De pronto las luces se encendieron en medio de la oscuridad, dirigiéndose al fondo de la pasarela. Todos los ojos se posaron en ella. Sus altos tacos negros resonaron en el brillante piso del escenario y entonces apareció como salida de aquella niebla de luces enceguecedoras. Sí, era ella…y sus piernas largas, torneadas y hermosas se desplazaban raudas, imponentes, seguras, llenas de gracia, llenas de mujer y súbitamente toda aquella misteriosa sensualidad que emanaba de su cuerpo y sus cabellos se apoderó del salón. Sus cejas enmarcaban una mirada penetrante y su cabello negro lacio volaba brillando, encegueciendo a los más atentos admiradores. Desde una esquina estaba él… el anónimo fotógrafo, el amante secreto, el dueño de su corazón. Mírame, rogaba en secreto. Mírame, para poder sentirme vivo. Mírame, para sentir que mi día valió la pena…..click, click, sonaban los flashes, uno tras otro….click, clic y ella los veía con desprecio, como si no fuesen nada… nada porque ella era demasiado bella para las cámaras…orgullosa dio media vuelta y las piernas bellas la llevaron de vuelta a su origen. Hoy no me miró, hoy me despreció, hoy sólo fui un fotógrafo más…pero yo sé que eres mía, porque te conozco, sé que piensas en mí mientras estás llena de soberbia, sé que me deseas, me deseas tanto como yo a ti.
Terminó el evento y la gente aplaudió y los asientos fueron quedando vacíos. Periodistas, fotógrafos y camarógrafos se dirigieron a los camerinos de las estrellas. Las voces y el desorden inundaron la sala. El se hizo camino entre el tumulto y se dirigió al camerino, soñándola…. pensando que entonces le lanzaría una mirada cómplice, y que luego quedarían en encontrarse más tarde, huyendo del gentío para estar solos, solos al fin. Pero al llegar cerca de la puerta vio que ella salía rauda, linda, triunfante, decidida, curvilínea, dura….si, tan despiadadamente dura…REGIA…. y sus piernas perfectas la llevaban lejos, lejos… y entre la gente quiso alcanzarla, caminó rápido, luchó, intentó pero…no, ella ya se había ido y de pronto vio las luces de un auto negro de lunas oscuras, no, no puede ser….no, no….la puerta del copiloto se abrió y ella subió y en eso se detuvo un instante, volteó como buscándolo y con esos ojos de desdén….lo miró sí, ¡sí lo miró! y sonrío de medio lado, coqueta, cómplice pero luego desistió, entró al auto y desapareció en la noche…..y él se alimentó de ese instante, que para él fue una eternidad. Suspiró y su corazón recobró fuerzas y de pronto lo empujaban y ya no podía avanzar, la gente, la bulla, no….cogió su cámara con fuerza contra el pecho y giró en sentido contrario. Ella era su diosa, la diosa que una noche lo hizo suyo y le dijo que era especial y único….será acaso que le mintió, será que todo fue sólo un juego, será que ya no la volvería a ver…nunca más….no, no puede ser, seguro que estaba pensando en él, pero ese día tuvo mucho trabajo y estaba cansada y quería acostarse temprano, claro, eso es. Mañana, ella me mirará otra vez y me hablará y me dirá cuánto me desea, y nos iremos para estar solos, solos al fin.
