Las paredes me estrujan, la tristeza me ahoga, tu recuerdo me desarma. La brisa helada de la noche, traiciona mi memoria con imágenes y recuerdos que pretendo dejar atrás. Pero es inútil el intento, porque el aroma de tu cuerpo, se ha quedado conmigo 23/3/2001
Texto agregado el 27-01-2004, y leído por 204 visitantes. (2 votos)