A veces la ternura no consuela el alma herida,
pero en este día tu abrazo parpadeante
ha dejado de creer en los milagros del desafío humano.
Busco en las eternas circunvoluciones de mi memoria
un agujero hilarante, por el cual escapen tus recuerdos;
y así se nos va la vida, intentando un lugar en el paraíso,
mientras los demonios del submundo nos acosan con
divagaciones, cavilaciones nocturnas.
¿Será que la felicidad no nos hace libres como etéreos filósofos lo han deseado?.
Yo la siento como cadenas que se arrastran sobre una
rutilante vida, la siento como sentencia de nuestra putrefacta muerte.
Texto agregado el 01-11-2006, y leído por 97
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Lectores Opinan
04-11-2006
Hoy hubo tiempo para leer muchas cosas y entre ellas tus sentimientos. Arriba el ánimo!!!!! pancholinJR