Te espero aquí, en el mismo lugar al cual llegué hace tanto tiempo.
Junto a tus playas fui a encallar, no me arrepiento.
Si hubiera llegado antes, todo hubiera sido diferente a lo que somos hoy, no lo deseo.
En tus mares llegué a naufragar, tú me has salvado.
Ahora que te pienso ya no puedo hablar, me has impresionado.
Una luz invade mis ojos, es el resplandor de tu ser.
Respiro tu aliento como si se fuera evaporar, cura mi adolorida alma.
No diré ni una palabra, no lo necesito.
Tú sabrás entender que significa mi gesto, no lo dudo.
Nunca ha sido imposible comenzar, hoy ha sido la excepción.
Tampoco sé como terminar, no quisiera hacerlo.
Sólo se que te espero aquí, sentado en donde me encontraste la primera vez.
Con el corazón en una mano, el alma en la otra, decidido a darte todo lo que soy.
Te espero aquí, hasta el momento en que decidas volver.
No hay recriminación, solo impaciencia de verte una vez más.
Te vuelvo a esperar como hace tanto tiempo ya no hacía, sé que vendrás.