Para Marta, mi Marta.
Siempre estás ahí,
amiga del alma.
Cuando necesité consuelo
tu me aguantabas,
ahora es mi ropa
la que está empapada
por tus lágrimas
tristemente derramadas.
Mi único propósito
Es una sonrisa en tu cara.
Aunque no todo vaya bien
algo bueno aguarda.
Mantente firme y en pie,
no pierdas la esperanza.
Tu me acomodaste en tus plumas
ahora descansa en mis alas.
Confía en ti misma
porque hay amores que de dolor matan,
no todas las sonrisas son dulces
también las hay amargas.
No caigas en la pena
ni te sientas abandonada
aquí están tus amigos,
para lo que haga falta.
Recuerda que tras la tormenta,
siempre llega la calma.
Aunque se que eres fuerte,
comparte tu carga.
Eso y más cosas
por ti sacrificaba.
Aquí está mi mente
muy apesadumbrada,
pero también tienes
mi alma sincerada.
Solo tu has conseguido
que así fluyan mis palabras.
Tu optimismo me inundó
y de vivir me entraron ganas.
¿Porqué te toca a ti,
una persona tan blanca,
aguantar tanto dolor
sin que te lo buscaras?
No sigas así
porque esto te mata.
Detente aquí,
de ese camino alejada.
y recuerda que
siempre hay gente que te acompaña.
Alguien como tu
jamás será olvidada
en nuestro corazón sigues
aunque llores en tu cama.
Le deseo lo mejor
a tu alma atormentada.
Dejalo ya
olvida al que amabas.
Deja de pensar en el
y de una vez descansa.