Como todos los dias volvimos al tema de que a ti te faltaba esencia, que algo en ti no existia en mi, pasamos varias decadas, varios encuentros miles de momentos, pero nunca se te notaba, y despues de todo esto encontre conclucion, y esque a ti mujer te falta un Corazon. Despues de varios examenes sofisticados de sonido metaforico de mi oreja en tu pecho no encontre sonido ruido o un simple palpitar que pudiera a mi vida una esperanza brindar. Despues de ese arduo empeño encontre esa conclucion y rapidamente me lanse al doctor. Le explique lo que pasaba, y casi de un susto asota el suelo, me grito y casi sin aire me dijo que no podia creerlo. Que ahora ya veia por que la razon de tu fria y austera vida. Vi mas alla de lo que tenia enfrentre, vi todo, por que te vi a ti y vi las razones de tu frialdad. Corrimos a un minero a buscarte un corazon de hierro, creimos que este metal pudiese tomar el lugar hueco en tu interior. Antes de tomar esa decision, pensamos en madera como corazon, en varios materiales, en metal, en hierro, hasta uno de hielo, tambien creo pensamos en uno de plantas, para que sus raices en ti se sembraran, pero el doc me dijo que eso seria muy mal a largo tiempo, que verde te pondrias, y bueno ya paso el tiempo y decidimos mejor el hierro, por el simple echo de que te falte o no te falte ya estabas acostumbrada a no sentir nada.

Primera parte de la chica que no sentia nada.