las esferas del automóvil cautivaban las especies calientes adentro. iracundas silenciosas. grabados en una película de humo verde e incienso. un mapa cubierto con estrellas enamoradas. imposibles impulsos imposibles.
retorciéndose. la ventana empañada, guardaba el rostro de un alma en celo. embarazada vendiendo kilos en las ruedas de su trayectoria. oculta con ganas de besar.

vibrando. las velocidades sudaban con las manos temblorosas. erótico. susurrando el aerosol de su boca, acariciando con su saliva los labios resecos.

lo muerto que estaban, emanaba de sus aretes perdidos. disfrazados con papel higiénico, la piel de la iguana acechaba la entrepierna del camaleón.
usados, despeinados.., contagiaron sus ojos con el reflejo medusa de su imaginación. fantasmas capturados por la esencia de desconocidos.
imitación de cuero llorando con las espaldas excitadas. hechizados por la marea de vaho nicotina, en la suela de sus deseos.

células que amamantan la membrana de su lengua.
manos de piano que suavizan los pechos del copiloto.
rostro esquelético con dedos de cristal.

la vía terminó con la constelación rota. cubierta de pétalos de tumba, los retratos fueron colocados en la fachada de su recuerdo.
el aluminio..., lentamente...
los soles..., lentamente...
parabrisas fulminado con los cuerpos jadeantes.., el beso que amaneció en la morgue, se elevó al corazón escandinavo.

latidos encimados en la desnudez del accidente.