Esa noche llegó al fin a su apartamento. Cansado, colocó las llaves y la cámara en la mesa del escritorio, posó la mirada en el ventanal y vio las luces de la ciudad desde su privilegiado séptimo piso. Autos y gente que iba y venía. El mundo seguía su curso, todos apurados, todos viviendo sus vidas anónimas o compartidas, todos, y él….él que no podía pensar en otra cosa que no sea ella….ella….Se desplomó en el sofá, cerró los ojos, y otra vez ella. Se levantó y se dirigió a la cocina. Calentaría quizá un pedazo de la pizza del delivery del día anterior. Abriría una cerveza, tomaría quizá algo de leche con corn-flakes…y luego se iría a la cama pensando en ella… Pero no, seguro que mejor antes encendería su pc y abriría el Messenger, claro, porque quizá ella estaba en línea, quizá ella tenía algo que contarle, algo que decirle, antes de acostarse. Tac, tic, turu….ya está, ya estoy en línea. Pero ella no está, umm….comeré y esperaré hasta que aparezca, sé que aparecerá. Buscó su música MP3 preferida, buscó algo adecuado para ese momento, algo sensual, algo que despierte sus fantasías, algo que lo haga soñar….Sweet bitter symphony, esa me gusta. Transcurrieron los segundos, los minutos y las horas… y luego de haber devorado aquella hawaiana, aquella cerveza, la leche y los corn-flakes, ella no aparecía. El hambre se había ido. Se recostó en el sofá y sintió su soledad. La música había acabado y en el silencio sólo pudo escuchar su corazón. Y él le decía que algo andaba mal, que algo no estaba saliendo como se suponía que debía salir, que esta no era la vida que él había planificado tener.
Destapó las sábanas de su lecho y se recostó. Cerró los ojos y sólo podía verla desnuda….no, no, no puedo más, no puedo seguir así, estoy enloqueciendo, estoy mal, estoy mal…le escribiré un mail y le diré otra vez cuánto la amo, me humillaré, me pondré de rodillas porque ya no me importa, ya no me importa vivir si ella no está conmigo, no, ya no….Se levantó y fue a la computadora. Iba a empezar a escribir. No, mejor no. Esto no está bien, esto me hace daño, porque tiene que pasarme esto a mi…Nicole tiene razón, no debo escribirle, no debo hacerlo, porque ella me hace daño, ella juega conmigo, ella me hiere. ¿Porqué soy tan estúpido, porque me resisto a entenderlo, porqué?…Oh Dios mío ayúdame por favor, por favor, no puedo dormir, no puedo seguir trabajando así, no puedo seguir viviendo esta pesadilla…ten piedad de mi, ayúdame por favor….
Tu rú. Qué fue eso, quién está en línea. Saltó de la cama y corrió al escritorio, movió el mouse….Nicole, amiga….mi dulce Nicole, gracias a Dios que estás ahí. –Hola. –Hola. -¿Cómo estás? –Aquí escuchando música, ¿y tú? -¿Qué escuchas? ¿George Michael? –Cómo me conoces ¿Despierto tan temprano? Deben ser las 5:00 a.m. en Berlín. –Si, es que no pude dormir en toda la noche. –Oh, no, no otra vez. –Sí. -¿Ella? –Sí. –Ron, por favor…tienes que olvidarla, ¿Acaso no lo estás intentando? –No, no puedo….–Ron, yo sé que dentro de ti, muy dentro de ti, todavía queda algo de dignidad y autoestima. Tienes que rescatarla y seguir adelante con tu vida. – Soy tan estúpido. –Sólo lo serás si quieres serlo, depende de ti, tú tienes el poder. -¿Y tú? ¿Acaso tú ya lo olvidaste? – Oh…yo por lo menos lo intento. -¿Y? –Cada día pienso menos en él, cada vez su imagen se hace más borrosa en mi memoria, cada vez me duele menos. –Te felicito. –No fue fácil. No te voy a mentir. Yo surgí de mis cenizas, misma ave Fénix….Ahora cada vez que cierro los ojos ya no lo veo comiendo mango en sus boxers….ya no lo veo sonriendo sexy sin camisa…ya no lo veo desnudo tapándose sólo con su tabla surf...- ¿En serio? ¿Qué ves ahora? – Lo veo vestido de novio, lo veo casándose con esa mounstrua….