Mi madre es un caso malo, hoy me pidió que la ayudara a depilarse...¡ La ingle!
Cuando digo la ingle, me refiero a los rebordes del chocho, toto, concha o como quieran llamarle. Le pregunté: ¿ Es necesario madre que a los noventa años te depiles? y me contesta la muy bruja ¿ y tú con sesenta años no te haces pajas?
¡ Qué tendrá que ver una cosa con la otra!
Me tiene prisionero en una cárcel imaginaria, obligado por las circunstancias de la vida...
Estoy decidido a matarla, he de liberarme, llevo ya más de quince días echándole peusek en el café de las mañanas, pero nada de nada, la muy golfa está hecha de una pasta... Recuerdo que cuando cumplió ochenta dijo "este será mi último soplido de velas", joder con la vieja, ha enterrado a su marido, a Kennedy, a Franco, enterrará sin duda a Pinochet ( tampoco es duro este) y si me cabe a fidel y a los nietos de Fidel...
Decidido, abandono el peusek, iré pensando en otra fórmula...
Cuando terminé la depilación, le quedó el chocho como el rostro de Cher, sabes que es vieja, pero bonita...