¡Silencio! ¡Silencio!
Que lo estoy escuchando, pero no puedo diferenciar las palabras de esa melodia y comprender.
Se ve interrumpido por un cantar angelical que devuelve y eleva a alo desconocido.

¡El miedo se hace presente! ¿ Caeré si termina la melodia? ¿ como sabre si llegue?
Tenia tantos deseoa de viajar a una, tan solo una de mis imaginadas vivencias y poder viajar por mis cualidades y defectos que olvidé tener el control y me perdí. Aquí estoy tratando de escuchar nuevamente ese canto que me trjo a mi imaginación descontrolada.
No es que aquí no sea feliz, pero se supone que todo se complementa, estando aquí sólo puedo imaginar incontrolables momentos irreales propios de mi mente. Desearía seguir mi viaje e ir al egoísmo, envidia, alegria, a todas.

Estando aquí he perdido toda orientación de tiempo y todo se confunde en real o imaginación.

¡Silencio! ¡Silencio! Alguien viene. Me saludan. Buenos días, me dan muchos medicamentos y se van. ¿es real? Eran tres personas, vestidas de blanco y con muy poca comunicación hacia mí.

No comprendo la situación, tampoco tengo recuerdos ¿qué pasa? ¿dónde estoy? Todo esto me es tan ajeno que me desespero!

¡Silencio! ¡Silencio!
Que lo estoy escuchando, creo que sí! es el llamado, ¡me elevo!!
Me dejo llevar y creo que me iré a conocer otra realidad de mi imaginación, quizás cualidad o un defecto.
¡Eso era! Tenía que vivir en mi imaginación un tiempo y corregir lo descontrolable y podría seguir viajando!

***Con tanta emoción, se dejó llevar descontroladamente, perdiendo toda noción, acabando sin aire, perdiendo la vida, pero voló! y jamás comprendió que su vida se desarrolló en un centro psiquiátrico, que trataba de controlar sus delirios, productos de una descontrolable imginación.***