Perdí una vez, y pensé que nunca podría levantarme, llore una vez, y pensé que nunca volvería a sonreír, odie y pensé que nunca mas llegaría amar a nadie. Un día, una tarde o una noche talvez, ese día nunca lo olvidare. Es el día que recordare, eras quien me esperaba con gran ilusión, escondido en mi interior esperando el momento para mostrarte. Estabas ahí, tan solo y descuidado, odiando y amando, llorando y riendo sin cesar. Eras tu quien aguardaba en silencio.
Los días pasaron y fui descubriendo muchas cosas que desconocía, empezaba a volverme en un animal, acechaba, atacaba y destruía a quien me hacia daño, me volví amante de la vida, me convertí en mi propio redentor, salí del agujero de donde me había metido solo, volví a sentir el viento acariciar mi piel, sentí como el sol llenaba de vida mi soledad, la luna una amante perfecta.
No me pusiste ninguna condición, me enseñaste amar la vida, me confiaste tus más lívidos secretos. Me mostraste de lo que podía ser capaz con tan solo esforzarme por alcanzar aquel sueño que creía muerto, pues solo dormía tu lo despertaste y cuidaste como si fuese un niño tal cual arropaste en sus noches de soledad, acariciabas sus exquisitos contornos, alimentaste cuando de hambre moría, y sin pedir nada a cambio me lo entregaste rebosante, lleno de vida. Ahora solo me dices con tenue voz “Críalo, como si fuese yo, aliméntalo como si fueses tu, amalo como aquella persona que llena tu vida de amor y ódialo como aquel que algún día intento dañarte.
No podrás seguir respirando el humo del dolor, solo dejaras de sangrar si dejas de llorar, es fácil caer, que difícil es volver a pararse y aprender de mis errores, todo lo que cuesta es lo que mas se disfruta, mas la muerte es el fin de todo y aunque se que un día no hoy, no mañana algún día me vencerá por lo tanto debo de seguir luchando y alcanzar mi mas preciado tesoro mortal poder vivir en libertad y poder morir en paz.
Me volví lo que yo decidí, caí y aprendí, llore y volví a reír, odie y ahora se lo que es amar, fue un día, una tarde o una noche tal vez, es el día que jamás olvidare.
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