Ruidos solitarios en las ruinas de tus ojos, esta tarde voy de regreso con los angeles de tu piel, para volver a creer. Los arboles empiezan a mormurar la caida de los deseos secos, en la existencia de tus verdades los soles se derritieron en tus lagrimas. Encendiste el fuego de tu pasion en la palma de tu alma critico el sabor de la traicion con visperas de calmar el aura ya no quiero volver a creer.
Texto agregado el 22-10-2006, y leído por 113 visitantes. (1 voto)