Era mi novio.
Me miro, entro a la pieza, y me dijo que cerrara.
Me pareció raro, no me dio un beso, no me abrazo.
De inmediato temí haber sido descubierta, me senté en la cama y le dije.

- es mala suerte que le novio vea a la novia antes del matrimonio…y sonreí, esperando algún tipo de respuesta.

El me miró y comenzó a caminar, cual león enjaulado, de un extremo de la pieza hacia el otro.
Cada vez que quería hablar se detenía.

- habla hombre me estas desesperando!
Fue lo único que puede decirle.

• Me amas?

Por que me preguntas eso ahora, estoy pasándome mil rollos en estos momentos.
• ¿Por que cada vez que te pregunto si me amas, te ríes, miras hacia abajo, y me dices con voz poco convencida que si?

Yo no hago eso, o… no me he dado cuenta, prendí un cigarrillo, y saque una botella de ron que tenia escondida debajo de la cama.

• ¿Y eso?.. ¿Te pusiste nerviosa?..

No, solo es para que nos relajemos un poco, por lo general el alcohol en el cuerpo produce ese extraño fenómeno de soltar la lengua, y hacer hablar al corazón, quizás es eso lo que necesitamos hacer, hace tiempo, escuchar nuestros corazones.

• ¿En que momento dejamos de escucharnos?, esto del matrimonio me ha sacado de mi vida normal, se suponía que jamás pasaría esto, pero míranos, faltan horas para que todo se acabe, y estamos encerrados en tu pieza, tratando de decirnos algo, que no sé si queramos escuchar, con tu familia al borde del colapso, tratando de imaginarse por que estamos aquí… bebiendo ron.

¿Que quieres decirme?, yo quiero escuchar cualquier cosa, por que es mi vida, nuestras vidas las que estarán juntas hasta que la muerte nos separe.

• no te creo nada, es ese el problema, yo te amo, como jamás he amado, y creo que jamás amaré tanto como ahora, pero tú, no sabes si me amas, y es eso lo que he esperado escuchar hace tiempo, nunca pensé que llegarías tan lejos, debí decirlo hace algunos meses, y no lo hice por temor a escuchar…

¿Un si?, ¿un no te amo?...

• Si.

Me pare con la botella en la mano, bebí, fume, y comencé.

Hace algún tiempo conocí a alguien.
Fue ese día que no quisiste acompañarme a mi reunión de antiguos compañeros.
Cuando estaba cruzando la calle, se me acerco un tipo a pedirme fuego, luego seguimos caminando hacia el mismo lado, el me sonrió y me comenzó a hablar.
Íbamos al mismo bar.
Cuando llegamos ahí, a el lo esperaba un amigo, a mi solo dos compañeros, aún no llegaba el resto, cuando iba al baño, el tipo me hizo una seña, para que fuera, y yo fui.
Me presento a su amigo, era un actor, me gustó, no te lo voy a negar, la cosa es decir la verdad, pensé en ti, pero, sus ojos, eran cautivantes.
Después de un rato, ya habían llegado casi todos mis compañeros, solo faltaba la profe.
Cuando la profe llegó, me sorprendí al verla saludando a estos dos muchachos.
La profe era amiga de el, y el le pidió mi número.
Era el quien me llamaba, seguido, con el salía, no con mis amigas.
Te mentí, te engañé, pero todo fue, como se dice, debut y despedida, hace un mes que desapareció.

• ¿Y por eso te casas conmigo?, por que no te resulto con el actor.

Aunque suene cruel, le dije que nos fuéramos, que cancelaría todo, pero el desapareció, fui cobarde, no puede decirte nada, y seguí con esto.

• ¿Y seguirías con esto? ¿Hasta cuando? … igual que en las películas, ¿me dejarías esperándote? o ¿saldrías corriendo cuando te pregunten si te querías casar conmigo?

No sé.

• Al parecer tu nunca sabes nada! me estas destruyendo al vida, no te das cuenta!
Nunca debí proponerte matrimonio!.. Me llenaste de ilusiones, me hiciste imaginar a mis hijos, a nuestros hijos, con tus ojos, con tus labios, hasta en nombres pensé.
Compré un departamento, me endeude a 20 años, para que tuviéramos donde vivir, apenas me dieras el si.
Eres una egoísta, una maldita egocéntrica, no piensas en nadie mas que en ti, siempre fue así, estos dos años que llevo contigo, por mucho que te ame, es así.

Para, de verdad, yo no quería que esto pasara, sé que tu eres el hombre mas bueno del planeta, y me encantaría amarte como tu me amas, pero no es así, no lo puedo hacer, perdóname.

• ¿Que vamos a hacer ahora?, ¿cancelar todo? ¿Devolver los regalos, la torta, el vestido, mi traje?

Creo que es lo correcto.

Aún no terminaba la frase, cuando vi en frente de mi una pistola.




• Nos vamos a casar!, te guste o no…tu vas a ser mi esposa, y de nadie mas, por que solo la muerte nos puede separar, así que ahora te vas a poner tu traje blanco invierno, te vas a peinar ese maravilloso pelo, vamos a salir de aquí como si nada pasara, tomaremos el auto, llegaremos al registro civil y me vas a dar el si, o te mato… entendiste!

¡No!...
Comencé a llorar, se me acerco, y me empezó a desnudar con la pistola en la mano.
Me acerco bruscamente hasta el vestido.
Comencé a vestirme, y a llorar, pero el secaba cada lagrima que caía.

Salimos de mi pieza, con un olor bastante intenso a ron.
Sonreía, y el también.
Mi madre y mi padre se fueron en su auto, y nosotros en el mío.
Yo manejaba.

La pistola brillaba con el sol, ese sol de otoño, un sol tímido.
Quedaban dos cuadras para el registro civil.

Y doble hacia la izquierda, comencé a alejarme.
Los gritos de mi novio comenzaron a desesperarme, cargó al pistola, me miro, me exigía que detuviera el auto.

¿Me vas a matar arriba del auto?, ¿mientras manejo?... a vista y paciencia de toda la gente que esta afuera?
Matame ahora imbecil!

Saco un cuchillo y me lo enterró en el brazo.
Sangraba mucho.

Un semáforo en rojo.

Cruzando, mi amado actor.
Toque la bocina desesperadamente, me miró, vio mis lágrimas, corría hasta el auto.

Pero mi novio fue más hábil, me miro, me tomó del brazo herido,

¿Quieres morir ahora?

Lo mire y le dije

Si, si quiero.