Allá por lo años cinuenta, en la región de la Tierra
Caliente no había en que distraerse, los que éramos
guaches (jóvenes), jugabamos canicas, ibamos a la escuela, y en tiempo de lluvias al campo, los grandes solamente el billar, o ir a la cantina donde se echaban sus mezcales, o un resacado con queso de aro.
En fin eran dias monótonos, de los que solo nos preocupaba pelearnos para ver quién era el mejor, montarle a un becerro o pintar una raya en la tierra, poner la mano frente a los dos contrincantes, y pedir, el que sea mas hombre, escupa la mano, y ahí empezaba la diversión.
Los grandes se peleaban con machete "garabato", "costeño" o "muruna", rayándole en el suelo para sacar chispas y así amedrentar a su contrincante.

Asi pasaban los dias y los hombres de cuidado, - asi se le decía a un hombre valiente - cargaban el famoso "puñal" o "verduguilla", arma de dos filos, con gabán en mano que utilizaban como escudo.
Me tocó en suerte observar algunas veces estas lides, en una ocasiòn estando peleando dos hombres con los famosos puñales, uno de mis amigos corrió avisarle a su mamá. - ¡Mama , mama!
¡allá afuera se estan peleando dos hombres con puñales!.-
Como ha pasado el tiempo, hoy solo recuerdo esto cuando veo que a cambiado todo, porque ahora los guaches dicen: -
¡Mamá, mamá, dos puñales se estan peleando por un hombre! -