LA PIEDRA MÁGICA – versión poema -

Y dijo el brujo en la playa a un gran número de hombres:
En el suelo que pisais, hay una piedra mágica,
a quien la encuentre, le concederé su mayor deseo.
¿Cómo sabremos que la piedra que cogemos es la mágica? Preguntó alguien.
No os preocupeis, sólo la reconocereis si no la cogeis vosotros.
Y dicho esto, se retiro a esperar acontecimientos.
Empezarón a probar suerte cogiendo rapidamente
el mayor número de piedras posible,
pero sin dejar de mirar al que tenían más próximo.
Alguien pensó que había descubierto
al que había cogido la piedra mágica,
y arrojandole otra,
fue corriendo a intentar tenerla en su poder,
a la vez, alguien le lanzó a él otra piedra.
Pronto la playa se convirtió en algo parecído a un campo de batalla.
El brujo tenía los ojos clavados en un chico,
que era el único que se había quedado a un lado
viendo horrorizado tan triste espectáculo.
Se agachó a coger una piedra y con ella
fue hasta el brujo.
Al llegar a su altura le dijo:
Señor, no he encontrado la piedra.
Y el brujo le contestó:
ninguna de todas ellas es mágica,
sólo quería que vieseis en lo que os habeís convertido.
Elige pues tu deseo.
Me gustaría que no hubiese más luchas
ni guerras innecesarias, ni muertes de gente inocente.
Me gustaría que no nos matasemos los unos a los otros por nada.
Concedido le dijo el brujo.
El chico se dió la vuelta,
al cruzar entre los otros hombres,
se percató de que a su paso dejabande volar piedras.
Alguien empezó a aplaudir, otras manos lo
imitarón, y cuando todos aplaudian,
alguien pidió perdón a la nueva generación.

CIELO-O-FARO