- Esa horrorosa. –Si, esa huachafa –Si tú sobreviviste entonces yo también tengo que poder. –Claro que sí, si vamos a sobrevivir. –Gracias Nicole. Sabes a veces me siento tan cojudo. –No te preocupes, no eres el único, la vida es así, a veces no entendemos el porqué, pero todo tiene un motivo, y generalmente es para mejor. –Nicole…hoy me di cuenta de que…soy un fotógrafo exitoso, tengo un departamento de lujo, tengo este auto nuevo de la puta madre…pero me siento solo .y soy completamente infeliz. –Ron…no hables así por favor, no quiero oírte hablar así. Acaso no te has visto al espejo…eres guapo, joven, inteligente…Eres un hombre dulce, sensible, profundo…. Porqué te haces esto, porqué…..ella no te merece, no merece que desperdicies tu tiempo y tu energía pensando en ella…-Ojala no la amase tanto, ojala nunca la hubiese conocido, ojala….-No podemos cambiar el pasado, no está en nuestras manos. Lo único que está en nuestras manos es el presente. El hoy. –Tenemos que vivir el presente, tenemos que olvidar…-Vamos a lograrlo Ron, hay que tener fe. RIIIING-RIIIIING – Oh, es mi despertador, tengo que alistarme para ir a trabajar. –Y yo tengo que acostarme temprano para otro día de oficina. –Nicole, tu también estás bien…debes saber que eres linda y ese americano es un imbécil. – Por favor ya no hablemos de eso. –Cree que está enamorado porque tiran bien, pero eso no es amor…un día se dará cuenta. –Ya debo acostarme y tú tienes que trabajar. Ojala nunca lo hubiese conocido….-Bueno, en realidad nunca lo conociste, jeje. -Hey….-Just kidding darling, alégrate porque si lo hubieses conocido no habrías podido darme fuerzas hoy. –Fueron dos años y cuatro meses Ron…yo siento que sí lo conocí. Chau. –Y yo…yo fui su amigo durante nueve meses…para que, para que me use una noche, y luego me descarte como a cualquier cosa…Perdóname Nicole, no te molestes conmigo… gracias por todo. CLAC.
***
Seis meses después.
Era la noche del gran desfile de inicio de temporada. La gente aplaudía a rabiar. Click, click, los fotógrafos captaban belleza a rabiar. Las regias caminaban, se miraban, miraban, sonreían posaban….y de pronto….ella....Se deslizó en la pasarela, abrumadora como siempre, perfecta. Buscó entre los flashes, a ver si lo veía. El estaba en una esquina, conversando con un reportero, concentrado en el intercambio de ideas para un nuevo proyecto. Ella pasó, lo miró y…él apenas se percató de su presencia. Su mente estaba ocupada. –No puede ser, porque no me mira…no puede ser….será que he subido de peso, será que esta ropa no me queda, no me va, será mi nuevo peinado….Ella insistió…Pero Ron estaba concentrado en el presente y estaba tomando decisiones para su futuro. El desfile acabó y ella seguía mirándolo. Terminó el evento y la gente aplaudió y los asientos fueron quedando vacíos. Ron seguía conversando con el periodista, detallando planes, programando eventos. Las regias se dirigieron a sus camerinos, el tumulto, la bulla, la gente, los flashes….no puede ser, seguro no me ha reconocido, pero cuando lo haga me buscará….Ella se abrió paso entre el gentío y la bulla, venció los obstáculos, luchó pero…..cuando por fin estuvo cerca….no, no puede ser, él se va, se va, y está tan guapo, no puede ser, nunca lo vio así, sus espaldas anchas, su corte militar, pero…será que….será que siempre fue un príncipe y no me di cuenta….no…..no…..entonces al llegar a la puerta de la calle, en el viento frío y la oscuridad….lo vio salir y ahí estaba ella esperándolo….no, no puede ser quién es esa….quién es esa cachetona….MALDITA…los vio abrazándose y se veían tan felices….y en eso él volteó y en apenas un instante…la miró si ¡la miró! Y sonrió, cómplice….sí la había reconocido….sí, pero ella ya no era nada…nada más que una regia más….nada. No puede ser, no puede ser que esté tan guapo. No puede ser. Y ambos subieron a un auto beige. Y desaparecieron en medio de la noche. Y en el silencio una lágrima rodó por su mejilla, corriendo el rimel de sus pestañas….CLICK. No….Si, Madame. Esta foto saldrá mañana en la primera plana de los diarios sensacionalistas….¿Por quién llora la Top model al salir del desfile?…NOOOOOOO. SI, CLICK.
FIN.
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