbias y oscuras. No había ningún animal presente.

Me encontraba yo, mi hermano y mi hermana, ellos eran menores que yo, y tenían un físico menor al mío(1). Estábamos asutados por que dentro de la casa había alguien que nos iba a ocasionar mucho daño, nos encontrábamos afuera porque era el lugar donde reunidos, no nos podía hacer ningún mal. De pronto miro hacia mi derechay a lo lejos veo una misma casa cuadrada, de negro, con las mismas caracterísitcas que la de nosotros, sólo que en esa casa vivían monitos de palito de color negro. Se encontraba al lado de un risco, al lado de la playa.
Los individuos se encontraban jugando, en la azotea de la casa, mantenían un juego, y de la nada los dos saltan del techo hacia el piso y se lanzan hacia la playa. Se suicidaron.

Vuelvo hacia mí y con mis hermanos entramos adentro de la casa. Ya no es una casa, es un castillo del S XVI, con ladrillos, iluminación de velas en candelabros, por todo el castillo y en el hall se encuentra una alfombra, con 2 sillas, un sofá y al medio un televisor en una mesa pequeña. Comenzamos a recorrer todo el lugar y nos encontramos en un pasillo con 9 cuadros de diferentes criaturas. Algunas de ellas son; un dragón, un minotauro, una serpiente, un búho, entre otros. Todos son espíritus de la casa y en cualquier momento van a volver.

Ocurre una reminisencia, él tiene un recuerdo y se ve matando a al minotauro, con una espada. Vuelve en sí y se los comunica a sus hermanos. Suenan las 12 de la noche y comienzan a salir uno por uno. Ya no están en el pasillo, están en al biblioteca, con pasillos, con estanterías y llenos llenos de libros. En ese momento aparce la serpiente, aparece una espada en mi mano y la mato de un certero corte en el cuello. Después de eso salgo corriendo de la sala. De la nada se caen libros de la estantería. Me dirijo a la salida.

Me encontraba afuera cuando, vi salir a mi hijo, por la puerta principal, de una casa estilo greco-romana, blanca entera, con leones al principio. Nos ponemos a caminar y para volver hay que atravesar el bosque. Cuando lo vamos recorriendo, en primera instancia está muy oscuro, y se nos aparecen dos traucos que se nos atraviesan en el camino. Se va aclarando, cada vez estamos llegando más a la salida y se nos aparece una "manada" de ratones, que se nos cruzan y pasan. Más claro, estamos cada vez más cerca, casi al fin.
Salimos.

Vamos caminando, cuando suvitamente vienen corriendo 2 leones a los costados, uno se lanza hacia mí y lo mato de una cuchillada en el cuello. El otro viene por el costado de mi padre, se le tira, y casi lo corta por el cuello, pero se lo alcanzo a sacar. Todo ha terminado sólo que cuando salimos de la selva en la cual nos encontrábamos, no situamos en la plaza de mi casa, abajo de un farol, todo está oscuro y sólo nos alumbra el alumbrado público. Nunca nos movimos de ahí.

se finite.


(1) En la realidad, él es menor que sus hermanos.